mail

Suscribite a nuestro boletín

La verdadera productividad

La verdadera productividad

Nuestra cultura determina que mientras más hacés, más productivo sos, y si hacés menos, sos menos productivo. Esta es la palabra que usamos para medir nuestra capacidad de hacer.

Entonces en la actualidad la productividad es la unidad de medida que se usa para ponerle valor a las personas. Pero a los ojos de Dios, la productividad luce un tanto diferente. Hoy quiero compartir algunas claves para poder ser productivos, pero productivos de verdad.

Si sos como yo, es probable que te encante hacer mil cosas. Y a veces tal vez te cuesta decirle que no a las oportunidades que se aparecen para aumentar el rendimiento. Estas puertas que se abren para la creación pueden ser una bendición, pero cuando la cantidad de tareas que están servidas comienzan a ser desbordantes, podemos entrar en un exceso de actividad que nos comenzará a abrumar.

«Sé lo que tengo que hacer y sé lo que no tengo que hacer». Esta frase la escuché por primera vez hace unos años, y transformó por completo mi manera de pensar. Descubrí que el “hacer productivo” se trata de obtener resultados para un objetivo específico y no de hacer una gran cantidad de tareas. Siempre pensé que la productividad se medía en números, cuando en realidad para Dios la productividad se mide en fidelidad.

Si caminamos por la vida pensando que nuestro valor aumenta a medida que hacemos más cosas para Dios, realmente nos estaremos perdiendo de una verdad trascendental. La productividad es sinónimo de fidelidad en el cielo. 

“Fidelidad es hacer de manera excelente solo lo que Dios me diga que haga, ni más ni menos”. 

Jesús nos modela esto, de esta forma: “…solo hace lo que ve que el Padre hace…”, Juan 5:19. El hacer “de más” nos roba la energía de lo que realmente debemos ocuparnos. Y cuando damos de nuestras fuerzas a lo que no tenemos que hacer, nos volvemos personas improductivas.

Si Dios hoy te pidiera que te tomes el día para descansar, y vos te pusieras a trabajar, aun cuando tu trabajo fuera muy bueno, vos estarías siendo absolutamente improductivo. Si Dios te lo dijo, entonces el descanso será lo más productivo que podrías hacer ese día. Y de la misma manera, descansar cuando debes trabajar, también te vuelve improductivo.

Ocupados o productivos

Amo que no exista una fórmula para la productividad, y si bien tenemos infinidad de herramientas para volvernos efectivos a la hora de realizar nuestras tareas, lo que realmente nos vuelve productivos es nuestra capacidad de reconocer y obedecer su voz en todo momento.

El peligro de no escuchar su voz es que no sabremos qué hacer. Y cuando no sabemos qué hacer, nos ponemos a hacer TODO. Lo que nos vuelve personas cansadas y ocupadas, pero jamás productivas. Escuchar su voz nos permite saber qué hacer y cuándo hacerlo, de la misma manera que nos enseña qué cosas no hacer.

Cuando Jesús caminó en la tierra, Él caminó fiel a su llamado. Pasó 30 años en el anonimato, aprendiendo el oficio de su Padre y honrando a sus autoridades. Jesús tal vez veía a mucha gente enferma a su lado mientras caminaba por la ciudad, y probablemente quiso sanar y liberar a uno que otro endemoniado. Me imagino que quiso hacer muchas cosas sobrenaturalmente buenas, pero que no eran para ese tiempo. 

Hoy nos llenamos de actividades que Dios no nos pidió, y nos volvemos gente desenfocada que cuando tiene que hacer aquello para lo que fue llamada, ya se encuentra sin energía ni fuerzas. Nos volvemos gente ocupada, pero para nada productiva. 

Nos hace sentir bien el hecho de decir que hacemos muchas cosas, pero es necesario dar un giro, y estar dispuestos a escuchar una vez más Su voz.

Vamos a la práctica

¿Querés volverte una persona verdaderamente productiva? Mi desafío para vos el día de hoy es que te tomes un tiempo para hacerte estas preguntas: Dios, ¿qué tengo que hacer en esta temporada de mi vida?, ¿qué cosas tengo que dejar ir? ¿Dios, cuáles son los extras que me roban mi productividad? ¿Dios, debo estudiar esta carrera o este instrumento? ¿Dios, tengo que decirle que sí a esta puerta abierta?

Dios ama que seamos productivos, Él nos creó con esa capacidad, y Él nos premia cuando somos fieles. Pero la productividad nace de reconocer su voz, y escuchar su dirección en el día a día. Ser sensibles a su guía para dejar ir los extras de nuestra vida, y poner todo nuestro enfoque en lo que Él nos está diciendo en este momento.

 Es importante que al hablar de productividad hoy te puedas ir con estas verdades:

  • No sos lo que hacés o la cantidad de cosas que producís.
  • No llenes tu vida de extras, al contrario, eliminalos.
  • Sé fiel en lo que tenés que ser fiel.

La clave siempre estará en conocer Su voz, confiar en su dirección y hacer solo “lo que ves al padre hacer”, esta es la verdadera productividad.

La película de Jesús es transmitida en las tribus indígenas

El movimiento de la película de Jesús que lleva a cabo el ministerio Cru conocido como el “Proyecto Película de Jesús”, sigue extendiéndose a nivel global. Esta vez, la misión de transmitir el mensaje del Evangelio ha llegado a una tribu indígena con la traducción número 2,100 de la Película de Jesús de 1979.

El movimiento de la película de Jesús que lleva a cabo el ministerio Cru conocido como el “Proyecto Película de Jesús”, sigue extendiéndose a nivel global. Esta vez, la misión de transmitir el mensaje del Evangelio ha llegado a una tribu indígena con la traducción número 2,100 de la Película de Jesús de 1979.

La próxima proyección de la película se estrenará en la lengua waorani, hablada por aproximadamente 3,000 indígenas de la Amazonia ecuatoriana. Esta traducción representa un hito significativo, especialmente teniendo en cuenta la historia del cristianismo con la tribu waorani.

Chris Deckert, el director de Estudios Lingüísticos de Jesus Film Project, explicó: «Esta iniciativa ha sido posible gracias a la colaboración entre Jesus Film Project y un consorcio de grupos indígenas, junto con el acuerdo y el apoyo de los ancianos waorani».

Es necesario destacar que la tribu waorani es la misma cuyos guerreros martirizaron en 1956 a cinco misioneros cristianos estadounidenses, incluyendo a Jim Elliot y Nate Saint, por compartir el Evangelio.

El ministerio ITEC, fundado para servir al pueblo Waorani y a otros grupos de personas, ha sido fundamental para facilitar la conexión entre Jesus Film Project y líderes clave dentro de la comunidad Waorani.

Cru Ecuador se unirá a ITEC y otros ministerios para utilizar esta nueva herramienta con el propósito de llevar el amor de Jesús al pueblo Waorani.

Josh Newell, director ejecutivo de Jesus Film Project, expresó su emoción por este gran logro: «Queremos garantizar la accesibilidad de la película, no sólo en los idiomas más hablados del mundo, sino también en el idioma del corazón de cada comunidad. Esperamos ser testigos del poder transformador de esta película entre el pueblo Waorani».

Hasta la fecha, más de 200 millones de personas han decidido conocer a Jesucristo después de ver la película Jesús, según el sitio web del Proyecto Película de Jesús. Esta producción continúa siendo la película más traducida en el mundo.

«La oportunidad es grande. Las Escrituras nos dicen que los campos de cosecha espiritual están maduros, y con la ayuda de amigos como usted, muchos más pueblos no alcanzados pueden escuchar y responder al mensaje de esperanza en Cristo. El momento de actuar es ahora», indica una declaración en su sitio web.

Por otro lado, los fundadores resaltaron la importancia de este gran movimiento para llevar el evangelio a aquellas personas que más lo necesitan: “Ya sean estrategias, proyectores, tabletas o tarjetas microSD, trabajamos para equipar al cuerpo de Cristo para ir a cualquier lugar donde la gente necesite a Jesús. Porque sabemos que diferentes métodos de entrega se conectan con diferentes personas.”

Además agregaron: “Ayudar al cuerpo de Cristo a compartir el evangelio nos ha inspirado desde la creación de la película «JESÚS» en 1979. Nos sigue impulsando hoy, mientras seguimos encontrando nuevas e innovadoras maneras de compartir el evangelio. En el corazón de todo lo que hacemos, queremos ver al mundo alcanzado con las noticias que cambian la vida, las de Cristo”.

No te detengas

NO TE DETENGAS
NO TE DETENGAS

                                 No te detengas


                                  Nunca dejen de orar (1 Tesalonicenses 5:17)

El hermano Lawrence se destacaba por estar consciente a toda la presencia de Dios y sostener largas conversaciones con él en medio de las tareas de su jornada darse el lujo de cavilar sobre las realidades eternas mientras fregaba los platos. Así y todo, muchos no han tenido la suficiente disciplina como para hacer algo parecido. Este hombre de fe “respiraba plegarias”.

Todos tenemos la oportunidad de llenar con oraciones el tiempo libre y las tareas diarias. Quizás no podamos hacerlo siempre, porque la mayoría de nosotros tenemos trabajos y responsabilidades que demandan nuestra total concentración en el asunto. Pero sí podemos conversar con Dios más frecuentemente de lo que lo hacemos.

En 1 Tesalonicenses 5:17, Pablo no instruye a los lectores a orar de continuo; más bien anima a seguir orando, sin nunca rendirse o desanimarse, porque sus intenciones son en extremo importantes. 


¿Cómo es esto posible? El Señor les dio a los seres humanos la responsabilidad de cooperar con él en la obra de su viña. En un principio ellos poseían las llaves del reino (Génesis 1:28), pero las perdieron en la caída. Jesús las recobró para entregárselas a quienes le siguen (Mateo 16:19). El busca intercesores (Isaías 59:16) y les revela sus planes a aquellos que lo escuchan (Amós 3:7) para que declaren y pidan acorde a su voluntad en este reino. Por razones que desconocemos, Dios ha decidido obrar en la humanidad de manera interna, a través de nosotros, y no de manera externa. Nuestras oraciones son clave para que él intervenga contra el mal en la tierra.

Si de veras quieres ser sal y luz en este mundo, ora sin desmayo. Si es preciso, deja que Dios reforme tus plegarias, pero continúa pidiendo. En lo espiritual, el Señor está obrando sin descanso. Los corazones se están abriendo, las vidas están transformándose. Tu persistencia en la súplica es importantísima en el proceso. En el mundo espiritual tú eres un soldado de primera línea y tus oraciones son el medio para ganar terreno. No te rindas en la pelea.

Devocional de libro Sal y Luz: Chris Tiegreen

Adicciones ocultas: ¿Como decirlo? ¿Cómo tratarlas?

En el artículo de hoy tocaremos un tema del que considero es clave y muy necesario hablar, para que podamos tomar consciencia de la importancia de visibilizar y ayudar a tantas personas que, en silencio, padecen de alguna adicción y no logran, ni salir de esa situación, mucho menos, contárselo a alguien.

En el artículo de hoy tocaremos un tema del que considero es clave y muy necesario hablar, para que podamos tomar consciencia de la importancia de visibilizar y ayudar a tantas personas que, en silencio, padecen de alguna adicción y no logran, ni salir de esa situación, mucho menos, contárselo a alguien.

Como sabemos, una adicción es una enfermedad que compete tanto lo físico como lo psicoemocional y que crea una dependencia o necesidad hacia una sustancia, actividad o relación.

Las adicciones son un problema de salud, un problema que hace referencia a dos grandes esferas que son: la biopsicosocial y la espiritual, en donde hay una serie de características y de signos o síntomas que involucran varios factores, entre ellos están los factores biológicos, genéticos, psicológicos y sociales que si bien, predisponen a una persona hacia una conducta adictiva o de resiliencia, no son los únicos determinantes, por eso no solo es el consumo a lo que hay que observar, sino también a todo lo que está por detrás de ello.

Cuando los especialistas hacen referencia a la resiliencia en las adicciones, afirman la posibilidad, en determinados individuos, de recuperar esa capacidad de vivir sin algo externo que los estimule para enfrentar las diferentes circunstancias de la vida. Esto genera cierta fuerza interna y firmeza en el carácter, que hace que una persona pueda colocar un límite y decida para su bien, a pesar del contexto en el que vive.  

Hay algo que es real, y es que las adicciones en sí, son una de las enfermedades que más alto porcentaje de recaídas tienen. Mientras el paciente este sin consumir puede hacer vida normal, probablemente con algún cambio de hábitos para potenciar aún más el entorno saludable, y deberá estar muy atento a determinadas situaciones de riesgo para evitar recaer.

Vivimos en un tiempo difícil, en donde muchas personas son adictas a múltiples sustancias, incluso muchas de ellas comenzaron siendo prescriptas por médicos pero hoy, terminan generando una dependencia que ya irrumpe en la cotidianeidad de la persona y de su entorno. Hay investigaciones que demostraron que las adicciones tienden a estar relacionadas con problemas basados en la soledad, el estrés, la ansiedad y depresión.

Si bien, nos encontramos con algunos que logran recurrir a terapia para hablar de lo que les pasa y utilizar el método terapéutico como alternativa, lo cual es fundamental, otros tantos lo atraviesan en silencio, sienten que no pueden hablar sobre lo que les pasa porque no encuentran un ambiente seguro en donde conversarlo por ser juzgados o puestos en evidencia.

En el artículo de hoy, me gustaría orientarte a que, si estas atravesando una adicción de cualquier tipo y aún no lo has contado, puedas encontrar un lugar seguro y logres abandonar ese mal habito que terminara dañando de forma masiva tu vida.

Desde la psicología, cuando hablamos de adicción, nos referimos a una negación en la comunicación. La A-representa el no y, dicción representa la palabra. La persona que se involucra en una a-dicción, por lo general no puede decir lo que realmente siente o le está sucediendo y usa la adicción como mecanismo para llenar ese espacio.

Los adictos suelen negar la gravedad de su adicción y el impacto negativo que tiene en su vida o en la de los demás. Por eso evitan la palabra, mienten sobre su condición, y creen que pueden controlarlo. Pero cuando la adicción se instala, en general, aparecen las mentiras como un mecanismo de comportamiento propio de su adicción en donde se prioriza el consumo sobre la integridad de sus relaciones personales.

No debemos olvidar que la adicción es una enfermedad que afecta al cerebro directamente y produce cambios en el comportamiento, por lo tanto interfiere en los mecanismos neuronales que gestionan la capacidad del juicio y toma de decisiones. Esto influye de una forma importante en la capacidad de los adictos para ser honestos.

Cada año mueren millones de personas en el mundo a causa del consumo de sustancias, mueren sin esperanza, mueren de dolor sus familiares por sentir que no han podido ayudar lo suficiente o sentirse responsables por el desenlace.

La Biblia es el manual perfecto que nos insta a vivir como Dios diseño para cada uno, y así, estar preparados para enfrentar el dolor y atravesar, por medio de la fe, las situaciones más difíciles, incluso las que creemos imposibles.

En Filipenses 4:13 “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” dice todo, característico, cuando nos aferramos a Él, y no a nuestras fuerzas, es cuando realmente alcanzamos lo que deseamos.

Cuando trasmitimos la importancia de comprender la fe como necesidad primordial y le sumamos el rodearse de las personas adecuadas, es cuando el adicto se siente seguro para expresar sus emociones y pensamientos, y así, por consecuencia, notara cambios en su comportamiento.  Por eso, considero clave el poder enseñar a las generaciones que siguen a ser asertivos en lo que sienten y piensan para que logren expresarlo de forma certera.

Para finalizar, quiero dejarte tres pasos para que puedas comenzar el proceso: en primer lugar, identifica que tienes un problema y que se te fue del control que creías que tenías. Ya es momento de visualizar tu situación como “grave” y poder reconocer que necesitas ayuda. En segundo lugar, mira a tu alrededor y encuentra una persona que valga la pena hacerla parte de tu vida, para que te acompañe en el proceso que acabas de iniciar. Y en tercer lugar, utiliza la fe como único carril que te llevara a el resultado que deseas.

Antonio Banderas y Lecrae participan en el nuevo musical que relata la historia del nacimiento de Jesús

camino-a-belen
Película Camino a Belén

“Camino a Belén”, la nueva superproducción estadounidense, llevará a la pantalla grande el viaje de María y José que los llevará al lugar en donde Jesús nació.

Se acerca la navidad y, como todos los años, diferentes expresiones artísticas festejan el nacimiento de el Salvador del mundo. Este año es el turno de “Camino a Belén”, película dirigida por Adam Anders, un director sueco que anteriormente participó en grandes producciones musicales importantes y que en esta ocasión decidió retratar la historia del nacimiento de Jesús con drama y canciones.

María y José

Según dijo el propio Anders «se me ocurrió la idea hace años cuando buscaba un musical para ver con mi familia en Navidad. Quiero que esta película sea tan luminosa y brillante como la estrella de Belén».

Esta película cuenta con una producción hollywoodense de alta calidad y con las actuaciones de grandes como Lecrae, quién interpreta al ángel Gabriel, Antonio Banderas como Herodes y Joel Smallbone, el vocalista de For King And Country, que personifica a Antípatro.

“Lo que más me impacta del personaje de Gabriel es el verdadero significado de su misión”, compartió Lecrae, “Él fue literalmente el encargado de llevarle el mensaje a María de que ella sería la única que llevaría en su vientre al salvador del mundo”, añadió.

“Aunque no soy un arcángel, soy un mensajero, y para mi el mejor mensaje que puedo dar es el de la bondad, el amor y la gracia de Dios. Ese es el mensaje que yo quiero comunicar a las personas”, concluyó el artista.  

Esta producción interpretará el viaje que José y María deberán emprender hacia Belén. Viaje que culminaría en un establo en el que María daría a luz al Hijo de Dios.

En una cultura llena de películas que transmiten mensajes contrarios a los de Jesús, esta es una perfecta oportunidad para disfrutar en familia de un largometraje inspirado en la historia real del nacimiento de la Luz, aquel misterio que fue revelado y que hoy nos da acceso al Padre

Este film se estrenó ayer en los cines de Estados Unidos. Aún no hay fechas para el habla hispana, pero es cuestión de estar atentos a las plataformas de Streaming.  

¿Cómo enfrentar la tristeza?

Últimamente hay situaciones que nos llevan a vivir de una manera totalmente diferente, muchas veces provocándonos una fuerte tristeza y está claro que debemos hacer algo para enfrentar la realidad que nos toca vivir, pero la pregunta es ¿cómo? 

Con frecuencia me encuentro en entrevistas de consejería con jóvenes y adolescentes que se encuentran atravesando algún tipo de tristeza y mientras escucho atentamente los motivos, siempre viene a mi mente este versículo que nos permite analizar y distinguir su origen. 

En 2 Corintios 7:10 dice: “La tristeza que proviene de Dios produce el arrepentimiento que lleva a la salvación, de la cual no hay que arrepentirse, mientras que la tristeza del mundo produce la muerte”.

A través de este pasaje vemos una notable diferencia entre la tristeza que proviene de Dios y la de este mundo. Por un lado el Señor nos invita al arrepentimiento, a pedir perdón, y nos desafía a volver a empezar. Pero por otro lado está la tristeza de este mundo que nos provoca a seguir en ese estado y nos dice que no tiene sentido seguir viviendo.

de ahora en adelante te animo a que identifiques de dónde proviene la tristeza y que actúes en consecuencia.  

Jesús, nuestro modelo por excelencia, pasó por todos los estados en los que podemos encontrarnos y con su ejemplo nos enseña cómo debemos proceder. Pero hablando puntualmente de la tristeza, hay un pasaje que no podemos dejar de leer. Miren lo que Jesús vivió en el relato de Mateo 26:36-46

¿De dónde provenía la tristeza de Jesús? Recordemos que Él es el varón perfecto, el cordero sin manchas, es decir, Jesús no tenia de qué arrepentirse ya que nunca cometió pecado, por lo tanto, la tristeza que lo atravesaba provenía de este mundo. 

Cuando Jesús identifica la tristeza en su corazón, toma la decisión de orar y se dirige a un monte para hablar con Dios.

En ese momento invitó a Pedro, Juan y Jacobo para que lo acompañaran y se mantuvieran rogando y suplicando a Dios que lo librara de aquello que tenía por delante. Pero Dios tras un largo silencio, le comunicó a Jesús que había llegado la hora de enfrentar la muerte. 

La historia la conocemos, Cristo fue entregado a los sacerdotes, juzgado y condenado a la cruz, donde derramó su sangre y finalmente murió. Ese sacrificio saldó la deuda que todos habíamos generado a causa del pecado y Dios al tercer día lo resucitó de entre los muertos, proporcionando vida eterna mediante la fe en Jesús. 

Acciones que necesitamos ejercer 

Según el ejemplo de Jesús, para enfrentar la tristeza debemos:

  • identificar de dónde proviene; 
  • en caso de ser Dios el que la genera, arrepentirnos, pedir perdón y corregir; 
  • si la tristeza proviene de este mundo, presentarse ante Dios en oración; 
  • pedirles a amigos de confianza que nos acompañen en oración;
  • que la oración sea precisa, con una dirección especifica; 
  • permanecer en oración hasta que Dios responda;
  • sea cual sea la voluntad de Dios, obedecerla;
  • enfrentar la realidad tal como se presenta, bajo la guía del Señor. 

Jesús quiere acompañarnos a enfrentar la tristeza tal como él lo hizo, no estamos solos, el Espíritu Santo está con nosotros, su perfecta guía nos enseñará el camino para encontrar la salida. Y aunque el mundo nos presente aflicciones, debemos estar tranquilos porque Jesús ya venció el mundo. No perdamos de vista las promesas de Dios quien nos asegura que transformará nuestra tristeza en gozo. 

Te dejo un video que resume esta nota, la cual te animo a que compartas con aquellos amigos que estén atravesando por momentos de tristeza. 

Siya Kolisi, el rugbier que dió la gloria a Dios al ser campeón del mundo

El atleta cristiano y capitán de Sudáfrica jugó un gran partido en la final tras recuperarse milagrosamente de una grave lesión.

El capitán de Sudáfrica jugó un gran partido en la final tras recuperarse milagrosamente de una grave lesión.

El rugbier Siya Kolisi disputó en París su segunda final del mundo como capitán de la selección sudafricana de Rugby. Los “Springboks” (Sudáfrica) se enfrentaron a los neozelandeses con sus legendarios “All Blacks”, siendo ambos países los máximos ganadores del título mundial, con tres hasta ese momento.

Kolisi ha sido uno de los jugadores más destacados que tuvo Sudáfrica en este Mundial de Rugby 2023. Además, el ala jugó en gran nivel en el triunfo ante los All Blacks en la final, donde vencieron 12 a 11 a Nueva Zelanda, logrando el bicampeonato mundial y convirtiéndose en la selección con más triunfos en la historia de los mundiales con 4 trofeos.

Siya nació en Port Elizabeth hace 32 años. Fue nombrado como el primer capitán de tez morena en la historia de los Springboks en 2019. Saliendo del deporte, otra de sus pasiones es su fe en Jesús.

Nació en la pobreza más extrema de su pueblo natal y fue criado por su abuela en un barrio marginal, ya que sus padres aún eran adolescentes.

Cuando se convirtió en un jugador profesional, su carrera se rodeó de lesiones que afectaron su salud, tanto fue así que su presencia en esta competición fue catalogada de milagrosa debido a su estado físico. Una lesión en su rodilla provocó que fuera operado antes del torneo y los expertos consideraban que no podría recuperarse a tiempo.

Tuve que creer en un poder mucho más fuerte que yo. De ahí saqué mi confianza todos los días, sentí que, sin importar lo que sucediera en el proceso, estaba bien. No había manera de justificar o explicar cómo me estaba curando tan rápido”, comentó Siya Kolisi refiriéndose al obrar de Dios en su cuerpo.

Una curiosa historia involucra al deportista, ya que uno de sus entrenadores preguntó en broma a Kolisi si él, como es común en la cultura africana, había visitado a un sangoma (curanderos tradicionales del continente). La respuesta de Kolisi fue “No tengo un sangoma, tengo a Jesús”.

Por otra parte, en una entrevista resaltó el rol de su esposa en medio de este proceso: “Fue muy buena, simplemente oró y creyó que yo podría llegar hasta aquí, porque Jesús estaba conmigo”.

El deportista de 32 años también señaló que a pesar de algunas dudas que surgieron, mantuvo su fe. “Mi fundamento estaba en Dios. Si no sabía algo, oraba por ello”.

Clarita Baiocchi: “Compartir de Jesús comenzó a ser más importante que ganar medallas”

Clarita Baiocchi: “Compartir de Jesús comenzó a ser más importante que ganar medallas”

La corredora argentina nos compartió su experiencia de cómo disfruta a Jesús, tanto en lo deportivo como en su vida cotidiana, además de la manera que fue salva gracias al amor de Dios.

Clara Baiocchi nació en Bell Ville, provincia de Córdoba, hace 23 años. Es atleta de la Selección Argentina de Atletismo y corre desde los 8 años, donde su especialidad son las pruebas de 1500 mts llanos y 3000 mts con obstáculos en pista. Actualmente se encuentra cursando su último año del Profesorado de Educación Física y el 2do año del Profesorado de Educación Especial. 

“Desde mí niñez fui a la iglesia pero a mis 16 años comencé a tener una relación personal con Dios y a partir de ese momento corro para él”, nos comentó la cordobesa quien también sirve en el ministerio de Atletas Cristianos Argentina donde comparte con chicas de diferentes deportes.

Su primer acercamiento a Jesús fue cuando Clara era muy pequeña, pero lo comenzó a vivir de más grande, Mi mamá nos hablaba de Dios y nos enseñaba a rezar. Conocíamos acerca de Dios, pero no a Dios. Un día invitaron a mis hermanos mayores a un campamento de adolescentes y a partir de ahí nos comenzamos a congregar en la iglesia que estamos actualmente. Allí me bauticé y comencé a servir, pero en realidad no tenía una relación personal con Dios. No lo tenía en cuenta en mis decisiones ni era mi prioridad. Fue recién a mis 16 años, luego de tomar varias malas decisiones y de experimentar ese vacío y falta de sentido que uno tiene lejos de Dios, fue que decidí entregarme a Él por completo”.

“Pude sentir su abrazo y amor, no me reprochó nada, simplemente me perdonó. Me costó entender eso, que a pesar de no merecer su amor Él me amaba, ahí entendí el significado de la cruz. A partir de ese momento dejé que guiara mi vida sometiéndome voluntariamente a su voluntad, sanó todas mis heridas, me ayudó a perdonarme y perdonar, y me di cuenta de que el talento para correr que Él me había dado no era para obtener aplausos ni reconocimientos de la gente, sino para darle la gloria a Dios y para que las personas conozcan de su poder y amor a través de mi vida” agregó Baiocchi sobre su experiencia con Cristo.

“Lo más importante para mí es compartir de Jesús a otros y no ganar medallas”.

Ese instante fue un punto de inflexión en su vida, “Desde ese momento, comencé a disfrutar más del deporte, ya no sentía la presión propia de tener que ganar una medalla para ser aceptada por los demás, porque ya era aceptada por Dios. Además, el objetivo principal de mis viajes a las competencias es compartir de Cristo a mis compañeros, mostrarles su amor, su poder, y contarles lo que él había hecho conmigo. Quería que ellos disfrutaran de una relación con Dios así como yo la había empezado a disfrutar. El que me vaya bien en la carrera era un extra”.

Aunque su primera experiencia con el Señor se dió, “Cuando tenía 15 años, escuché el testimonio de personas que dejaban todo y se iban a África como misioneros a llevar la Palabra dónde nadie había escuchado. Al escucharlos me llené de ganas de dedicar mi vida a compartir la buena noticia de Jesús pero, eso significaba que ¿Yo también tendría que irme? Le pregunté a uno de ellos y me preguntó qué hacía yo. ‘Yo corro’, respondí, “¿Pero qué tiene que ver correr con Jesús?” . “No sé, pero si Dios te dió ese talento por algo es», me dijo. Quedé un poco confundida, pero unos años después entendí ”.

“Casi dos años después, luego de estar apartada, me volví a Dios de verdad. Comencé a desarrollar una vida de intimidad con él, cambió y sanó muchas cosas en mí. Quería contarle a todos. Amaba ver cómo al compartir de Jesús a otros sus vidas eran transformadas, eso era mucho más impresionante y eterno que ganar cualquier medalla. Empezó a ser mi estilo de vida. Y en los torneos era cuando más oportunidades de compartir tenía y la gente más escuchaba. Además de las entrevistas y medios de comunicación” agregó Baiocchi.

Cómo fue que Clara se dió cuenta que el Señor la quería en el ámbito deportivo, “Comencé la universidad y fueron casi tres años consecutivos en los que aunque entrenaba mucho y no tuve buenos resultados deportivos por diferentes razones (enfermedad, accidentes, lesiones). Sentía que al seguir entrenando, perdía el tiempo y energía que podía aprovechar para otras cosas. Estuve orando mucho pidiendo a Dios que me mostrara si me quería seguir usando en el deporte o en otra cosa, el objetivo principal seguía siendo compartir su mensaje. Fue difícil, sentía que oraba y no obtenía ninguna respuesta. No era una elección simple, ya que si dejaba iba a perder los sponsors y todo el apoyo deportivo, y si después quería volver iba a ser difícil recuperarlo, debía estar segura”.

Además agregó, “Finalmente decidí hablar con mi entrenadora para decirle que iba a dejar, que sentía que esto no tenía sentido y que quería usar mi tiempo para compartir de Jesús y estar con la gente. «¿No ves? ¿No te das cuenta que no necesitas dejar el deporte para compartir de Cristo sino que justamente el deporte te abre un montón de puertas para hacerlo? Mirá para atrás, todo lo que has logrado, la cantidad de puertas que se te han abierto, hay muchas personas que te escuchan y que te tienen como referente por lo que hacés. Si lo que querés es compartir de Jesús, dejar el deporte es desaprovechar una gran oportunidad que Él te dió para hacerlo”. Aquella pregunta que había hecho 5 años antes de “qué tenía que ver correr con Jesús» tenía respuesta: Jesús ama a los atletas, en la cruz dió su vida para que ellos también pudieran tener una relación personal con él, y a mí me daba la oportunidad de estar cerquita de ellos para contárselos”. 

La explicación de cómo Clara se inició en el atletismo es bastante curiosa, “Desde chica había una regla en casa: hacer al menos una actividad artística y una deportiva. Podíamos elegir lo que nosotros quisiéramos pero debíamos comprometernos a terminar el año con la misma actividad, después podíamos cambiar. Así fue que probamos de todo. Cuando yo tenía 8 años nos invitaron, con mis dos hermanos mayores, a una carrera en una localidad cercana, mi prueba eran los 1000mts. Al día siguiente le pedimos a mi mamá que nos llevará y así comenzamos. En aquel momento no había escuela de atletismo en mi ciudad, por lo que le pedimos a mi mamá, que es profesora de educación física, que nos entrenara. Ella se fue capacitando y hasta el día de hoy me sigue entrenando. Cinco años después comencé en la Selección Argentina”.

“Ponerse la celeste y blanca es una experiencia única. Es un gran privilegio pero también una gran responsabilidad, porque estás representando a tu país y querés que las cosas te salgan bien. En esos momentos, en los que los nervios te pueden jugar en contra, intento recordar que Papá Dios está disfrutando de verme correr, que tiene un propósito conmigo ahí y que me va a dar todas las herramientas necesarias. Eso me lleva a disfrutar más de las experiencias y dar lo mejor. Siempre, más allá de los resultados de la carrera, meto algo nuevo en la mochila: lugares, anécdotas, palabras nuevas, amigos que valen oro, otro «gol» que gritó con Papá cuando puedo bendecir a alguien, compartirle de él. Me toca competir en dos etapas del año: entre marzo-mayo y agosto-noviembre, cada 2 o 3 semanas. Generalmente tengo 2 o 3 competencias internacionales por año”, recordó la cordobesa.

Baiocchi tiene bien en claro sus sueños, “En lo deportivo me gustaría seguir avanzando hasta llegar lo más lejos que pueda, lo que sea que eso signifique. Claro que me encantaría ir a un JJOO, mientras tanto sigo mejorando. Mi deseo es a través del deporte y la docencia poder motivar a muchos niños y jóvenes, particularmente, a tener un estilo de vida sano, a conocer al Señor y atreverse a luchar por los sueños que él haya puesto en sus corazones y que de esa manera ellos ayuden a otros”.

El día a día de la corredora tiene como objetivo siempre compartir las buenas nuevas de Jesús, pero tiene una reflexión sobre este tema, “Por un lado, no creo que correr sea «La Forma» de compartir la Palabra. Compartir el mensaje del evangelio es un estilo de vida, es el objetivo desde que te despertás y donde sea que pases el tiempo. Conocer a Cristo y darlo a conocer, de eso creo que se trata todo. Pero requiere ser intencional, no sólo aprovechar las oportunidades que aparecen, sino crearlas, orar y avanzar en fe” . 

La cordobesa dejó un gran consejo para aquellos que quieran practicar un deporte junto a Jesús: “¡Que empiece! Que disfrute del proceso, porque más allá de los resultados, el deporte es una herramienta que Dios puede utilizar para desarrollar nuestro propio carácter (la perseverancia, la disciplina, la fe, el enfoque a largo plazo, etc.), así que aunque haya temporadas en las cuales no tengas buenos resultados, siempre salís ganando. Y también es una herramienta a través de la cual podemos alcanzar a otros, con palabras y con amor” .

Al final de la entrevista la deportista recordó el versículo “ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios” (1 Corintios 10:31).”

Las etiquetas no tienen ningún poder sobre tu vida

pastor-hugo-marquez-neuquen
pastor-hugo-marquez-neuquen
“Y cuando su alma partía, (pues murió), lo llamó Ben Oni (Hijo de mi Tristeza); pero su padre lo llamó Ben Jamín (Hijo de la Diestra)”. Génesis 35:18

Raquel, esposa de Jacob, da a luz su hijo menor y a causa de las dificultades del parto fallece. Antes de morir y cuando la partera le anuncia que tenía un nuevo hijo varón, ella le pone por nombre hijo de mi tristeza. Etiquetó a su propio hijo, según lo que ella había experimentado. Imagínese ese niño creciendo con el estigma de ser el: “Hijo de su tristeza”. Cuánta vergüenza y culpa habrá acarreado. Cuántas explicaciones debería dar ante aquellos que le preguntaran acerca del origen de su nombre.

Las personas ponen etiquetas, apodos según lo que ellos perciben de los demás. Las personas heridas van a herir a otros, como las personas amargadas van a subtitular a otros conforme su resentimiento.

Jacob rápidamente le cambia de nombre, se da cuenta del mal que le podría causar y dice: No se llamará Hijo de la Tristeza, de la Decepción, del Fracaso, ni del Dolor; se llamará: Hijo de mi Diestra, de mi Fortaleza, Hijo de Poder. Así fue que Benjamín creció y se convirtió en un líder, formó una de las tribus más destacadas de Israel. De allí surgieron reyes, linajes que gobernaron y engrandecieron a Israel.

Muchos hombres que hoy son considerados exitosos, tales como T. Édison, W. Disney, S. Spielberg, W. Churchill, A. Lincoln, padecieron menosprecio, los subestimaron y ridiculizaron. Pero el denominador común de todos ellos fue que no se quedaron con la etiqueta negativa que le pusieron otras personas. Decidieron vivir mejor que lo que esas etiquetas decían de ellos y alcanzar logros mayores que lo que otros les pronosticaron.

“La mayoría de las veces, las etiquetas que los hombres nos ponen no están de acuerdo con lo que Dios piensa de nosotros”.

Y si no sabemos cómo piensa Dios de nosotros, nunca encontraremos nuestra propia identidad ni llegaremos al destino de nuestra vida sino que estaremos sujetos a creer y vivir de acuerdo a esas etiquetas negativas que nos han puesto. Cuando pasa mucho tiempo, si no hemos removido esas etiquetas, quedarán incrustadas en las estructuras (fortalezas) de nuestro pensamiento y nos volvemos definitivamente lo que han dicho de nosotros.

Definitivamente nadie va a subir su propio nivel de vida, ni nadie va a poder vivir una vida plena si primero no remueve esas etiquetas. Cuántos de nosotros nos hemos criado escuchando: “Eso no es para ti; ya has fracasado antes; No sigas intentando, estás acabado; Nunca lo lograrás; deja de soñar, sé realista; No tienes recursos”.

Las palabras son como semillas. Si son sembradas en la mente y el corazón, echarán raíces y crecerán como una planta. El tema es que hay buenas y malas semillas y dan frutos buenos y frutos malos. Uno decide qué semilla dejará germinar en nuestra mente. Esas etiquetas negativas son como la maleza, como la mala hierba. No solo debes sembrar buena semilla sino también arrancar la mala.

Ante los profetas del fracaso debes declarar lo que la Palabra dice de tí y lo que puedes hacer. “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” Filipenses 4:13. Ante un error o una equivocación o un fracaso, los etiquetadores vendrán para decirle que no lo vuelva a intentar, que no eres talentoso, que no es lo suficientemente fuerte. Pero tú puedes escoger lo que la Palabra dice: “A los que aman a Dios, todas las cosas ayudan a bien. Diga el débil, fuerte soy. Soy más que vencedor por medio del que amó, Cristo”. Romanos 8.

El único poder que tienen es solo aquel que nosotros le podemos dar. Probablemente sean personas bien intencionadas las que han querido decir una verdad sobre tu vida. Un papá, una mamá, una maestra, un amigo. Pero tú no eres lo que los demás dicen de ti, ni puedes hacer solamente lo que ellos dicen que puedes hacer. Tu eres lo que tu Creador dice que eres y puedes hacer todo lo que solo Él dice que puedes llegar a hacer. 

Dios no se equivoca. Los que se equivocan son los que dicen: Eres muy pequeño, Eres muy tímido. No tienes personalidad. Te falta experiencia.

Cada uno de nosotros ha sido creado a imagen y semejanza del Dios Todopoderoso. Dios te ha creado del tamaño correcto, de la personalidad correcta, con los dones correctos, con la apariencia.

Adoración y rendición a metros de la zona roja en Ámsterdam

El centro de Ámsterdam, la capital de los Países Bajos, se convirtió en un punto donde más de 100 personas se reunieron la semana pasada en una plaza para adorar a Dios en varios idiomas.

El centro de Ámsterdam, la capital de los Países Bajos, se convirtió en un punto donde más de 100 personas se reunieron la semana pasada en una plaza para adorar a Dios en varios idiomas.

El ministerio Presence dirigió a la gente con cantos de alabanza en holandés, inglés, hebreo y árabe. La música llamó la atención de muchas personas que pasaban, y que se unieron al grupo en un momento de adoración a Jesús.

El equipo de Presence inició su evangelización en las calles por la tarde, con el apoyo de 25 pastores de iglesias locales. Se acercaron a las personas que pasaban, les entregaron copias de la Biblia y oraron con ellos.

Como resultado de este momento evangelístico, muchos escépticos y musulmanes entregaron su vida a Jesús en medio de la plaza. Entre los presentes, una mujer testificó con emoción, expresando que se sentía aliviada después de entregarse a Cristo.

Por la tarde, se vivió una profunda sensación de quebrantamiento y rendición entre los presentes. El mover de Dios continuó incluso después de que terminó la reunión, y los participantes no querían irse. Luego, un profundo silencio llenó la plaza y la gente clamó a Dios.

La adoración en ese punto fue una ubicación estrategica, ya que contrastaba con el ambiente oscuro del “Distrito Rojo”, barrio conocido por sus casas de prostitución, que se encuentra a pocos kilómetros de distancia.

Presence es un ministerio que promueve el culto y la oración en lugares públicos en los Países Bajos, y constantemente sale a las calles a proclamar la vida de Jesús y trasladarlo a quienes lo necesitan.

Imperdibles

hola
Enviar Whatsapp
error: Gracias por interesarte en las publicaciones de La Corriente, para su uso o difusión, por favor escribirnos a [email protected]