¿Desde qué lugar administro la crianza de mis hijos? ¿Desde mis necesidades, para que sean lo que yo quiero que sean?, ¿o desde el propósito de Dios para ellos, para que sean lo que Dios quiere que sean?
Los celos actúan como el deseo o posesión del otro, como una necesidad de acaparar toda su atención y, al no conseguirlo, la persona se siente frustrada, no querida o rechazada