“… más vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20)

Esta conmovedora película brasileña está basada en una historia real, un episodio en la vida de Esthefany Maia Da Silva, una joven cristiana de 19 años que pese a padecer una enfermedad incurable en plena pandemia, no dejó de ayudar y cumplir con el propósito que Dios tenía para ella. Su testimonio trascendió las fronteras de su país para ser de gran bendición en medio de esta crisis mundial. 

A Esthefany le diagnosticaron una enfermedad autoinmune llamada lupus. Esta afección la obligó a permanecer varios días en un hospital y luego en su casa, por considerarse una paciente de riesgo. “Quería estar en primera línea ayudando, pero ahora, sin quererlo, me quedé en la retaguardia”, sostenía ella, mientras se lamentaba.

Para que su hija no se sintiera tan sola y aburrida, su papá le propuso escribir un diario íntimo. De esta manera podría expresar todo aquello que sentía y pensaba, luego de contraer esta enfermedad.

Él consideraba que, si ella narraba todo lo que le estaba pasando, sobrellevaría mejor ese momento y podría ayudar a otras personas con estas mismas dificultades. Ninguno de los dos imaginaba la importancia que tendría ese cuaderno meses después.

A través de una videollamada, Esthefy conoció a Dayane, una chica cristiana que padecía su misma patología. Esta nueva amiga la ayudó, entre otras cosas, a tratar de encontrar lo bueno en cada circunstancia de la vida. “Ahora veo en todo esto nuevas oportunidades para mejorar y para cuidar a los que están alrededor”, manifestaba la protagonista del film.

Ni el posterior deterioro de su salud ni la pandemia que golpeó y aún sigue azotando terriblemente a la ciudad de Manaos, en el estado de Amazonas, le impidieron a Esthefany Maia cumplir con su deseo de ser misionera.

Porque mis pensamientos no son los de ustedes; ni sus caminos son los míos, afirma el Señor. Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes; ¡más altos que los cielos sobre la tierra!” (Isaías 55:8-9)

Esta película testimonial, que posiblemente te haga emocionar hasta las lágrimas, fue producida por la Iglesia Adventista del Séptimo día de Brasil y Rud Films Sudamericana. La dirección estuvo a cargo de Priscila Baracho y Alex Simoes. Es una excelente opción para ver y compartir con adolescentes. Está disponible a través de la plataforma gratuita de YouTube y tiene una duración de 53 minutos. No dejes de verla. ¡Te la recomiendo!

Me recibí en DeporTEA y estudié la carrera de Ciencias de la Comunicación Social y el Profesorado en Educación en la UBA.Casado con Carina Turrisi. Vivo en San Bernardo del Tuyú, Partido de la Costa en Argentina.