La organización cristiana dirigida por el pastor Juan Carlos Manzewitsch, lleva alimentos, protección y logra sacar a los hermanos ucranianos fuera del peligro.
Aprender las reglas y adquirir habilidades sociales, saber cómo enfrentar los temores, tolerar las frustraciones y festejar triunfos; a todo esto se aprende jugando.
Nuestro desafío es darle a la gente suficiente alimento a través de la Palabra para que puedan vivir nutridos, fortalecidos e iluminados en su entendimiento.
Muchas veces, hemos optado por mirar al costado, hacer de cuenta que simplemente pasará algún día y que no somos parte de todos estos conflictos Sin embargo, debiéramos comprender: Fuimos llamados a ser luz y sal en este mundo.
no estamos hablando de las cosas que hacemos para Él, sino de cómo Cristo va creciendo dentro de nosotros. Si Él no crece en los santos, todo lo que se haga quedará en el marco del activismo.