Facu Dening es un músico, compositor y productor argentino. Voz líder de la banda Corto Plazo, que hasta el momento cuenta con 5 discos de estudio y un sencillo. Han recorrido provincias y realizado giras internacionales. En 2011 fueron los ganadores del concurso de Quilmes Rock, y se convirtieron en una de las primeras bandas del pop punk cristiano.
Años después formaría, junto al productor Martín Ontiveros, un proyecto llamado Facu y Martín, con el cual lograron llegar a oídos de todo el mundo, realizando giras y conciertos, y lograron millones de reproducciones en las plataformas digitales. Hoy en día reside en la provincia de Córdoba y se encuentra preparando el lanzamiento de su próximo material solista. Con La Corriente tuvimos la posibilidad de conversar con él.
L.C: ¿Si pregunto cuál es tu primer recuerdo de Corto Plazo como banda, qué me respondes?
F: Inició oficialmente en 2008 pero el primer recuerdo que tengo de Corto como banda es el primer recital, que fue desastroso, que fue tocar para unos amigos en nuestra iglesia. Nosotros mismos lo realizamos y nos quedamos sin repertorio porque teníamos sólo 6 canciones y la gente decía “¡otra, otra, otra!” y repetimos canciones.
En ese entonces ya existía El Reino del Revés, era la que más pegaba y la hicimos de vuelta para cerrar. Entonces recuerdo como que es gracioso. De hecho, tocamos sin disco durante 4 años enteros, habíamos sacado un EP nada más, grabado por nosotros, de bajo presupuesto, y estuvo bueno porque con eso tocábamos, hasta que salió el disco en 2010.
L.C: ¿Cuál crees que fue el disparador que llevó a la banda a que la escuche más gente?
F: Yo creo que fue el segundo disco, “No me dejaste ahí”, el haberlo grabado, haber puesto todo ahí sobre la mesa, invertir en grabación de calidad, hacer preproducción, trabajar con productor por primera vez. Estuvimos haciendo el disco casi por 2 años entonces fue la primera vez que nos pusimos a trabajar en serio y creo que salió un re lindo material de calidad y para mí eso fue lo que hizo que la banda despegue un poco más.
Hubo crecimiento y también madurez, se puede decir que también alguna madurez espiritual, pasó de ser una banda de adolescentes a algo un poco más serio y desde ahí, el haberse abierto también a otros estilos. Más que nada somos una banda punk rock, pero el haber incluido otros estilos hizo que también llegue a otro público, entonces eso también ayuda a que se masifique un poco más.
L.C: ¿Tuviste ofertas de otras bandas u otros proyectos al comienzo?
F: Sí, estuve en otra banda antes de Corto Plazo. Salimos a tocar creo que dos veces, hacíamos nu metal y yo tocaba la batería. En realidad soy más baterista que cantante, y yo siempre que produzco, lo hago desde la batería primero. No me habrán visto nunca en la batería porque soy zurdo, y hay que dar vuelta todo y si me siento en una batería para diestros no lo disfruto, no me sale nada más que una base de Rolling Stones.
Así que con esa banda estuvimos tocando en el 2004, yo en ese momento estudiaba en el Instituto Canzion y esta banda se formó con alumnos de ahí. Estaba conformada por un chico peruano, un chico de Bahía Blanca y un chico mexicano. Era muy loco, tocábamos a veces covers de Vico C en versión más heavy.
L.C: ¿Corto Plazo es una banda que escuchás en la semana?
F: No, la escucho por ahí los primeros meses del lanzamiento, porque en realidad un disco cuando sale es nuevo para la gente, pero para uno, que lo trabajó, estás harto. Pero siempre considero que ese es mi estilo musical. O sea, si yo me tengo que definir por un estilo y me dicen “Facu, tenés que elegir un estilo que puedas escuchar de acá hasta que te mueras”, voy a elegir el punk californiano, pero tiene que ver -creo, también- con la escucha musical.
A veces también está acompañado de una madurez natural ¿no? de la vida, que por ahí uno se sienta a escuchar otro tipo de canciones. Como a mí me interesa mucho la composición, le doy mucha atención a la letra de la canción, más que a una melodía, entonces me siento a escuchar artistas que tienen algo para decir nuevo, diferente, o que dicen las cosas de una forma no convencional, que no estamos acostumbrados a escuchar y no necesariamente hablando de música cristiana, sino de música en general.
Hoy en día soy una persona que le da mucha más atención a lo poético, a ese tipo de lenguaje.
Facundo Dening
L.C: ¿Consideras a Corto Plazo un taller en donde el Facu de hoy se formó?
F: Definitivamente influyó, no sé si fue EL TALLER, pero sí fue parte de un taller y me dio muchas vivencias. Yo siempre digo que para mí lo más lindo que Dios me permitió vivir es que me regaló, a través de Corto, gente y amigos por todos lados.
Más allá de que viajé y conocí lugares que no hubiese conocido si no tuviese a la banda, lo que más rescato, lo que más valoro es eso. Hoy, por ejemplo, sé que si me pierdo en cualquier provincia y levanto el teléfono llamo a alguien y le digo “Che, venime a buscar”; tengo amigos por todos lados, fuera del país también y creo que eso es lo más lindo, pero sí, definitivamente incluye un montón de cosas en mi carácter y es que son casi 15 años en la música, entonces es como una vida de un adolescente. Y he aprendido muchas cosas, definitivamente.
L.C: Saliendo un poco de Corto Plazo ¿En qué momento específico nace Facu y Martín?
F: Nace en la grabación del disco de Corto “No me dejaste ahí” (segundo disco de la banda) grabando puntualmente la canción “Alma”, recuerdo que estábamos en un descanso mientras grabábamos, porque yo estaba medio roto ya de la voz, entonces nos sentamos, agarramos la guitarra y salió un tema de los viejitos de la iglesia y después salió y cada uno se iba superando cada vez más.
Nos planteamos «como que estos temas ya la gente no los canta tanto. Habría que hacer algo, habría que revivirlos, resucitarlos» y mirá, esto que te estoy hablando fue en 2013, y entonces decidimos hacer algo, pero después pasaron los años y recién en el 2017 salió, o sea, fíjate todo el tiempo que pasó, por cuestiones de tiempo, plata, los medios para hacerlo.
Tampoco fue la idea de un principio, ni nunca, armar una banda y salir a tocar o grabar y vender discos, no, siempre fue la motivación de resucitar esas canciones. Primero por gusto personal de los dos, y después, al pensar que quien tenga sus tiempos devocionales o de oración pueda acompañarlos con esas canciones. De todas formas, salimos dos veces afuera con Facu y Martín, a México y Estados Unidos.
L.C.: Facu y Martín es una faceta tuya muy distinta a la que veníamos viendo con Corto Plazo, ¿crees que si no se fundaba el proyecto con Martín no hubiésemos conocido esa faceta tuya?
F: Siempre tuve esa faceta, lo que pasa es que la conocían los más cercanos, no el público que escucha a Corto Plazo, pero el que me conoce personalmente, ya sean mis amigos, mi familia, la gente de mi iglesia, lo sabe; yo toda la vida, casi desde que soy músico, estaba dirigiendo la alabanza en la iglesia y los momentos de adoración eran los que más disfrutaba.
Los más cercanos a mí no se sorprendieron de esta faceta mía porque la veían los domingos en la iglesia o acá en mi casa. Lo que pasa es que yo crecí en una familia donde mi padre era líder de alabanza y siempre había música en mi casa. Si yo no estaba en la iglesia, estaba en casa y con mi padre con la guitarra practicando, o escuchando cassettes de Marcos Witt, Juan Carlos Alvarado, Danilo Montero, etc.
L.C.: ¿Si la música no hubiese entrado a tu vida, a qué te hubieses dedicado?
F: Creo que al diseño, cosas referidas al diseño gráfico, visual, todo eso me gusta, de hecho, estudié diseño gráfico y creo que iría por ese lado. Dos materias me quedaron, pero después me agarró la locura y no me veía toda la vida sentado en una computadora, diseñando.
Tengo las herramientas, los conocimientos y cuando hay que hacer algo lo hago, pero después me dije «voy a vivir de la música, no quiero diseñar, no quiero sentarme en una computadora toda mi vida”, así que elegí la música.
L.C.: Me imagino igualmente que deben tener canciones guardadas que nunca salieron
F: Sí, obviamente, hay tres canciones que están guardadas y no las sacamos. Hay que producirlas bien, pero ya está la idea. El tema a veces son los recursos más que nada, el tiempo, pero sacar un tema de Facu y Martín es grabarlo y sacar un video que no puede bajar la calidad.
Si querés hacer algo de calidad muchas veces por ahí te frena, pasa que es todo muy caro. El billete nuestro vale cada vez menos, y hay gente que tiene su home studio y eso facilita un montón porque hoy en día se pueden hacer cosas de calidad poniendo esmero y corazón.
L.C.: Contame un poco de qué es lo que estás haciendo ahora, qué vienes preparando, estuviste anunciando en las redes que vas a sacar un nuevo material. ¿Es algo tuyo como solista?
F: Sí, es mío solista, porque el 20 de julio es el día del amigo y la idea es sacarlo para el 16. El objetivo es que la canción esté girando tiempo antes y el día del amigo la gente la utilice para dedicar a sus amigos, porque es una canción que habla sobre la amistad.
Está pensado estratégicamente y tema de la fecha de lanzamiento para que salga en todas las plataformas digitales. Hay un video también en el que hay muchas personas que participan, yo los llamé y escribí a un montón de gente, que me manden un videíto y las fotos que voy subiendo son de la gente que se prendió.
L.C.: ¿Con corto están preparando algo?
F: Con Corto hay una canción que estamos grabando, ayer metimos guitarras pero la banda está por ahora tranquila, hay gente que nos escribe para tocar este año y estamos rechazando todo, no queremos tocar este año porque por el tema del Covid podría suspenderse y después pasan cosas, entonces preferimos, hasta que no estén todos vacunados y que esté todo un poco más tranquilo, no nos comprometemos por lo menos hasta el año que viene, así aprovechamos y grabamos.
Ahora hicimos una canción nueva que va a salir, calculamos que en agosto, y veremos qué pasa también, porque estoy viviendo en Córdoba y con el tema de la distancia mucho no se puede hacer; yo grabé voces desde allá y estuvimos trabajando en la distancia un par de meses y se pudo, pero no es lo mismo que estar ahí en el estudio y trabajando juntos.