Cuando analizamos lo que hemos alcanzado y lo que no, obtenemos como resultado que las metas que fijamos al comienzo del año no se pudieron lograr como lo hubiéramos querido.
No siempre dimensionamos el impacto que tienen nuestras acciones, pero lo que hagas hoy influye en el mañana y afectará a tus hijos, a la próxima generación.