Estamos frente a la necesidad de desarrollar un protocolo de cuidado desde una perspectiva abarcativa.
Hay una manera poética de explicar el impacto de la cultura sobre nosotras mediante una simple pero profunda frase: “El contexto se hace texto”. Es que el entorno donde nos movemos está considerado como parte de los factores que pueden enfermar a un ser humano. La palabra cultura, en su etimología se relaciona con la palabra cultivo, analizar los frutos que la misma produce permite visualizar las semillas que también entrega.
En la actualidad, atravesamos una compleja situación de pandemia (pan viene de ‘todos’, demia de demos, ‘pueblo’) lo que sucede es algo que a todas y a la vez a cada una de nosotras nos atraviesa. Noticias cargadas de preocupación, crisis en ámbitos de salud, educación, economía y política. Crisis global y también particular, en las naciones y también en el hogar.
¿Qué impacto puede tener en nuestra psiquis el contexto actual?
En el área psicológica nos encontramos con un incremento de trastornos del estado de ánimo, trastornos de ansiedad y del sueño, entre otros. Básicamente no hay descanso ni pausa en nuestra mente ni en nuestra noche.
Este incremento lleva a pensar en la necesidad de desarrollar un protocolo de cuidado desde una perspectiva más abarcativa, que beneficie no solo a nuestro sistema inmune, sino también a nuestra salud mental. Es decir, sabemos del alcohol en gel, del barbijo, de las zapatillas fuera de casa. Pero acaso ¿sabemos cómo cuidar nuestra mente en los tiempos actuales?
Para construir este protocolo integral vamos a basarnos en un modelo que es el objeto de estudio predilecto de la ciencia, un diseño preciso y sofisticado: vamos a tomar el ejemplo de nuestro cuerpo. ¿Sorprendida?
Es que nuestro cuerpo tiene un método efectivo de protección del cual podemos nutrirnos, las células —al igual que nosotras— tienen una relación con el medio, pero con ciertas barreras. Dicho técnicamente lo que cubre a las células, sus membranas, son semipermeables. Esto permite que solo puedan entrar en ellas las partículas beneficiosas y evitar aquellas que le son inútiles o nocivas. A esto se lo llama permeabilidad selectiva. Para hacerlo simple, nuestra célula «decide” qué deja entrar y qué no.
La importancia de aprender de nuestro cuerpo y poner límites en una sociedad que no para, de hiperconectividad, es un desafío que vale la pena conquistar.
Por este motivo, te propongo construir tu propio protocolo de pausa, de descanso. “Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo” (Eclesiastés 3:1).
Algunos tips para activar ese protocolo:
1) Informada vs. sobreinformada: más es solo más, no necesariamente mejor. Regular la cantidad de noticias y diálogos sobre la situación actual. Podés establecer días y cantidad de tiempo que vas a destinar a tal fin.
Evitar consumir información negativa a la noche. Hacerlo no solo perjudica el descanso, sino que, a su vez, la luz de los dispositivos suele “engañar” a nuestro cerebro haciéndole creer que es de día, dificultando, por lo tanto, dormir.
2) Respiración profunda vs. respiración superficial: la hiperactivación que solemos tener nos lleva a respirar de manera superficial y como consecuencia a sentir mayor cansancio en el cuerpo por la menor oxigenación. Podés hacer una pausa por día y aprender a respirar. Hay simples ejercicios en internet para practicar.
3) Recrearme vs dispersarme: ¿Qué solés hacer con tu tiempo libre? Muchas veces aprovechamos las pausas para contestar WhatsApp, leer emails, ver el capítulo de la serie incompleto, etc. La elección es dispersarse observando una pantalla, es decir seguir con la activación del sistema nervioso central.
Recrearse, en cambio, es ver la naturaleza, salir, mirar el cielo, los árboles, recostarse en el pasto.
Un dato interesante, hay estudios que indican que cuando miramos la naturaleza nuestro cerebro también se activa, pero de otra manera, una que ayuda a que estemos más funcionales y creativas para, por ejemplo, resolver conflictos (ScienceDaily, “Stressed?Take a 20 minute nature pill”).
4) Home-office, Home-schooling vs Home-sweet home: Esta cuarentena trajo como consecuencia que nuestra casa se transforme en un espacio laboral y escolar. Los psicólogos conductistas han comprobado que los lugares se condicionan o se asocian, por ejemplo, cuando pasamos por la cocina tenemos sensación de hambre, etc.
Siguiendo este pensamiento, cuando se trabaja en casa, el lugar de tranquilidad puede quedar asociado a la activación laboral pudiendo provocar una baja en cantidad y calidad del descanso. Poner días, horarios y un lugar físico determinado para trabajar en el hogar, es una manera de limitar el trabajo para disfrutar ambos.
Para terminar, ¡no te olvides de compartir la vida! Podes salir a espacios abiertos, hacer video llamadas, etc., reservar un tiempo para escucharte y cultivar hábitos de autorreflexión, hablar con Dios, son prácticas que nos aportan bienestar.
El encierro provocó mucho aislamiento, hay que volver a crear tiempos con familia y amigas
Podés elegir empezar con un punto o con todos, lo que importa, como dice el pasaje, es que todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su momento oportuno. Este es el mejor protocolo: quererte, darte tu momento, tomarte tu tiempo.
Una atrapante serie de época española en la que se combinan exitosamente el drama, el suspenso, el misterio, la trama policial y el romance a lo largo de sus tres temporadas.
Julio Olmedo, el protagonista masculino de la historia, llega a este hotel con el propósito de encontrar a su hermana, una empleada que desapareció misteriosamente allí y de la que su familia no tiene noticias desde hace varios meses.
Trama y personajes
Haciéndose pasar por un nuevo camarero, tratará de averiguar, dentro del gran edificio, todo lo concerniente a esa desaparición. Mientras investiga, conocerá a Alicia Alarcón, la dulce hija del millonario dueño del lugar. Entre ellos nacerá una amistad y un gran amor, que deberán defender de los prejuicios de clase y las imposiciones de la época.
Además de Julio y Alicia, los protagonistas de esta intrigante historia, se destaca la presencia del inspector Ayala, un sagaz, culto y refinado detective. Un psiquiatra de profesión, al que nada se le escapa. Los tres intentarán develar algunos de los misterios y secretos que encierra y esconde la familia Alarcón y su Gran Hotel.
Doña Teresa Aldecoa de Alarcón es la mamá de Alicia y la viuda de don Carlos, dueño del hotel. Es uno de los personajes más malicioso de la serie. Su único fin es beneficiar la posición de su familia y su influencia en el Gran Hotel. Diego Murquía es el gerente del hotel y el prometido de Alicia. Es el principal antagonista y villano de la serie.
Personajes del elenco. Créditos:Netflix
La historia transcurre principalmente en el imponente Palacio de la Magdalena, en Cantaloa, a las afueras de la ciudad de Santander, al sur de España, a principios de 1900. Cuenta con un excelente guion y un gran elenco de actores. La elección del vestuario, la fotografía, el maquillaje, la iluminación y la música fueron fundamentales para hacer una muy buena ambientación histórica.
El director, Carlos Sedes, utiliza como recurso narrativo el cliffhanger, el cual consiste en colocar a los personajes principales en una situación extrema antes de finalizar cada episodio, dejando así un problema a resolver en el siguiente capítulo. Esto mantiene expectante y entretenido al espectador, haciendo que su interés no decaiga a lo largo de las temporadas.
Créditos:Netflix
Si bien a Gran Hotel se la trató de comparar con la exitosa serie inglesa Downton Abbey, por tratarse de producciones contemporáneas que se ambientan en una misma época y que desarrollan sus historias dentro de un gran y fastuoso palacio, las tramas y los personajes de ambas son muy distintos. Como podrás ver en el tráiler, en la historia de la televisión española predomina el misterio y el romance, a diferencia de la británica donde domina el drama.
Esta serie está disponible en Netflix. Cuenta con 39 episodios y cada uno tiene una duración de aproximadamente 1 hora y 20 minutos. La producción española fue emitida para televisión en más de cuarenta países y tuvo tres adaptaciones: en Italia, México y Egipto. Si te gustan las historias de suspenso y el género romántico, no podés dejar de ver Gran Hotel. Te encantará.
Jesucristo fue modelo de un estilo de liderazgo que aún hoy es un ejemplo
Vivimos uno de esos períodos de oscuridad que se dan de vez en cuando en la historia. Hasta la fecha, probablemente el menos deseado y que más estragos ha traído de todos los desastres por los que hemos pasado hasta ahora en nuestra generación.
Estas crisis suelen sacar lo mejor y peor de las personas, pero, lamentablemente, la mayoría de las veces sacan lo peor. La falta de preparación para estas situaciones ha sido notable en prácticamente toda la dirigencia mundial y de manera especial en la clase política, que dejó al descubierto, además, la avaricia, corrupción y egoísmo sin límites.
Nunca en nuestro tiempo hemos tenido tantos desafíos, nunca hemos tenido tanta necesidad de líderes que modelen un estilo de vida que inspire y motive a la sociedad para recrear juntos un mundo diferente, una cultura en la cual nuestros hijos puedan crecer con libertad e igualdad de oportunidades.
Jesucristo fue modelo de un estilo de liderazgo que sigue siendo el ejemplo por excelencia de amor y entrega que jamás ha existido. La Biblia, el libro más leído en todo el mundo, sigue siendo el manual de formación que todo líder y hombre de Dios necesita para navegar las aguas turbulentas de estos tiempos cambiantes.
El líder es una persona que está en relación de influencia con otros líderes para lograr un propósito común. Por su parte, liderazgo es el proceso que se lleva a cabo para el desarrollo mutuo, el crecimiento y la profundización del propósito, misión y visión de Dios para la o las personas involucradas.
Los líderes cristocéntricos tienen influencia por lo que son: por su carácter y no por una posición o título. El carácter (el parecernos a Cristo) es la base y proviene de la Palabra de Dios. El carácter nos permite edificar relaciones profundas, las cuales nos llevan a ser confiables y creíbles, y trae por resultado la habilitación a ser usados por Dios para influenciar a otros.
La mayoría de las personas que servimos a otros estaríamos de acuerdo en que el liderazgo es influenciar a las personas para caminar juntos en la misma dirección. Este proceso puede involucrar la posición y el título, pero a menudo no es así.
Nosotros, en el ministerio, sabemos que nuestra influencia, nuestro liderazgo y nuestro servicio están gobernados por lo que Dios valora. Él describe lo que debemos hacer, al igual que cómo debemos buscarlo. Por esto es fundamental en la vida de un líder espiritual el corazón y su relación con Dios y el fruto de esto, en su carácter.
Qué espera el Señor de un líder
La primera característica del corazón de un líder es la humildad. La Biblia dice que “… Dios ve no como el hombre ve, pues el hombre mira la apariencia exterior, pero el Señor mira el corazón” (1 Samuel 16:7, LBLA). Además, el Señor dice: “… Yo estimo a los pobres y contritos de espíritu, a los que tiemblan ante mi palabra” (Isaías 66:2).
Él está buscando a los de corazón humilde, que están dispuestos a hacer cualquier cosa que Él les muestre que hagan. Por eso el corazón de una persona es el fundamento para su liderazgo. Mientras caminamos con el Señor, mientras permanecemos en Cristo, el fruto de nuestra relación con Dios se muestra en nuestro carácter.
Jesús identificaba sus roles de liderazgo en nuevos términos. Él vino a ser un siervo (Marcos 10:45) y un pastor (Juan 10:10-11). Él definió el camino del liderazgo, en el cual un siervo está comprometido con el éxito de otro. La esencia del liderazgo espiritual es seguir a Cristo y servir a la gente.
Lideramos realmente cuando pastoreamos y servimos. Las personas que exhiben estas características son aquellos a quienes las personas quieren seguir. Los líderes espirituales no descansan en un título o una posición. La perspectiva bíblica de liderazgo descansa en la calidad de vida del líder. Los atributos son una combinación de carácter, madurez , habilidades y experiencia.
En medio de esta crisis generalizada, los cristianos podemos verla como tal o como una gran oportunidad de demostrar al mundo que Dios, dueño y Señor de la historia, está en control. Que Él escoge hombres y mujeres que modelen un estilo de liderazgo que traiga esperanza en lugar de dolor y quebranto. Es la hora señalada para que florezca el liderazgo espiritual. La obra del ministerio requiere que sea realizada por gente espiritual utilizando los métodos espirituales para alcanzar los objetivos de Dios.
Mario Bloise nació en la Ciudad de Buenos Aires. Es director ejecutivo de la Red de Sembradores; cofundador, director ejecutivo y profesor de Facultad de Teología Integral; director nacional de Cru en Argentina (anteriormente conocida como Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo); consultor y conferencista internacional en temas de liderazgo, desarrollo personal y comunitario, planificación estratégica y trabajo en equipo.
Dictó seminarios y conferencias en universidades de América Latina y otros continentes. Es certificado como coach profesional en Liderazgo por Future Achievement International; maestría en Liderazgo en la UNILID.
Mario es conocido como uno de los mentores de los movimientos universitarios cristianos de América Latina. Casado, tiene 3 hijos y 4 nietos. Apasionado por la lectura y el fútbol.
Mario Bloise Director Ejecutivo de la Red de Sembradores. Cofundador, Director Ejecutivo y profesor de Facultad de Teología Integral. Director Nacional de Cru en Argentina. Maestría en Liderazgo en la UNILID.
El Dr. Sebastián Palermo organiza un evento para toda persona con ansiedad y para los que quieran formarse y capacitarse sobre el tema. El encuentro online es con inscripción paga previa, tiene cupos limitados y se entregarán certificados digitales de participación.
El próximo miércoles 23 de Diciembre de 19 a 22 Hs. (Arg.), el pastor y Dr. Sebastián Palermo brindará un seminario online llamado “Ataques de pánico: principios para superarlos”. Se trata de una capacitación intensiva que abordará la problemática desde la definición del trastorno y su sintomatología hasta ideas para la prevención y principios de resolución, incluyendo información sobre sistemas de creencias que lo sostienen y técnicas de relajación para afrontarlos.
Sebastián Palermo, disertante del seminario, es médico formado en psiquiatría y terapias cognitivas, con posgrados en educación emocional, ansiedad y estrés. Además, es pastor de la congregación Nueva Mente, en la ciudad de Córdoba y director del centro “Ayuda en las Emociones”. Trabaja desde hace muchos años en la recuperación de personas con problemáticas adictivas y perturbaciones emocionales.
Además, es escritor sobre temáticas de educación emocional, y estos últimos meses ha crecido como influencer en las redes sociales con videos que brindan herramientas de ayuda para la ansiedad. La Corriente dialogó con el Dr. Palermo para que nos informe más sobre la capacitación.
LC: ¿Por qué surgió la idea de realizar un seminario sobre este tema?
SP: «El cuarenta por ciento de la población sufre algún tipo de alteración en relación a la ansiedad. Estas estadísticas ya han sido consumadas desde hace tiempo. El ataque de pánico termina siendo una expresión bastante fuerte de la ansiedad. Es una manifestación, es un trastorno de ansiedad, una de las clasificaciones de los trastornos de ansiedad, que tiene una incapacitación y una disfuncionalidad bastante compleja y bastante seria.
Se calcula que entre el dos y el tres por ciento de la población sufre ataques de pánico.
Me han escrito muchísimos pacientes en relación a esto. ¿Por qué? Porque realmente es algo incapacitante. Uno maneja la ansiedad hasta ciertos niveles, uno está acostumbrado a sentirse ansioso, nervioso, tenso por alguna problemática, pero cuando eso se vuelve crónico empieza a afectar la predisponibilidad mental, es decir el pensamiento se nos estrecha; nos cuesta mucho el relacionamiento social; tenemos miedo a salir a la calle.
El trabajo que antes hacíamos ya no lo podemos hacer, las cosas que antes nos gustaban ya no nos gustan más; y aparecen situaciones que son muy incómodas para la persona, como la despersonalización, que significa ‘estoy bien, me estoy volviendo loco, tengo miedo a la muerte, no quiero que me dé otro ataque de ansiedad’.
Eso empieza a ser bastante disfuncional en la persona, entonces en función de todo esto la gente busca ayuda desesperadamente, pero claro busca ayuda cuando ya se está quebrando el tema; es como que de repente alguien busca ayuda cuando ya quebró. Lo ideal sería anticiparnos a eso, es decir no llegar a esa instancia del ataque de pánico».
LC: ¿Qué es un ataque de pánico?
SP: «El ataque de pánico, neurobiológicamente, es una liberación de adrenalina en el torrente sanguíneo, producto de una interpretación de peligro. Imaginate de repente que es como una especie de suicheo de luz. Es decir, ¿viste que todos tenemos, cuando entrás a una habitación, una teclita que prende la luz? Bueno imagínate que esa teclita está rota y por cualquier cosa se prende la luz.
O sea nadie la toca, se prende la luz, así como así. En el ataque de pánico pasa esto, como que se activan sin ninguna razón sensaciones de alerta, y esto despolariza la adrenalina, produciendo todo lo que conlleva la adrenalina: taquicardia, sudoración, midriasis, palpitaciones, sensación de muerte, todo lo que es característica del sistema adrenérgico.
Por eso me pareció muy importante enseñarle a la gente esto que poco se conoce, porque la gente conoce el síntoma, conoce gente que está con ataques pero no conocen exactamente por qué se genera».
LC: Entonces, ¿es preventivo el seminario?
SP: «Todo lo que es psicoeducativo siempre es preventivo, es decir, por supuesto que le va a servir a la gente que tiene ataques de pánico, para poder resolverlo a futuro. Lo que pasa es que desde un seminario uno no médica, y a veces el ataque de pánico necesita ser medicado. Desde un seminario uno no puede resolver la situación particular de cada uno.
Termina siendo un instructivo psicoducativo para saber por qué vivo lo que vivo y proponer, obviamente, respuestas; porque después del seminario voy a proponer (de hecho eso empieza la semana que viene) hacer toda una formación, un programa de dos meses sobre gestión de la ansiedad, donde propongo una serie de treinta temas, aproximadamente; hablando temas que tenemos que tener resueltos para poder tener una ansiedad funcional, porque el problema de la ansiedad es que se vuelve disfuncional.
No es que no tenemos que tener más ansiedad, porque la ansiedad es útil, muy útil; el problema radica cuando la ansiedad se vuelve disfuncional, que me bloquea. Entonces el seminario este apunta a un nicho muy pequeño poblacional, eso me queda muy claro, pero por más que sea pequeño es un nicho con mucho pedido de ayuda, porque es gente que realmente la está pasando muy mal…»
LC: ¿Crecieron estas cifras durante la cuarentena?
SP: «La cuarentena empeoró todo, vos date una idea que si tenés un árbol seco, o con pocas raíces; a eso le agregás que viene un viento fuerte te va a arrancar el árbol; acá pasó lo mismo.
hay gente que estaba con una estructura mental débil y se le sumó la presión de la cuarentena.
El que estaba fuerte la sobrevivió, pero al que estaba con las raíces débiles lo arrancó de cuajo, o sea hay gente que quedó quebrada emocionalmente en esta cuarentena; porque se metió la presión económica, la presión del encierro, la presión del temor a la muerte; todo esto hizo un rastrillaje de todos los que estaban débiles mentales …»
LC: ¿A quién está dirigido este seminario?
SP: «El seminario está dirigido, primero, a toda persona con afección de ansiedad. En segunda instancia a toda persona que quiera formarse y capacitarse. Por supuesto que está dirigido, si tuviera que poner número uno, a toda persona con ataques de pánico, lo que pasa es que sé que muchas veces el que sufre de ataques de pánico, no sé si sostiene tres horas de seminario, capaz está un rato y se va a salir (…)
Lo que más me interesa es que la persona que sufre de ansiedad pueda verlo desde un lugar preventivo (….) El rango etario va desde los quince años hasta los 55 años, 60 años, después de eso es medio difícil porque ya están en otra rama de productividad, de autoexigencia…»
LC: ¿El objetivo, entonces, es que sea un disparador de la temática para su posterior tratamiento?
SP: «Sí, este primer seminario es una presentación magistral en relación a todo lo que puedan llegar a ser temas que no se han hablado; algunos niveles de tratamiento, algunas ideas para poder salir; y después establecer una propuesta concreta acerca del programa de gestión de ansiedad».
LC: ¿Desde qué tipo de abordaje se lo plantea? ¿Desde lo espiritual…?
SP: «Las escrituras son mucho más terapéuticas de lo que nosotros nos imaginamos, y a veces no hace falta traducirlas con un lenguaje que solo entendemos aquellos que vamos a una iglesia o a una congregación. A veces las escrituras tienen una sabiduría tan profunda que pueden ser traducidas a un lenguaje común, para que la gente lo pueda captar, y eso es sabiduría de Dios que está siendo ministrada al mundo.
El mundo no sabe que es Dios, pero está siendo ministrado al mundo (…) Entonces cuando le enseño a la gente a pensar lo bueno, a enfocarse en el presente y no tener ansiedad por el futuro, no estoy haciendo otra cosa más que repetir lo que Jesús dijo (…) Así que sí, está dirigido a gente cristiana, está dirigido a gente no cristiana; y siempre es espiritual. Siempre lo considero espiritual, aunque no me pongo a orar por la gente en este programa, eso lo hago en otro tipo de programas…»
LC: ¿Cómo afecta esta problemática a la Iglesia?
SP: «Lamentablemente lo que es congregación… Te voy a hacer la diferencia de Iglesia y congregación: Iglesia es Cristo, siempre Cristo, a Cristo no lo afecta el mundo, porque la Iglesia es el cuerpo de Él. Por lo tanto, la parte que hay de mí que está alineada a Cristo, esa es iglesia, esa parte no está afectada por el mundo; pero hay mucho de mí que todavía no fue afectado por Cristo. Esa es la parte carnal, eso se llena de ansiedad, se llena de nervios, se llena de miedos. Esa parte congregacional lamentablemente tiene el mismo índice que en el mundo.
un cuarenta por ciento de la población cristiana sufre de ansiedad y ataques de pánico.
Entonces tenemos gente con muchísimos problemas emocionales, la iglesia sufre mucho de esto; pero no porque la iglesia lo genere sino porque viene así de afuera: vienen los enfermos, los que están dañados…»
LC: ¿Qué tabúes existen a nivel congregación en general, sobre este tema?
SP: «Se ha caído en un pecado muy grande, que es involucrar a la psicología positivista dentro de las congregaciones (…) ¿Cuál ha sido el gran problema? Nosotros hemos asumido y tratamos de enseñarle a la gente de la Iglesia a resolver sus problemas emocionales sin pasar por la cruz.
Se le dice a la gente que Dios lo va a sanar, Dios lo va a limpiar, Dios lo va a ayudar; pero esa persona nunca estuvo dispuesta a entregar su vida, está con Dios porque está esperando que Dios lo sane, que Dios le provea, que Dios le dé, que Dios lo alinee.
Esa es la psicología positivista, una psicología que te dice “Dios viene para acomodar tu vida”. No, Dios no viene para acomodar tu vida, Dios viene para que se establezca Gálatas 2:20 sobre vos: “Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo”.
Ahora, una vez que yo paso por la cruz, una vez que yo me alineo a la cruz, ahí sí el Espíritu de Dios le da funcionalidad a mi mente, y ahí tengo que aprender cómo funciona mi mente pero desde Cristo, desde un lugar totalmente diferente, donde mi mente está para servir al propósito del Reino de Dios (…) Lo único que sostiene al ser humano es Cristo, después aprovechamos todo el conocimiento para darle forma…
(…) Uno de los más grandes problemas que ha tenido la iglesia es haber querido estudiar todo por separado “El cuerpo le pertenece a los médicos, el alma le pertenece a los psicólogos, el espíritu le pertenece a los pastores” (…) Pero nosotros somos seres integrales y Dios nos puso para ministrar a la iglesia (…) El problema es que todo sí es espiritual (…)
Lo demoniaco está instituido para afectar el alma. Acá viene un principio importante: un espíritu inmundo no puede afectar tu espíritu cuando estás en Cristo, porque tu espíritu es el de Cristo ahora, entonces el hijo de Dios no puede ser afectado por un espíritu inmundo en su espíritu, puede ser afectado en su alma (…)
Ahora, que vos le hagas una liberación a esa persona no garantiza que el desastre que hizo en el alma y la forma en la que el alma quedó conduciéndose luego, continúe de la misma manera. Entonces primero se libera (…)
la persona necesita ser educada para aprender a recibir el impacto de la ira, del rechazo externo e identificar las trampas de la mente.
Entonces sí va una liberación, pero también va un proceso de educación emocional, y por supuesto que después continúa el proceso de crecimiento personal, el discipulado, el crecer en la Palabra…”
La capacitación se da en el marco de recursos que regularmente brinda el centro psicoeducativo “Ayuda en las emociones”. Se trata de una plataforma que tiene como propósito ofrecer información y herramientas de educación emocional, incluyendo la posibilidad de suscribirse y acceder a diversos cursos online y a un acompañamiento semanal de charlas por Zoom.
Este seminario en particular, tiene un costo de inversión de 3500 pesos argentinos o 30 dólares; y el material estará disponible hasta los siguientes siete días posteriores al evento, para poder revisarlo. El link de registro es el siguiente: https://bit.ly/2LRPJaZ.
Si querés experimentar los milagros de Dios, este libro es para vos.
Vivir en un ámbito divino es posible. Pero no solamente es posible, sino que es necesario, que los hijos de Dios experimenten, deseen e impartan lo sobrenatural del Padre. De esta idea parte Bill Johnson, pastor de Bethel Church, para hablar de las maneras en las que el poder del Cielo puede (y debe) invadir la Tierra.
Mediante la lectura de este, se conocerán testimonios reales de personas que han vivido en primera persona el poder de Dios manifestado en sanaciones; por otro lado se conocerán casos de personas que, mediante el ejercicio de sus dones, obraron milagros por medio del poder del Espíritu Santo. El valor de todos estos ejemplos, radica en que nacen de la experiencia de primera mano del autor.
A medida que el lector se sumerja en estas páginas, se encontrará con análisis de varios pasajes bíblicos en los que Jesucristo obraba maravillas. Bill Johnson explica, a través de la Palabra, temas centrales que todo cristiano debe entender para posicionarse como hijo, algunos de ellos son la identidad, el propósito, los dones, la fe, la gracia, la obediencia, la adoración, entre otros. Sus explicaciones son claras, sencillas y llevaderas.
Vivir rodeados de milagros
En este libro, Bill Johnson plantea que, para los Hijos de Dios, representar al Cielo es un privilegio, por lo tanto, nos invita a reflexionar en cuestiones como ¿Qué significa vivir en la Tierra como en el Cielo? ¿Cómo impregnamos nuestras vidas con las características de la vida en el Cielo? ¿Cómo podemos vivir rodeados de milagros y experimentar el poder sobrenatural de Dios todos los días?
Los lectores de estas páginas serán desafiados, descubrirán algunas respuestas, pero, fundamentalmente, más preguntas, para seguir pensando de qué maneras vivir en la realidad de Dios, partiendo de la fe como la capacidad de hacer visible lo invisible; porque la fe, en palabras del autor “conecta lo que está disponible para nosotros con las circunstancias que vivimos”.
Bill Johnson sostiene que, en la actualidad, la Iglesia tiene el mismo recurso que tenía Jesús cuando obraba milagros. Se trata del Espíritu Santo. El poder de Dios se encuentra a disposición de sus hijos; por lo tanto, no existen (o no deberían existir) las excusas en la Iglesia por no hacer uso de este poder. Es bueno, sostiene el autor, buscar milagros, prodigios y señales, porque estos dan la Gloria a Dios.
Sobre el autor y su ministerio
Bill Johnson junto a su esposa Brenda son los pastores principales de Bethel Church en California, Estados Unidos. Ellos tienen tres hijos y diez nietos. Sus hijos y sus familias forman parte también del equipo pastoral de Bethel Church en diferentes áreas.
Se trata de una congregación que está creciendo mucho a nivel internacional, y que tiene un mandato principal: “traer el Cielo a la Tierra”. Ellos se basan en el principio de que un impacto global comienza con un avivamiento de manera individual. Es por eso que tienen como misión buscar la presencia de Dios, ser llenos de Él para poder manifestarlo en todas las áreas de la vida, para luego ver un cambio en el mundo.
Ficha
Título: “Cuando el Cielo Invade la Tierra. El poder manifiesto de Dios” (When heaven invades earth) Autor: Bill Johnson Año: 2003
Una mirada distinta para disfrutar unas vacaciones más allá de las circunstancias.
Sin ninguna duda, el año 2020 nos dejó en la memoria un sinsabor muy particular, del que mucha gente desea “escapar”, teniendo unas vacaciones para cortar y volver a iniciar un año nuevo que, por ahora, transitaremos con una mezcla de incertidumbre y expectativas. Estas posibilidades de “escape” son buenas oportunidades en busca de una salud integral.
En los meses de restricciones sociales y sanitarias, todo el mundo ha sido condicionado y los cambios de hábitos y comportamientos sociales nos han llevado a considerar de manera particular la administración y uso del tiempo libre o tiempo de vacaciones.
En este sentido, sin dejar de respetar los protocolos de cuidados por causa del Covid-19 y el factor económico, según las posibilidades de cada uno.
será bueno que no nos paralicemos desde el “no se puede”, sino que de manera inteligente y creativa podamos hallar el descanso tan deseado y necesario.
En la Biblia encontramos esta oración, “Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría” (Salmo 90:12) ¡Qué actual es esta verdad! Nos ayuda y nos enfoca en la dependencia de nuestro Creador donde somos accionados a superarnos más allá de las circunstancias.
Pensar en “vacaciones burbuja” es una nueva manera de reinventarnos en la relación trabajo/estudio-descanso.
Las vacaciones las hacemos en nuestra mente, y no dependen tanto del lugar a donde nos desplacemos.
Si bien el cambio de ambiente nos ayuda a salir de la rutina, debemos considerar la posibilidad de que si nos toca permanecer en el mismo ambiente será necesario e importante transformar esa rutina también.
En este sentido, podríamos tomar las vacaciones para que sean un tiempo de acción de gracias a Dios donde todo el núcleo familiar pueda experimentar de su gracia y favor, ya sea en lo poco como en lo mucho que Él nos da.
Algunas ideas prácticas que te pueden ayudar a disparar otras más
Salidas a lugares “poco convencionales”. Lugares como pueblos del interior, mercados exóticos, etc.
Vacaciones cruzadas. La familia del campo le presta su casa a la de la ciudad y viceversa.
Alojarnos en cabañas o búngalos más que en aquella hotelería con gran concentración de personas.
Vida de camping o campamento. Tener tiempos de calidad y aventura. En ese sentido, te comparto el siguiente link que te puede dar una idea de cómo ser “mejores amigos en casa”, un recurso pensado para que exploren la posibilidad de hacer campamentos con los que están en casa, a bajo costo y con lo que tienen, pero accesible y adaptable aun si desean pasar unos días en otro lugar al de su hogar.
El comediante americano David Brenner, hablando acerca del tiempo de vacaciones, comentó: “No es la cantidad de tiempo que pasas en un lugar lo que lo hace memorable, es la forma en la que pasas el tiempo”.
Para disfrutar de nuestro tiempo libre de una forma plena, debemos realizar aquellas actividades que más nos enriquezcan. La burbuja se armará en ese contexto seguro y confiable, donde en lugar de tapabocas podrás portar el placer de compartir juntos una puesta de sol. ¡Te deseo que pases unas felices vacaciones!
Te comparto una propuesta, #QuedateEnCampa especial VACACIONES es una propuesta para toda la familia en estos tiempos. Podes conocer más del «campa en casa con recursos gratuitos en el siguiente link : QuedateEnCampa
Young beautiful woman using smart phone at night in bed
¿Pueden, las pantallas, ser un recurso y al mismo tiempo hacerme daño? ¿Cómo sé si mis desánimos y ansiedad no tienen que ver con esto?
Es muy interesante que estamos cuestionándonos este asunto, mientras lees esta nota a través de una pantalla, ¿no te parece? Aclaro que yo también la estoy escribiendo desde una de ellas. Así de contradictorio es este tema; es más, esto que te cuento me pasó a mí también.
Con mi esposa pastoreamos adolescentes y jóvenes, y ni bien arrancó la cuarentena llenamos nuestros espacios de contenido. Vivos todos los días, con distintos formatos, protagonistas, objetivos y colores. Pero promediando la mitad del año colapsamos, sí a los pastores también nos pasa esto, aunque algunas veces nos esforzamos por disimularlo. Y, lo que te voy a contar, surge de lo que aprendimos como consecuencia de esto.
Seguramente tú como nosotros ya estabas en las redes, pero la cuarentena , esta eterna que se vivió en nuestro país, hizo que la permanencia frente a las pantallas fuera el doble o el triple de lo que ya lo hacíamos.
Eso dio golpes en lugares clave, algunos son muy evidentes pero otros no tanto. Por ejemplo el sueño: está comprobadísimo que el descanso afecta directamente la forma en la que voy a rendir mañana.
Es obvio que si no duermo, al día siguiente en la clase me la pase cabeceando u “orando por todos los hermanos/as”, para hacerla más espiritual. Pero no es tan obvio cómo nos afecta al humor. A veces pienso que simplemente tengo un mal día, cuando lo real es que me la pasé “ladrando” a todo el mundo porque mi tolerancia es nula, gracias a que estoy cansadísimo/a.
Otro golpe fuerte, y más disimulado, es el que te da con la frustración. Las redes, en especial Instagram, te muestran la vida perfecta de todo el mundo. Es justo en ese momento cuando entiendes que todos/as tienen una súper vida perfecta, menos vos, claro. Fotos geniales, buenas fiestas, súper amigos, grandes historias de amor, etc.
Entonces miras tus fotos, que estuviste sacándote siete horas seguidas para conseguir una potable, que la que subiste y no solo no te gustó, sino que juntó, contando a tu tía que está aprendiendo a usar esto, solo 15 likes. Ahí es cuando compruebas que todo el mundo la pasa genial menos vos. Ni hablar si tienes problemas en casa, una familia disfuncional o un hermano con el que la relación se volvió bastante difícil.
Tengo que decir que este fue el que más nos pegó a nosotros, creo. Comenzamos a sentir que lo que hacíamos estaba mal, que era un fracaso, que no servía para nada o que no ayudaba a nadie. Nos empezamos a cuestionar todo lo que se te ocurra. Eso nos provocó un bajón anímico muy grande y la llegada de la tan odiada ansiedad.
Esta es como una especie de bomba que se activa en tu mente y que cuando detona hace muchísimo daño. Al punto que después pasamos mucho tiempo arreglando los perjuicios que te provoca. En cierto aspecto tiene un rasgo parecido al HIV. Esta enfermedad tardó en descubrirse porque lo que hacía era afectar a tu sistema de defensa. Entonces las personas morían por enfermedades comunes, sin saber que lo que las debilitaba en realidad era este virus.
Lo mismo pasa en lo emocional con el exceso de pantallas. Genera una frustración tan grande …
Un sentimiento que da lugar a la ansiedad y trabajan juntas para hacerte sentir que el problema es tu vida, cómo la estás llevando y la forma en la que estás haciendo las cosas. Sin poder identificar que lo que te está debilitando son justamente estos pensamientos que vienen como consecuencia de tanto uso de las pantallas.
Cuando a nosotros nos pasó esto dijimos basta, y te lo cuento porque tal vez te sirva.
Bueno, debo decir que llegué al límite de palabras para esta nota, y también que se están cumpliendo varias horas delante de la pantalla, así que me voy a descansar de las pantallas ¿La seguimos en la próxima nota, y te cuento lo que hicimos con mi esposa para poder recuperarnos de todo esto? ¡Hasta la próxima!
Hoy vamos a hablar sobre uno de mis videojuegos favoritos. Un material que transcurre en un mundo mítico y medieval.
The Elder Scrolls Online es un juego de rol, más específicamente un MMORPG, en español, un juego que permiten a miles de jugadores introducirse en un mundo virtual de forma simultánea a través de internet e interactuar en cada misión.
El videojuego consiste en crearnos un personaje e introducirnos con él en Tamriel, el mundo de The Elder Scrolls Online, el cuál cada año se va expandiendo con nuevo contenido. Allí es donde podremos progresar de maneras casi infinitas al hacer aventuras, conocer la historia del juego, descubrir el enorme mapa que posee, batallar contra criaturas u otros jugadores para lograr cumplir el objetivo de cada partida.
Crédito: Bethesda Softworks
Este formato presenta diferentes series cada año que ubican a los jugadores en diferentes escenarios. Cada uno simboliza una especie de camino desconocido donde quedaran escritas las hazañas del jugador. El primero fue The Elder Scrolls: Arena en 19994. La empresa Bethesda Softworks es quien hoy tiene los derechos del juego. Sin embargo, la institución es más conocida por Skyrim, un juego que salió en 2011 y marcó un antes y un después en la industria.
Pero focalizando la atención en The Elder Scrolls Online, fue finalmente el 4 de Abril de 2014 cuando se lanzó al mercado. En sus comienzos utilizó un método de suscripción mensual para jugarse pero posteriormente se decidió por el clásico mecanismo de comprarlo una vez y ya poder jugarlo de manera completa.
Crédito: Bethesda Softworks
El juego no está disponible en español, por lo cual saber inglés es una ventaja, pero igualmente posee una enorme comunidad de jugadores de habla hispana permitiendo así una ayuda mutua entre todos. Pero ahora vamos a lo importante: el juego.
Ahora, ¿Por qué es uno de mis juegos favoritos? Sin dudas, si tuviera que quedarme con un sólo juego y no pudiera jugar a ningún otro,espero que eso nunca me suceda, elegiría a The Elder Scrolls Online, porque es un juego sin final.
La historia y narrativa que tiene es inmensa, la personalización de nuestro personaje en cuanto a habilidades, ítems, características hacen que cada uno sea único y como nosotros más lo deseemos. El ser un juego multijugador online hace que se pueda jugar con amigos y también competir contra otros jugadores, haciéndolo un juego enorme y con un sinfín de posibilidades y aventuras. Por algo ha sido galardonado tantas veces como uno de los mejores juegos de rol online del mundo, y créanme que lo es.
El pasado martes se realizó el encuentro en Salón Sur de la Casa Rosada que contó con la participación de ocho ministerios, incluyendo los representantes de la Jefatura de Gabinete. Allí se llevó a cabo el primer foro para alcanzar Justicia Menstrual, al que asistieron más de 100 funcionarias de todo el país.
En la reunión se expuso sobre la menstruación femenina y cómo es que esto afecta la calidad de vida de la mujer. Sin embargo, el nombre del foro resultó disonante, aún más cuando se habló de la necesidad de ajusticiamiento para las personas menstruantes.
Incluso, durante el encuentro, Dora Barrancos, asesora de presidencia, dijo que “la gestión menstrual va a ser política de Estado” y sentenció que “no hay justicia social sin justicia de género”.
Jael Ojuel, Directora del Equipo de Bioética de ACIERA y ginecóloga obstetra especialista en fertilidad, reflexionó que “la mujer no necesita ser ajusticiada por su condición natural femenina, pero sí por situaciones que dañen su vida o su integridad física o moral”.
Si bien el proyecto de ley se basa en asistir a aquellas mujeres que no tienen los medios para acceder a los artículos de higiene femenina, lo que generó ruido fueron las afirmaciones sobre la desigualdad como una cuestión de género y no como un factor social.
“Debemos tener cuidado y abrir los ojos para ver que, en determinadas palabras, lo único que hace el Gobierno es imponer ideologías, y no promover derechos”, consideró Jael Ojuel.
La diputada nacional por el PRO en la Ciudad de Buenos Aires, Dina Rezinovsky, aseveró que “la menstruación no necesita ajusticiamiento”, aunque reconoció que “las mujeres afrontan todos los meses gastos que se tornan caros, y estoy de acuerdo con la disminución del IVA en los productos de higiene femenina”. Pero a lamentó que “todos los proyectos que se presentan últimamente tienden a bajar una ideología de género que provoca confusión”.
Más allá de los contrapuntos, el proyecto fue presentado a presidencia de la nación para que se discuta en ambas cámaras.
Josué “Josu” Sosa es un productor de 22 años que vive en un pequeño pueblo llamado Verónica, en el partido de Punta Indio, provincia de Buenos Aires. Allí tiene su home studio (Selah). Ya ha trabajado con varios artistas y músicos tanto a nivel nacional como internacional. Está finalizando su carrera de ingeniería en sistemas en la UTN (Universidad Tecnológica Nacional). Es líder de la banda Selah Worship, que ha realizado covers con invitados de todo el mundo. Actualmente ha sido convocado por iglesias de California (Estados Unidos), para ir a producir, dar talleres y recibir capacitaciones especiales en Bethel Church y Hillsong California.
LC: Hoy en día te encuentras produciendo no solo a nivel nacional, sino también a nivel internacional pero ¿cómo fue que comenzaste? J: A nivel nacional podría decirse que muy poco. Parece que la gente en Argentina le tiene miedo a este mundo, no sé por qué. Ni siquiera pregunta o después la gente que se anima lo hace con personas cercanas y con eso le alcanza. Pero “los gringos” tienen los fierros, ellos saben el valor de lo que es hacer ese tipo de cosas y no se quieren meter a hacerlo, por lo que prefieren pagar por eso.
Está bueno salir un poco de la frontera y hacerse más conocido, también por el ingreso económico. Pero en cuanto a artistas de allá uno nunca sabe, me han llegado contactos que me pregunto: “¿De dónde salió?”.
Es chiquito el mundo de la producción. Si te quedas en tu lugar, produciendo a tu amigo de barrio siempre, mueres como productor. No te queda otra que hacer contactos. Por eso salí afuera, ofreciendo mi trabajo gratis. Mi técnica fue poner hashtag en Instagram y ponerme a buscar covers. Ponía a los cantantes que más me gustaban, los iba guardando e iba armando mi portfolio.
Busqué músicos que nadie conocía y que tuvieran menos de 7000 followers. Eso es importante, porque si no, no te dan bolilla. Ver que son competentes, que son personas que a veces tampoco tienen los elementos para grabarse. Pero si tienen a alguien que lo haga y el sonido que expresan es uno que uno diga “Apa, acá hay potencial”, hay una posible producción que puede salir hermosa.
Una vez una amiga, la cantante Paula Prieto, me dijo: “¿Por qué no te animas a decirle a algún productor o alguien que admires, le mandas un mensaje a ver si quiere hacer algo contigo? Bueno, lo hice, le escribí a un músico, Dimiter Yordanov, y me presenté como productor argentino.
LC: O sea, estabas convencido de que eras un productor, aunque todavía no tenías mucha carrera. J: Exactamente, fui totalmente confiado, te tienes que poner en el papel, ya lo eres. Yo ya había realizado producciones acá y empecé a trabajar con él y le encantó. Hicimos un cover, produjimos un par de cosas más y nos hicimos amigos. De esta manera fui creando contactos, redes y no me quedó otra que empezar a hablar en inglés.
Si bien ya sabía un poco, aprendí la manera de comunicarme y me puse más canchero. Y con la gente de otros países también tienes que hablar en inglés, por más que sean italianos o de otros países. Ya no necesito traductor para entender lo que dicen, pero para hablar ahí a veces es un poco complicada la cosa, pero nada que no puedas hacer para comunicarte. De ahí hice contactos con Italia y me topé con personas que nunca pensé que iba a toparme.
Así que en resumen fue eso, buscar hashtags, canciones que me gustaban, mandarles a 100 personas y de esas 100 que 20 contestaran y, de estas, 5 que concretaran algo, y así aprender a relacionarme con el exterior.
LC: Hay muchos mitos acerca de este oficio, por ejemplo que “En este país es imposible vivir de esto” o “Es casi imposible dedicarse 100% a la producción musical”. ¿Crees que hoy en día es realmente complicado dedicarse a la producción musical? J: Sí o sí necesitas armarte un flujo de trabajo bastante corrido, gente que te conozca. Es como cuando pones un negocio por primera vez, entre los seis meses y el año no tienes nada de ganancia. Pero si te estás armando tu clientela, entonces sí o sí no te queda otra que empezar. Porque tú te puedes recibir en la universidad, pero si no produces, como productor tienes lo mismo que un ingeniero que se acaba de recibir y nunca trabajó. Entonces ese es el tema importante: armar tu clientela, armar contactos, muchos contactos, muchos amigos. Ellos te van a ir recomendando a otra gente que a la vez te va a ir recomendando con gente que nunca hablaste nada pero te conocen, sobre todo en Instagram. Yo utilizo mucho las redes, porque al estar en un Narnia (dice Josu en tono irónico refiriéndose a su pueblo en Verónica), prácticamente un pueblo alejado de la vida, la única manera de que me conozcan es por las redes.
LC: ¿Dirías entonces que el hecho de vivir lejos de la ciudad fue algo que en vez de perjudicarte te benefició? J: Yo vivo en La Plata (capital de la provincia de Buenos Aires) durante el año, porque estudio ahí y me pongo a pensar y creo que para los que viven en la ciudad no hay tiempo para nada. La gente que vive en la ciudad vive a un ritmo súper acelerado y, a veces, le terminan dedicando a la producción un tiempo mínimo.
Esto te hace crecer, pero creces poquito y no te queda otra que respaldarlo con otros trabajos. Yo gracias a Dios, en mi pueblo, estoy en la casa de mis padres y en la pandemia tuve que pagar el alquiler de mi departamento en La Plata pero el resto de las ganancias lo usé como inversión para la producción.
Yo creo que en Argentina, el primer paso es entender que esto de la producción tiene un costo bastante elevado y ahí está la clave: invertir siempre y no malgastar. Pero tienes que meterte a investigar y dedicarle horas de tu día a conocer y aprender. Yo no es que arranqué a producir hace diez años y creo que con lo que yo viví en estos poquitos años produciendo me quedó demostrado que más allá del mérito propio, muchas veces no es el mérito sino los contactos.
LC: ¿Qué influencia tiene el productor musical dentro del artista y del material musical? J: La idea que yo tengo es que el productor es un artista también, es decir, es un pintor, prácticamente, tiene que crear y poner de su imaginación. Muchas veces los productores tienen su estilo, y su incidencia es muy grande, no sé si me atrevo a decir que es más grande que el artista, porque el productor recrea utilizando recursos que ya conoce y las va combinando.
LC: Este suele ser tema de debate pero ¿el productor necesariamente debe ser también músico o crees que se puede ser productor sin tener conocimientos sobre música o instrumentos? J: Yo creo que poder se puede, el tema es que el camino es super difícil. Hay productores que arrancaron sin saber nada de música, hay por ejemplo DJ conocidos que no saben de lenguaje musical, no saben de teoría, pero si tienen el conocimiento que tendría cualquier persona cuando escucha ritmo. En el comienzo los DJ no eran músicos sino gente que le gusta mezclar música, que le gusta mezclar una canción con la otra, escucharla y hacer su propia versión.
El tema es que sí o sí, en algún momento no muy lejano, se ven obligados a aprender, porque después cuando un músico te encarga algo creado, tienes que saber traducir lo que está diciendo, tratar de plasmar los sentimientos del artista.
La definición de música es el arte de combinar sonidos de forma sucesiva y simultánea de tal manera de transmitir y educar sentimientos. Por lo tanto, es necesario para un productor ser músico o conocer cómo funciona, pero no es requisito primordial, es meterte y darte cuenta de que si sos productor y sos músico, el salto que vas a pegar va a ser muy grande porque estás ahorrando tiempo.
LC: Hablaste acerca de que el trabajo de un productor es potenciar el material musical, pero ¿tú qué piensas?, ¿el productor influye en la identidad del artista? J: A veces, no siempre. Hay artistas que tienen en claro lo que quieren, entonces si su identidad se ve comprometida con cierto productor, prefieren ir por otro lado. Pero también están los que no saben lo que quieren, entonces, si son muy nuevos, le dicen al productor “Haz lo que quieras” . Ahí ya está impartiendo y fusionando la identidad de productor con la identidad del músico. Otras veces el productor dice: “Bueno, me tengo que parar en el lugar del artista”, para dar lugar a las referencias, los estilos que él escucha, qué es lo que le gusta. Entonces, trata de hacer lo que él artista quiere y trata de representar su imagen en eso. Podríamos decir que en la mayoría de los casos en donde se deja fluir al productor su identidad se termina metiendo en la identidad del artista.
LC: Te llamaron para ir a trabajar a los Estados Unidos. ¿Cómo se dio esa oportunidad? J: Siempre me gustó la idea de viajar, quería hacerlo. De chico oraba por eso, y no vengo de una familia pudiente, nunca nos fuimos de vacaciones ni nada de eso. Así que en la secundaria, como tenía mucho tiempo libre, me dediqué a invertir en cosas que me pudieran servir en algún futuro, inclusive papeles. Es por eso por lo que con los ahorros e ingresos pequeños que iba teniendo saqué el pasaporte, y con el tiempo saqué la visa. Recuerdo que todos me preguntaban si iba a viajar y yo respondía que no, no iba a viajar a ningún lado, pero tenía todo para poder hacerlo en algún futuro y guardé todo en un cajón.
Vivimos en un país muy volátil, el dinero no te dura nada, así que no me quedaba otra que invertir en algo que mantuviera valor y que pudiera usar en el futuro. De esa manera mantuve mi mirada, compré pedaleras aunque nunca toqué en vivo, nunca en una banda, pero en algún momento las iba a tener que utilizar. Me armé mi home studio y de a poco me fui equipando más y años después hablé con un chico de Hillsong Buenos Aires, que me invitó a hacer un viaje misionero. Yo lo veía como algo super lejano, y no creía que pudiera ocurrir, pero este amigo me hizo ver que era en serio y me invitó a sumarme, porque habían visto mi trabajo y me necesitaban para hacer sonido y participar en el área musical.
Finalmente no se terminó dando. Un año después, me llamó gente de una iglesia de California, que habían tenido contacto con ese grupo de misioneros que me había invitado anteriormente. Estuvieron viendo mi trabajo, buscaban alguien que pudiera dar todo su tiempo allá y me dijeron que me invitaban a trabajar con ellos en varias iglesias de California, produciendo en estudios, dando talleres y estudiando en Bethel Church y Hillsong . Lo más loco es que me dijeron: “El dinero para vos está”, no me tenía que pagar nada, ni estadía, ni comida e incluidos mis estudios en Bethel Church y Hillsong California.
Cuando el coordinador vino para Argentina tuvimos reuniones y me dijeron: “Lo único que necesitamos es que tengas la visa tramitada”. A lo que respondí: “La tengo hace años”. Ya tenía todo lo necesario para salir del país, porque había invertido en eso antes, lo cual me ahorró tiempo y dinero. Por el tema de la pandemia no pude hacer el viaje, por eso en el mes de marzo ya viajo para allá.
Con todo esto empecé a unirme cada vez más con grupos de trabajo de California, gente que me empezó a conocer y me empezó a llamar para producir con ellos, lo cual hizo crecer el abanico de contactos. Así que voy a estar trabajando como productor en estudios allá y en iglesias.
LC: Eso demuestra lo importante que es prever y prepararse a futuro. Mencionaste que habías invertido en equipamiento para tu home studio y ya que estamos hablando de la inversión: ¿crees que un equipamiento caro y de calidad garantiza una buena producción? J: No, para nada. Pero si un buen productor trabaja con un equipamiento caro, eso sí te lo garantiza, es un conjunto de ambas cosas. Yo arranqué produciendo con la “Cristinetbook” (dice Josu refiriéndose a la netbook del gobierno), no hay excusa hoy en día.
LC: La mayoría de tus producciones estuvieron relacionadas con el worship y el góspel. ¿Por qué crees que se dio por ese lado? ¿Y qué otros estilos te gustaría producir que no hayas trabajado hasta el momento? J: Yo iba a una iglesia chiquita, pero con los mejores músicos del pueblo, y cuando ellos se casaron se fueron. El nivel musical bajó, y yo quería que siguiera sonando como sonaba antes. Entonces me empecé a meter, conocí lo que era el Mainstage, me compré una Mac viejita pero que me soportó los programas que yo quería usar.
Empecé a investigar lo que era el worship, que en ese momento no era un estilo, no era una categoría. Pero después, como todos los productores encuentran una fórmula y la repiten, entonces empecé a hacerlo hasta que logré tratar de reproducir lo que escuchaba. Llevó mucho trabajo.
El vivir en un pueblo me potenció a tratar de aprender a hacer sonar y reproducir lo que yo escuchaba. Pero mi estilo principal no es el worship, el estilo que más me encanta es el punk, el post hardcore, escuchas eso y dices: “¿Josu, escuchas esa música?”, o sea nada que ver a lo que hago. pero me encanta. Yo soy más de Deny, Paramore, Avenged Sevenfold, Switchfoot que es mi banda principal, y no puedo evitar encontrarme con muchos sentimientos cada vez que escucho una canción de ellos. Y creo que el worship está totalmente influenciado por estos estilos, por eso creo que conectaron bien.
Y si hablamos de qué otros estilos me gustaría producir, serían estilos de bandas como Sullivan, Fila 9, Valor interior, Deny, y para hacer eso tendría que meterme más en el ambiente y góspel también. Ahora, por ejemplo, me metí en el góspel, y cuando te metes en esos rubros creces un montón y empiezas a disfrutar más. El worship es mi zona de confort y creo que ya es tiempo de salir y seguir creciendo con más estilos, no solo el que ya vengo trabajando.
LC: ¿Qué opinas de la producción dentro del ambiente cristiano? ¿Crees que se está logrando innovar y aportar a la cultura en general? J: Sí, hay muchos cambios, el worship de ahora no es el de antes. Ahora hay cosas como vocoders y elementos que usaba Justin Bieber en el 2015. Empezaron a traer las producciones de afuera a la iglesia, antes Young and Free no era música para alabar, no era tan aceptado en algunas iglesias, y hoy en día se tocan hasta en las conservadoras. Hoy en día la producción dentro del ambiente cristiano está totalmente influida por música secular.
La influencia musical cambió hasta el público protagonista, es la era de los jóvenes, ellos tienen el control, ponen sus estructuras, y en eso la música tiene un gran peso. Todo eso hizo que las iglesias evangélicas hasta cambien su estética y la modernicen a una estética más juvenil.
LC: Muchas veces se habla de la música cristiana como un ambiente que no logra salir de ese círculo. ¿Crees que es así? ¿De qué forma crees que se podría llegar a un público más general y más amplio sin perder la identidad cristiana en la música? J: Hoy en día hay música cristiana que ha salido mucho de su círculo, por ejemplo Oceans de Hillsong es conocida en todo el mundo. Creo que la manera de salir del círculo es animarse a hablar de todo, hay muchos temas para hablar, muchas razones para cantar, no solamente temáticas de adoración, y muchos motivos por los cuales puedes generar un mensaje, y salir del círculo. Por ejemplo Corto Plazo tiene canciones que las pueden escuchar cristianos y las disfrutan, pero también las pueden escuchar no cristianos y también las disfrutan por su contenido, genera sentimientos.
El cristiano no debe ponerse tibio, pero tiene que entender que estamos en una época en donde uno necesita transmitir amor. Obviamente que Dios es amor, pero Él es justo también, y Dios dice “Ámense unos a otros”. Lo dice como la ley más importante. No te sirve ser el mejor músico, el mejor adorador o predicador si no tienes amor.
Santiago Benavidez es un músico que logra transmitir eso, y él puede hablar de cualquier cosa. Switchfoot es otra banda que ha logrado salir del círculo. El cristiano no está llamado a encerrarse en cuatro paredes, de hecho el significado de “iglesia” es Ekklesia, estamos llamados a afuera. Es vivir reflejando el Evangelio antes que cantarlo.
LC: ¿Qué sigue de ahora en adelante?, ¿tienes algún otro proyecto en mente? J: Me gustaría tener un estudio propio y empezar a producirme a mí. Tengo el proyecto de mi banda, pero empezar a hacer una carrera propia, con canciones que yo cree y que me gusten, y el proyecto de tener redes sociales que me permitan tener una influencia, poder enseñar, tener patrocinio, como lo que se me está dando ahora con Daddario.
LC: ¿Qué consejos crees que podrías darles a personas que sueñan y aspiran con ser productores? J: Lo primero es que empiecen, que empiecen algo y lo terminen. La mayoría o no empieza o deja las cosas por la mitad, empezar algo y llegar hasta el final. Lo segundo es aprender a recibir las críticas de todos lados, recibir críticas hirientes, buenas, pero hay que recibirlas igual porque todo sirve. Y algo importante, si alguien que no es productor o músico te dice que algo anda mal, escúchalo, porque si alguien que no conoce, ve que algo está mal, entonces es muy probable que eso te mate. Toda opinión vale.
Siempre conviene tener alguien que te acompañe, que sepa, y que te aconseje cuando lo necesitas y poder tener la libertad de pasarle cosas para que escuchen y te den una devolución. Produce con lo que tengas, si tienes la “Cristinetbook” produce igual, lo importante es dar el primer paso.