Todos los convocados estarán reunidos durante tres días para orar, entrenarse y ser desafiados a otro nivel.
En el día de ayer comenzó la primera jornada de Argentina Oramos Por Vos a salón lleno en el NH Gran Hotel Provincial de Mar del Plata en donde se dieron cita ministros/as de todas parte del país para entrenarse, orar y tener comunión con gran parte del cuerpo de Cristo.
“No te acomodes, no te conformes con lo que eres, con lo que estás viviendo. Tienes que tener hambre y sed dentro de ti de estirarte y de vivir más de lo que estás viviendo hoy”.
Juan Vereecken, Argentina Oramos Por Vos.
La comisión directiva comenzó orando por el evento y por el ministro Pedro Ibarra. Luego fue el pastor Daniel Piri el encargado de abrir la primera plenaria de “Cielos Abiertos sobre Argentina” lema que caracteriza esta convocatoria.
Hubo también un momento de adoración, ministración al Señor y clamor por el país para después darle espacio a la Palabra.
Juan Vereecken, encargado de llevar adelante maxwell leadership español dio el primer taller y desafío a los pastores diciendo “no te acomodes, no te conformes con lo que eres, con lo que estás viviendo. Tienes que tener hambre y sed dentro de ti de estirarte y de vivir más de lo que estás viviendo hoy”.
La Corriente está cubriendo el evento junto a todos los líderes, ministros y pastores para registrar cada momento vivido en esta intensiva capacitación.
Argentina Oramos Por Vos 2023
¿Como comenzó Argentina Oramos Por Vos?
Hacia fines del 2001, Argentina experimentó una crisis política, económica, social, emocional y, por supuesto, espiritual. Fue en esos momentos de profunda descomposición, angustia colectiva, violencia, extrema necesidad material, desconcierto político y aguda decadencia espiritual, que nació un movimiento del Espíritu Santo llamado Argentina Oramos por Vos.
Los pastores Pedro Ibarra y Osvaldo Carnival comenzaron con una sencilla reunión para ministrar y alentar a algunos pastores que estaban sufriendo en sus congregaciones los efectos de la crisis. En cuestión de pocas semanas, Dios atrajo a muchos pastores más a interceder por nuestro país.
Cientos y cientos de pastores a lo largo de varios años nos congregamos todas las semanas para clamar a Dios, confesar nuestros pecados y los de la nación, rogar su misericordia sobre nuestro país y pedir un avivamiento con transformación para nuestra amada Argentina.
La ausencia de gracia y verdad está produciendo decadencia espiritual, que permanece oculta detrás de un activismo ficticio
Descubrir y conocer la voluntad de Dios jamás marcará la diferencia en nuestra vida, a menos que estemos dispuestos a dar el primer paso hacia su ejecución.
Cuando observamos las Escrituras y nos detenemos en la vida de aquellos hombres y mujeres que Dios escogía para su propósito, vemos que ellos no solo se quedaban en el conocimiento de lo que Dios deseaba realizar, sino que avanzaban hacia el cumplimiento de aquello que conocían.
Noé construyó el arca, luego de conocer con precisión lo que Dios esperaba de él; Moisés conocía los planes de Dios con su pueblo, pero tuvo que accionar; Gedeón sabía que Dios quería derrotar a los amalecitas teniéndolo a él como general, y tomó acción para cambiar la penosa realidad del pueblo de Dios. Y así, muchos más, por no decir todos. No obstante, permítanme mencionarles a una persona que obedeció sin tener conocimientos precisos y puntuales: Abraham salió de su tierra, aun sin conocer los detalles del lugar al que llegaría; solo había recibido la orden de salir.
Percibo que estamos frente a una generación que todavía no ha conocido al DIOS QUE HABLA. Dicen que Él les habla, pero sus vidas testifican lo contrario. ¿Acaso existirá alguien que después de oír a Dios se quede en la misma posición? Quizás ellos sean procastinadores: Personas que viven postergando lo comisionado por la escasez de gracia en sus vidas, ya que quien está carente de gracia, siempre buscará sentirse fuerte en alguna faceta de su humanidad (posibilidades, habilidades y posesiones naturales).
Desobediencia no solo es “no hacer” o “hacer a medias”. Desobediencia también es querer realizar lo encomendado “fuera de tiempo”. Me imagino a Noe comenzando a edificar el arca cuando veía que los nubarrones se venían y era inminente el aguacero.
Me he dado cuenta de que la procrastinación es la ausencia de gracia y verdad, por causa de una memoria atrofiada, o una vida amnésica en cuanto al diseño divino. Digo esto porque quien les escribe era un “procrastinador serial”, siempre esperando las “posibilidades” naturales y humanas para dar el primer paso, algo que se refleja en muchas áreas de nuestra vida.
El Reino de Dios no es apto para cobardes. ¿Quiénes son los cobardes en el Reino de Dios? Aquellos que han aprendido a poner rápidamente la mano en el arado, pero posteriormente miran hacia atrás (Lucas 9:62).
«Cuando dejamos de alcanzar la gracia de Dios, comenzamos a carecer de aquel valor que necesitamos para ejecutar la voluntad de nuestro Padre celestial».
Julián Ríos
Y esto no es para menos, ya que sin gracia es imposible obedecer y ejecutar una orden divina.
La insuficiencia de gracia está conduciéndonos a una decadencia espiritual camuflada de frases, que decimos hasta con jactancia: Por ejemplo: “Estoy esperando el tiempo de Dios”; “no quiero adelantarme a Dios”; “estoy orando”, etc.
La decadencia espiritual se ve en postergación, en desobediencia, en reacciones cotidianas a lo que va aconteciendo, en cobardía y en frases que tan solo son adornos y túnicas que tapan nuestra corrupción.
La ausencia de gracia jamás podrá ser reemplazada por nada que exista en este mundo, incluidas las riquezas materiales, humanas e intelectuales. Cuando la gracia escasea, nuestra vida toma una dirección de deshonra que no genera dolor (insensibilidad), porque nos hemos acostumbrado a la realización de cosas que “parecen su voluntad”. Esto trae debilidad, dudas y sospechas cuando se debe dar un paso hacia la ejecución del deseo eterno.
Todo lo contrario sucede cuando la gracia nos satura. La saturación de gracia nos lleva no solo a conocer la voluntad de Dios, sino a ejecutarla; sencillamente, porque su gracia nos vuelve fuertes, capaces y valientes para gestionar la voluntad de Dios.
Fuera de su voluntad, solo hay cobardes llenos de deseos y expectativas, pero quienes dan EL PASO hacia el corazón de Dios, son provistos de valentía, dignidad y fuerzas para la misión. Recordemos que nuestra razón de vivir es hacer la voluntad del Padre. No hay nada en este mundo que pueda sostenerte… solo el HACER SU VOLUNTAD (Mateo 7:21).
Te animo para que en las próximas horas, al doblar tus rodillas, puedas hacer una oración cargada de la única necesidad: su gracia. Que tus tiempos de oración sean ámbitos propicios para conocerlo más a Él, y no solo para dejar tu lista de necesidades. Percibo que estos días serán cruciales para conocerlo más profundamente y experimentar el incremento de su gracia. De esta manera, estaremos enteramente preparados y provistos para suplir Ssu deseo.
La entrenadora con más victorias en la historia del baloncesto femenino de la Universidad de Elon expresa que su objetivo final es impactar a sus jugadoras con el amor de Cristo y glorificar a Dios.
La entrenadora con más victorias en la historia del baloncesto femenino de la Universidad de Elon expresa que su objetivo final es impactar a sus jugadoras con el amor de Cristo y glorificar a Dios.
Charlotte Smith, una exjugadora de la Women’s National Basketball Association (Asociación Nacional de Básquet Femenino, en español), que hace 13 años dirige al equipo universitario, fue honrada en los K-Love Fan Awards, una entrega de premios votada por fanáticos de la música cristiana, los deportes, los libros y las películas estadounidenses.
El mes pasado, Elon ganó dos campeonatos de conferencia consecutivos, en 2017 y 2018, además de avanzar al Torneo de la NCAA, una asociación compuesta de programas deportivos universitarios en los Estados Unidos de América, por única vez en la historia.
“La vida de los deportes es una vida donde constantemente estás en una cinta de correr de rendimiento. Y si no estás arraigado en tu identidad y en quién eres, puedes perderte, puedes ser tragado. Y con demasiada frecuencia, como atletas, nos encontramos en la taza de medir donde sentimos que no estamos a la altura y que no hemos rendido al máximo de nuestra capacidad”.
Smith es autora de dos libros de devoción, When Coaches Pray [‘Cuando las entrenadoras oran’] y When Athletes Pray [‘Cuando los atletas oran’]. Se destacó en la Universidad de Carolina del Norte, donde conectó el lanzamiento ganador en el partido por el campeonato nacional de 1994.
“Quería ser una MVP [Mejor jugadora], quería ser una All-Star. Y en la WNBA, nunca fui MVP, nunca fui All-Star. Puedo recordar un día en que sentí que el Espíritu Santo me susurraba: ‘¿Qué has hecho por mí últimamente?’. Porque me había consumido demasiado buscar el éxito del mundo. Y eso cambió toda la trayectoria de mi perspectiva, en términos de pensar: tengo esta increíble plataforma, ¿qué puedo hacer para usarla para la gloria de Dios?”, comentó Smith.
Además, agregó: “Cuando nos rendimos a Dios, no hay nada en nuestras vidas que nos falte”,con lo cual enfatiza su lugar en el Reino de Dios.
“Los cristianos somos amados, aceptados, elegidos y guardados para estar solamente con Él. Y esas son las cosas que trato de reiterar a mis jugadoras para que sepan quiénes son en Cristo”, dijo.
Cuando obtuvo el premio, la entrenadora contó la historia de una temporada perdedora, “una de las peores” de su carrera, cuando su equipo logró muy pocos de sus objetivos. Al terminar el último partido, la madre de un niño pequeño le dijo a Smith que quería que ella lo guiará a Cristo. “Lo llamo el mejor campeonato que he ganado en la cancha de la Universidad de Elon. Pude llevar a ese niño a Cristo”, expresó.
Luego de tantos años al mando del equipo, la Palabra de Jesús fue creciendo en el interior de la entrenadora para hacerlo público en la entrega de premios, movilizada por el Espíritu Santo y utilizando el deporte como una herramienta de transmisión del Evangelio de Jesucristo, nuestro Señor.
En el marco del congreso “Reino, Influencia y Poder” en Rosario, Sebastian Liendo conversó con Alex sobre su viaje a Israel, el trabajo del Señor en la Iglesia, el idioma de Dios y el amor del Padre a través del Hijo.
En el marco del congreso “Reino, Influencia y Poder” en Rosario, Sebastian Liendo conversó con Alex sobre su viaje a Israel, el trabajo del Señor en la Iglesia, el idioma de Dios y el amor del Padre a través del Hijo.
Viaje por Israel
Israel es importante, sobre todo porque estuvo Jesús. Era su tierra, Él era judío. Y poder ver la Biblia en 3D y a color, pasear por Capernaum donde Jesús llamó a Pedro, Andrés, Juan, Jacob, pasear por el jardín de Getsemaní, poder ver desde el Monte de los Olivos la ciudad de Jerusalén, tener el privilegio de conocer la ciudad de Belén, Jericó, el monte de las tentaciones, ir en barco por el mar de Galilea. Esas, son cuestiones que una vez estando allí, son muy inspiradoras.
El trabajo del Señor en la Iglesia
Seba: A mí me impacta hacer el paralelismo de la realidad con la Iglesia, el hecho de que siempre está la sensación de que algo mejor está por venir y a veces nos hace sentirnos incompletos. El no sentirse pleno, te hace todo el tiempo ir detrás de la zanahoria, buscando algo que te pueda suplantar o algo que te pueda llenar, pero no entendiendo que lo mejor ya vino y habita en nosotros.
Alex: Hay un libro que se llama “Teología de la esperanza”, y habla acerca de que tenemos que vivir el presente desde el final, desde lo que sabemos, desde la espera de nuestro Señor que viene. Ya está viniendo y nosotros tenemos una espera activa.
Como Iglesia en nuestro ADN está vivir en medio de la incertidumbre donde se ejerce la fe, la cual no se ejerce cuando está todo claro, porque cuando se tiene certezas visibles no hace falta ejercer la fe. Pero en medio de la incertidumbre, de este entorno cambiante, es cuando necesitamos anclarnos, a mi juicio en dos puntos:
Primero en la fe dada por la Palabra de Dios. Poder vivir desde los principios.
Segundo, vivir desde la esperanza futura y mientras tanto, interpretar nuestro presente desde los principios eternos. Los principios no cambian, pero la aplicación de esos principios.
“Volver a lo que la Iglesia no puede dejar de hacer, perseverar para ser fiel a su llamado; y sólo siendo fiel a su llamado, creo que se puede ser una iglesia relevante”.
Un autor que me gusta mucho dice que “El mejor favor que le podemos hacer al mundo es ser la Iglesia”, y esa es la manera en la que podemos ser la sal de la tierra, ser lo que somos.
En Israel estuve en la casa de Simón el curtidor, ahí es donde Pedro recibe esta visión donde el Señor le dice: ‘mata y come’, a lo que Pedro dice ‘No señor’, Pedro no quiere actualizar, él es muy judío. Él en su cultura está diciendo ‘no estoy dispuesto a dar este paso de misión’, mientras Dios está trabajando en Pedro a la vez, Dios está con el centurión romano Cornelio en Hechos 10.
Podemos ver a Dios trabajando a dos manos, por una parte ayudando a un gentil llamado Cornelio a acercarle a la fe, pero también está preparando a la iglesia para la misión que Él está preparando. Dios está por delante, pero también tiene que hacer que Pedro se convierta y dé un paso más, porque él tiene que luchar con todos sus prejuicios.
El Señor tiene mucha paciencia, entonces yo creo que la misión nos está esperando y el Señor también está trabajando en la Iglesia para prepararnos para la misión en la que Él ya está trabajando.
¿Entender el idioma del Padre?
Seba: A veces tenemos que saber en qué hombre estamos analizando las cosas. Si analizamos el hombre terrenal o analizamos el hombre espiritual, pero cuando moris, se abre una puerta que te deja ver, muchos veían a Pablo escribiendo las cartas en una cárcel, pero él se había sentado en lugares celestiales. Empezás a analizar desde otro hombre para juzgar desde otro hombre.
Alex: A mí me gusta la idea de que a veces queremos entender para obedecer. No tenemos la capacidad de entenderlo todo y uno tiene que aprender a dar pasos de fe, no en una fe ciega o infantil, pero sí como la de un niño con su padre. Yo cuando era niño había cosas que mi padre me decía, ‘cuando seas mayor lo entenderás, pero ahora confía en mí’.
Y ese amor de padre hacía que yo confiara en él, aunque no lo entendiera. Y ahora que soy padre, es que lo entiendo y creo que a veces nuestro orgullo, creernos la última Coca Cola del desierto, nos está impidiendo disfrutar de lo que Dios tiene preparado para nosotros.
Seba: Yo creo que parte de la vida, del nuevo nacimiento es que confiamos en las victorias de Cristo y que nos llevaron al Padre.
“Jesús es el perdón de Dios, es el lugar santísimo, es la manera que tenemos como seres humanos de entender a Dios”.
Alex: Mi epístola favorita es Hebreos, el autor pone a Jesús en el centro y nos dice cosas tan increíbles como que ‘Él es el único lugar de encuentro con Dios’. No hay otro sitio para encontrarse con Dios que Jesús.
No hay otra manera. Jesús es la puerta de acceso, es el templo, es el sacrificio. Jesús es el perdón de Dios, es el lugar santísimo, es la manera que tenemos como seres humanos de entender a Dios. Sin Jesús no hay manera de entender a Dios.
Algo que a mí me llena de esperanza de lo que Dios. Jesús es el idioma de Dios, es la manera de interpretar a Dios.
El amor de Dios
Seba: El otro día vi Harry Potter 1 y él tenía todo dentro, pero no sabía cómo expresarlo y otro le dice ‘quedate tranquilo que no te va a ocurrir nada porque vos sos fruto de un sacrificio de amor”. Y yo cuando lo escuché dije, ‘en esto conocen lo que es el amor, pero Cristo murió por ustedes’.
Alex:Hasta que no conocemos eso, no conocemos el verdadero amor. El mundo cree conocer el amor, pero en esto hemos conocido el amor que Él dio su vida, y a partir de ahí podemos construir una vida sostenible eternamente.
Seba: El amor sigue siendo el poder más grande del mundo, porque es lo único que el diablo no puede imitar. El diablo puede imitar todo lo que quiera, pero no va a poder nunca imitar el amor, porque Dios es la sustancia del amor.
Alex: Es un amor sacrificado, un amor que se entrega al otro, me parece increíble. Dios es la eternidad anhelando entregarse. Pero la creación es un acto de entrega de Dios, no solamente de creación, sino también de redención y de perdón, me gusta decir que Dios me creó, pero desde este lado de la eternidad, Dios me creó para perdonarme.
Él sabía lo que le iba a costar hacerme y dijo ‘Amén, está bien, lo voy a hacer’ como una expresión de su amor entregado y ese amor es el que puede hacer que nosotros le digamos sí.
En ocasiones parece que rotular a los que todavía no conocen a Jesús como “mundanos” o “los del mundo” nos ubica en un lugar de privilegio… ¿Será eso lo que Jesús quiso decir al orar? ¿Es correcto el “ellos o nosotros”? ¿Somos llamados a conformar un gueto o una red?
El evangelio de Juan relata, en lo que conocemos como capítulo 17, un momento cúlmine: Jesús orando por sus discípulos y por nosotros. Como sucede con otros pasajes, se ha realizado un recorte muy interesante de él. Eso de “no son del mundo” del versículo 16, se transformó en la cosmovisión dominante en muchos ámbitos. Una barrera que nos acompaña incluso hasta hoy: los del mundo a diferencia de nosotros, los santos.
Como con todo pasaje, esta frase debe ser comprendida en su contexto. La oración de Jesús como un todo, ofrece palabras clave que pueden facilitar la comprensión: mundo, ser, enviados, santifícalos, verdad, crean; son algunas de ellas, y necesitan ser analizadas como una estructura. Siempre teniendo en cuenta el mensaje completo que Cristo dejó allí. Es aquí donde surgen los inconvenientes interpretativos.
¿Qué quiso decir Jesús con esto de que no somos de este mundo? Muchos lo sabemos en la teoría, pero en la práctica cotidiana seguimos sosteniendo la diferenciación entre “ellos”: los del mundo, los perdidos; y «nosotros» los que ya no lo somos. ¡Y es verdad!, hemos sido librados del poder del maligno, pero cuanto más se filtre en nuestros discursos esta idea discriminatoria, menos luz y sal seremos.
Qué significa “mundo”
Será pertinente delimitar el concepto “mundo”, kosmos, en este pasaje puntual de Juan 17. Puede tener varias connotaciones: por metonimia, de gente o por otro lado puede comprenderse como planeta Tierra, o como sistema. Esta última acepción, sobre todo, es la utilizada por Juan en el relato de la oración de Jesús.
No somos de este mundo como sistema, ya que nuestra identidad de hijos de Dios nos aleja de los parámetros, valores y principios que este sustenta.
El “somos” nos habla de adopción, nueva naturaleza. Jesús no era del mundo, nosotros tampoco, ya que hemos sido adoptados espiritualmente hablando; somos coherederos con Cristo (Efesios 1:5; Romanos 8:17).
Ahora bien, la palabra “mundo” también es mencionada reconociendo que este nos aborrece como lo hizo con Jesús (v.14) aquí se trata de la gente que habita la Tierra. Esto también es cierto; muchas veces ser seguidores de Cristo se trasluce en rechazo y abandono; sin embargo ¡Él oró por nosotros! Tengamos paz (v. 20).
Siendo rigurosos en esto de comprender el versículo 16 (que es una aclaración del versículo 14) como parte de la estructura que compone la oración, cuando Jesús menciona nuevamente kosmos, ¡lo hace para enviarnos a él! ( v. 18). Además, con un propósito; es decir, no somos pero estamos para algo. Entonces, ¿gueto o red? ¿Evangelio centrípeto o centrífugo?
Hay otros conceptos importantes: “Santifícalos en la verdad”, “ que sean uno”, “para que el mundo crea”. El hilo de la oración no está completo si se recortan estas pequeñas frases. Cómo podría ser la meta vivir apartados, como parte de una “raza superior” o teniendo temor a la “contaminación mundana”, cuando Jesús nos envía a él.
Santificarnos en la verdad guarda relación con la metanoia, ese cambio que la Palabra de Dios va produciendo por la luz del Espíritu Santo, una vez que aceptamos a Jesús como Salvador y Señor. Hay un antes y después de la cruz, una nueva posición en Cristo: santos. Hay un proceso de santificación que concluirá en su presencia. Jesús le pidió al Padre que su verdad operara esa santificación en la vida de sus hijos, ya que ellos no eran del mundo.
Cuando avanza la oración, el pedido es por unidad; esa que se vincula con la identidad de hijos y con el propósito; es decir, para que el mundo crea. Solo siendo uno, como el Padre y Jesús lo son, es que puede alcanzarse la meta; aquello por lo cual somos enviados.
Entonces no somos, pero estamos, para que otros lleguen a ser…
El campo es el mundo…
Que el mundo, la gente, crea en Dios, pareciera ser, en parte, resultado del cumplimiento del envío, según lo expuesto en la oración. Ellos creerán en Cristo, o sea en el Evangelio, por nuestra unidad y por nuestras palabras. Es decir, no solo discurso, sino también testimonio. Ahora bien, esto más que un llamado al separacionismo, parece ser un proyecto expansivo; estar en el mundo todo lo que podamos, para que crean en Él.
Entonces, ¿Qué quiso decir Jesús con eso de “no son del mundo”?, ¿Qué pedía al Padre? Tal vez el camino es inverso; la idea no es que nos apartemos de este para santificarnos en la verdad, sino que, santificados en ella, vivamos de tal manera que el mundo crea.
El misionero Francisco Antônio no desistió de su fe a pesar de numerosos atentados y sirvió en dos de los países con mayor persecución. Este sábado fue asesinado en su auto.
El homicidio del hermano Francisco Antônio Chagas Barbosa, de 39 años, fue confirmado el pasado 10 de junio. Fue asesinado a tiros e incendiado en su coche en la capital de Kenia, Nairobi.
Anteriormente ya había sido víctima de otros atentados, razón por la que cojeaba de una de sus piernas, según notificó la organización Misión Cristiana Mundial, para la que trabajaba. Sin embargo, el misionero y pastor no desistió de su fe y de la misión de llevar a Cristo a aquellos lugares a los que pocos se animan a ir.
Hoy Antônio, ya se encuentra cara a cara con su Señor Jesucristo, el cual se transmitió en dos regiones con grave persecución de cristianos, Kenia y Sudán del Sur.
El hermano dedicó sus días a trabajar con niños, jóvenes y adultos a fin de que conozcan a Cristo.
Ambos países están en la lista de Países en Observación 2023, lo que significa que son lugares vigilados por los analistas de la organización Puertas Abiertas debido a la gravedad de los informes sobre persecución que ocurren en la región.
Kenia y Sudán se encuentran entre los 50 países más peligrosos de la Lista Mundial de la Persecución en años anteriores, pero debido al acelerado aumento de la persecución en otras regiones, han sido superados en la lista.
Francisco fue hallado muerto en el interior de un coche carbonizado en Nairobi, Kenia, país en el que vivía desde 2017.
«Dos hombres lo agarraron, lo metieron dentro del vehículo y en ese momento fue ejecutado», comentó su esposa ,Franciane Barbosa, también misionera quien publicó un video en las redes sociales explicando lo sucedido.
El pastor, a quien dispararon antes de quemar el coche, llevaba desaparecido desde el 7 de junio cuando salió de su casa para ir al supermercado. Al ver que no regresaba y que su celular estaba apagado, su mujer interpuso una denuncia.
Según la organización, el mismo día del asesinato, testigos vieron el coche de Francisco a las 21.00 hora local circulando a gran velocidad por Nairobi y con un grupo de jóvenes en el interior.
El carro fue encontrado carbonizado en la localidad de Mwihoko, en el condado vecino de Kiambu, con el cuerpo de Francisco en el interior.
El horror no pasa desapercibido. Por eso desde La Corriente invitamos a todos los hermanos que lean esta nota a interceder por la vida de su familia, para que abracen el consuelo de Dios en este tiempo.
“Lo que le ocurrió a Francisco refleja la realidad de miles de cristianos perseguidos en Kenia y Sudán del Sur y en toda el África subsahariana. A pesar de la persecución, el director de la organización que envió al misionero confirmó la dedicación de Francis en una entrevista al portal g1: ‘Pero se mantuvo firme en su llamado, atendiendo a viudas, huérfanos, refugiados de las guerras en los países cercanos. Hizo un trabajo excepcional’.
«Francisco deja un legado único en las misiones. Su obra llegó a niños, viudas, personas que luchaban contra el hambre y la sed», añadió la Misión Cristiana Mundial.
Además de la familia de este misionero tampoco debemos olvidar orar por aquellos miles y miles de hermanos en todo el mundo que están llevando el Mensaje y sufren persecución. El motivo principal debe ser que ellos puedan aferrarse firmes a Cristo aún en los momentos de mayor opresión en el labor de transmitir el Evangelio.
Un reconocido actor de la serie The Chosen está haciendo pública su fe, explicando que nunca había tenido un encuentro personal con Jesús hasta que tomó el papel de Zebedeo en el éxito basado en la Biblia, además de ser guiado por los cristianos detrás de la producción.
Nick Shakoou dijo que la serie ha tenido un impacto significativo en su vida. Su personaje interpreta al padre de los discípulos de Jesús, Santiago y Juan. El actor titula a este suceso como ”un cambio importante», refiriéndose a su vida.
El creador y director, Dallas Jenkins, se ha mostrado abierto sobre el hecho de que la serie contrate a cristianos y no cristianos por igual para el reparto y el equipo, explicando que el objetivo es ser guiados para contratar a la mejor persona para cada papel.
Shakoou dijo que creció en un ambiente cristiano, pero que nunca tuvo una conversión personal o un encuentro propio con Jesús. El actor agregó que ha sido guiado en el set de The Chosen por los trabajadores detrás de escena, los cuales son cristianos, y por sus amigos, lo que en conjunto lo condujo a “buscar a Dios a través de ellos».
Además, explicó: «Todo se acumuló hasta que me invitaron a una reunión de la iglesia, donde lo siguiente que supe fue que un montón de gente me rodeó, pusieron sus manos sobre mí y comenzaron a orar. Pude experimentar lo que era sentir al Espíritu Santo yendo de fuera hacia dentro, y eso hizo que mi cuerpo ardiera en llamas».
Nick Shakoou interpreta a Zebedeo en la serie The Chosen.
«Sentí como si todos mis órganos estuvieran siendo quemados y yo estaba siendo vibrado y microondeado al mismo tiempo. Es la mejor forma en que puedo describirlo», explicó el actor que interpreta a Zebedeo.
«Me sentí literalmente como si me hubieran dado un cuerpo nuevo, todo nuevo. Mi mente está sorprendida por lo que ha sucedido. La serie ha sido una bendición y me ha encantado actuar en ella. Pero sin duda ha sido el conducto del que no puedo evitar hablar».
Shakoou dijo que se enteró de que uno de los principales trabajadores de la construcción en el set de The Chosenhabía orado para que un actor se convirtiera.
Uno de los obreros del set comentó: «Nos reunimos como equipo de construcción y oramos para que uno de los actores recibiera el Espíritu Santo, y que el actor se convirtiera en la semilla que difundiría el Evangelio”.
¿Te pasó luchar mucho tiempo con alguna debilidad?
Parece ser que la historia se repite una y otra vez. Cuando leemos el libro de Éxodo vemos al pueblo de Israel ser liberado por la poderosa mano del gran “Yo soy”. Casi dos millones de personas vieron caer siete plagas sobre los egipcios, fueron testigos del mar abrirse camino para que pasen los escogidos, la columna de fuego y la nube de día, el maná ultra nutritivo que cayó del cielo y muchas maravillas más.
Sin embargo, vagaron durante cuarenta años en el desierto, wow, casi toda una vida dando vueltas en un lugar que era de tránsito. Leemos mil veces esta historia y nos asombramos ¿Cómo pudieron morir y no entrar a la tierra prometida?
Bueno, amigos, esto es sombra y figura de lo que sucede en nuestras vidas hoy. Muchos de nosotros vimos grandes milagros de parte de Dios, vimos su mano poderosa en nuestra vida, fuimos trasladados de esclavitud a libertad, pero nos quedamos en los desiertos de nuestra alma.
Luchamos con debilidades, pecados, quejas, temporalidad, dudas, desconfianza, murmuración y así se nos pasan, 5, 10, 40 años de nuestras vida como agua entre las manos.
¿Cómo salir de este círculo vicioso?
El autor de los gálatas nos deja una pista para vencer a nuestros deseos pecaminosos. Si despejamos la x de la ecuación podremos resolver el problema.
Pablo apunta a una palabra que pasamos de largo, naturaleza. Los deseos son los frutos de un árbol, y nosotros hacemos agua cuando combatimos con los deseos, porque es como cortar las ramas de un árbol frondoso y fuerte. Aunque lo podemos volverá a crecer.
Nuestro problema no son los deseos, sino la fuente que los origina: “nuestra naturaleza pecaminosa”. Tenemos que desmontar la fábrica que manufactura nuestros deseos de pecar e ir contra la voluntad de Dios. De nada sirve cambiar la maquinaria de lugar, ese sistema de producción debe ser implosionado de adentro hacia afuera.
¿Alguna vez vio cómo se derriba un edificio?
Se pone dinamita en los cimientos de manera estratégica para que el edificio caiga por completo sin generar daños colaterales. Si en lugar de poner explosivos por dentro, se quisiera tirar un misil balístico desde afuera, eso traería tal vez muerte innecesaria, y tampoco quedarían derribados los fundamentos.
Así que Dios, nos da su “dunamis”, su Espíritu Santo, en el original se traduciría dinamita. Y ese poder que nos otorga el Padre en Jesucristo, no es para orar por enfermos, expulsar demonios, o hacer milagros, no primeramente es para demoler de manera programada nuestra “fábrica de deseos pecaminosos”.
Dios necesita derribar nuestros cimientos para construir su edificio en nosotros, la iglesia de Cristo. Es por eso que ahora resolvemos la otra parte de la ecuación y es la Y. Sólo lo podemos hacer si andamos en el Espíritu.
Podemos oír una y mil veces que tenemos que morir y permanecer en la cruz de Cristo juntamente con él. Pero nunca lo podremos lograr con nuestras fuerzas ¿acaso no lo notó? ¿no se siente frustrado querer alcanzar la santidad bajo sus propios medios? Querer llevar una vida moralmente aceptable se hace una carga muy difícil de sostener.
Tal vez se niegue a un montón de cosas, pero nunca podrá negarse a usted mismo por completo. Porque ¿si usted lo pudiera hacer? entonces para qué necesitaría al Espíritu Santo. ¿Lo ve?
El Espíritu Santo, puede hacer lo que es imposible para los hombres. Llevarnos a morir gozosamente, para cumplir la voluntad del Padre.
Usted y yo, ya sabemos que tenemos que hacer, pero ahora sabemos con quién hacerlo. No son nuestras fuerzas ni nuestros esfuerzos. Es andar en la maquinaria perfecta del Espíritu.
¿Está listo para esta aventura? Debemos darle el permiso de agendar el derribamiento de nuestra fábrica interior para ver su majestuosa construcción en nosotros. Porque el que comenzó la buena obra, la terminará por completo.
El delantero manifiesta su fe en Jesucristo en sus redes sociales donde suele publicar versículos bíblicos y mensajes de agradecimiento a Dios.
El delantero manifiesta su fe en Jesucristo en sus redes sociales donde suele publicar versículos bíblicos y mensajes de agradecimiento a Dios.
El intrépido delantero no tiene miedo de dar su testimonio de fe ante los medios de comunicación y también aprovecha al máximo el alcance de sus redes sociales para hablar de su fe y como esta le ayuda a mantener la tranquilidad y la concentración en el campo. Confesó públicamente que su deseo principal es ser un ejemplo para otros jóvenes que desean seguir a Cristo.
Santiago Giménez, es un futbolista méxicano de 22 años, y se desempeña como delantero en el Feyenoord de los Países Bajos. Debutó en el Cruz Azul pero rápidamente dio su salto a Europa, convirtiéndose en una de las promesas para el fútbol mexicano. Además de sus logros deportivos, se distingue por su fe cristiana, la cual le ayuda a superar obstáculos y a mantener la humildad en todo momento.
Nació en Buenos Aires, Argentina, pero cuando era pequeño, Santiago se mudó a México junto a su familia. Su padre, Christian Giménez, fue un reconocido futbolista que jugó en clubes como Boca Juniors, El América, entre otros, y de cierta manera fue quien le inculcó el amor por el deporte, pero sobre todas las cosas la pasión por Jesús.
Cuando era solo un niño, Santiago Giménez comenzó a participar en las divisiones inferiores del Cruz Azul en México. En 2017 cuando tenía 15 años, debutó como profesional frente a Tigres. Con “La máquina celeste” ganó el título en el torneo “Guardianes 2021”, convirtiéndose en uno de los jugadores más importantes del plantel.
Estuvo en el club hasta 2022, año donde dio el salto a Europa en el que fue fichado por el Feyenoord de los Países Bajos. Traspaso con el que logró marcar una hazaña histórica siendo el primer mexicano de la historia en jugar para el club. En la actual temporada, es el máximo goleador del equipo. Desde su llegada convirtió 23 goles en 45 partidos. Además, se coronó campeón recientemente de la liga local, consiguiendo el 16° título del Feyenoord.
A partir del 2021, Santiago es convocado por la selección mexicana. Ha disputado 10 partidos y ha anotado dos goles. Aunque se perdió el Mundial de Qatar 2022 debido a una lesión, Santiago confía en que tendrá otra oportunidad de representar a su país.
Santiago se ha convertido en una inspiración tanto para los fanáticos del fútbol como para aquellos que buscan integrar su fe en sus metas a largo plazo. A pesar de su corta carrera, demuestra día a día que su comunión diaria con Cristo lo pudo llevar a conseguir destacados logros, pero sobre todo llevar a Jesús a las naciones incansablemente.
“Por la Fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba”.Hebreos 11:8
¿Sabías que en un parto natural hay una etapa que se denomina “transición”? Se describe también como ”fase activa” y es el momento más trabajoso o difícil, cuando las contracciones aumentan en cantidad y duración, esto se da justo antes de que nazca el bebé. Para muchas mujeres coincide con el famoso ¡No doy más! que habitualmente dura pocos -pero a su vez eternos- minutos y es la antesala del alumbramiento.
En ese momento de transición no te podés escapar, aunque hay muchas que fantaseen con la idea, la vida misma empuja desde tu interior y se abre paso. Es entonces querida amiga, digamos en criollo que,“no te queda otra”. Sería extraño pensar en postergar este momento tan único, es imposible excusarte y dejarlo para otra ocasión, no habría forma de evitar ni retrasar esta transición. Aunque quisieras retener el bebé y saltearte esa parte del proceso tampoco sería factible.
No sé si a vos te pasa como a mí, pero este ejemplo me ayuda a interpretar y amigarme con las emociones encontradas que acompañan a las transiciones en distintas temporadas de la vida.
Transición significa “etapa no permanente entre dos estados”. No estás donde solías estar, pero todavía no llegaste a tu siguiente destino. Es el “mientras tanto”. Simboliza el camino hacia lo nuevo, representa un lugar que no está diseñado para habitar, sino que es “un lugar de paso”.
Llevando el ejemplo inicial al plano de nuestra mentalidad, o de las decisiones, relaciones, trabajo, familia, desarrollo personal, espiritual, ministerio, etc, es curioso que frente a determinadas transiciones, intentemos “retener el bebe”. Qué difícil resulta a veces “pujar”, atravesar los procesos complejos o dolorosos con perseverancia o hacer los ajustes necesarios para seguir avanzando hasta dar luz aquello que se venía gestando en nuestro interior.
Génesis 12.1 nos relata que: “El Señor le dijo a Abram: Deja tu tierra, tus parientes y la casa de tu padre, y vete a la tierra que te mostraré.Haré de ti una nación grande, y te bendeciré; haré famoso tu nombre y serás una bendición”.
¿Cuál pudo haber sido el primer pensamiento que cruzó por su mente ante semejante situación? ¿Qué consideró como lo más difícil? ¿Quizás dejar ciertas cosas?¿La incertidumbre de lo que vendría? ¿Las preguntas sin respuestas inmediatas que pudieran surgir en su corazón?
¿Te sentiste así alguna vez? Por un lado experimentando el entusiasmo de que Dios te habló, te diera dirección, proyección, palabra, promesas; por otro, con mil preguntas rondando tus pensamientos. Tal vez, te sentiste invadida por una mezcla de ansiedad, temor, perplejidad y un toque de nostalgia, aunque al mismo tiempo estabas determinada a la obediencia. Con el ímpetu de avanzar por fe, intacta y con la convicción de creerle a Dios pero por otro lado, también, conviviendo con dudas. Pensás “¿y cómo sigue esto?” “¿por dónde tengo que ir?”,pero a su vez segura de que Dios te indicará el siguiente paso.
¡Cuánta inspiración y aliento encuentro en las transiciones de Abraham! Su experiencia de fe en medio de la incertidumbre me resulta desafiante. Me llena de expectativa y paz; la luz que arrojan las Escrituras al describir sin reparos: sus vivencias, altibajos, emociones, errores, decisiones, incertidumbre, fe, victoria, desencuentros, dolores, sabiduría, humanidad. Pero, en medio de todas esas estaciones vemos a Dios traer una nueva revelación en el momento oportuno.
Cuando el Señor lo llamó y declaró sobre Abraham su propósito y promesa, comenzó un proceso de profunda transformación. No solo le cambió el nombre, también su lugar de residencia. Todo aquello que le había dado identidad y estabilidad hasta el momento, quedó atrás. Abraham obedeció dispuesto a salir de donde estaba pero sin saber a dónde iba. Dejó lo conocido, se desprendió de lo seguro, fue descubriendo que no solo atravesaría ésta, sino muchas otras transiciones mediante las que Dios trataría con su fe y carácter.
En tiempos de transición, puede que no haya mapas o que el GPS del “cómo deberían ser las cosas” nos falle; puede que no tengas tan en claro cuál es el Norte, pero cada paso que das, confiando y en obediencia, es un acto de fe que abre caminos.
Lo anterior me recuerda la forma en que las águilas enseñan a sus crías a volar. Al principio les muestran a sus pichones lo que ellas hacen, extienden sus alas y dan vuelos cortos cerca del nido para que vean y aprendan. Son tiempos en que los pichones están cómodos y seguros, recibiendo la comidita en sus buches, sin embargo, aunque ellos no lo esperan, se aproxima el momento de salir del nido y enfrentar la inmensidad del entorno.
En el tiempo señalado y ante el desconcierto de los aguiluchos, la mamá los empuja fuera del nido para que mientras caen al vacío experimenten lo que por naturaleza fueron creados para hacer, volar. Es solo en ese momento, cuando sus alas se despliegan fuertes, vigorosas, saludables que ellos se abren a un nuevo mundo de posibilidades. Uno que jamás hubieran conocido si se quedaban estáticos en el confortable nido.
Durante las transiciones incómodas, Dios sigue siendo nuestra fuente de motivación y paz. De la misma manera que las águilas impulsan a sus pichones porque saben que del otro lado del nido hay un mundo lleno de posibilidades impensadas, podemos confiar como Abraham, en que ese aparente vacío llamado transición, no es más que un ambiente propicio para desplegar alas que hasta el momento quizás ni sabíamos que teníamos.
Puede que en “los mientras tanto” de la vida, no sepamos del todo lo que viene, pero qué sanador es tener la certeza de que Dios sí lo sabe y mientras tanto vivamos conectadas a Él, nuestra única fuente. Así que amigas quiero decirte que un paso de fe nunca será un salto al vacío, aún sin comprenderlo todo, sino que a su tiempo nuestra obediencia dará frutos en victoria y bendición.