Con este adjetivo nos referimos a lo que no es acertado o no es adecuado a determinadas condiciones o circunstancias, también a lo que no es conforme a las normas sociales.
No podemos permitirnos la inexactitud en estos días. La efectividad es el fruto de nuestra precisión, y ésta nace de un real significado de los asuntos de Dios.
Del otro lado de la historia, en un contexto sociocultural en el que las mujeres eran consideradas de segunda categoría, Jesús se ocupó especialmente de abrirles camino.