no estamos hablando de las cosas que hacemos para Él, sino de cómo Cristo va creciendo dentro de nosotros. Si Él no crece en los santos, todo lo que se haga quedará en el marco del activismo.
Hace miles de años la humanidad fue raída de la faz de la tierra por este fenómeno geoclimático al que sobrevivieron sólo algunas personas y animales. Este hecho marcó un antes y un después en la civilización.
Testimonios de mujeres drusas se Siria que arriesgan todo por seguir a Jesús, aún a pesar del repudio de su familia y la poca valoración que tienen hacia las mujeres en este grupo religioso.
Hace unos meses hablaba con un colega pastor que me dijo de manera tajante “en la pandemia, las iglesias grandes se harán más grandes y las pequeñas serán más pequeñas”.
Ya no alcanza con festejar una vez al año el nacimiento del Salvador, sino que debemos tomar conciencia de la necesidad de este incremento de su vida en nuestro ser interior