La nadadora cristiana, Jessica Long, fue reconocida en el Super Bowl por su inspiradora vida, quien ya ganó veintitrés medallas en los Juegos Paralímpicos.
La empresa Toyota estrenó durante el evento el resumen de la vida de Long, una deportista con veintiocho años que cuando era chica fue adoptada por una familia en Rusia y que, a partir de una enfermedad, tuvieron que amputarle ambas piernas debajo de la rodilla. De todas formas, desde los diez años entrena profesionalmente en natación.
Una atleta que compite en Estados Unidos y ya ganó a lo largo de su carrera más de 46 medallas en campeonatos mundiales, obtuvo catorce récords mundiales en velocidad y fue galardonada con el premio ESPY, uno de los reconocimientos que también se les otorgó a Michael Jordán y Lionel Messi. Varios resultados en su vida en los que ella a través de sus redes sociales fundamenta la compañía de Dios en su camino.
Jessica Long, es parte del grupo Fight for the fatherlees, una asociación de atletas cristianos que tiene como objetivo ser de contención hacia niños sin padres y/o quienes tengan una discapacidad.
«pasé por cada momento desafiante de mi vida debido a la determinación que Dios me dio».
Jessica Long, deportista estadounidense en los Juegos Paralímpicos.
La atleta contó que ella fue adoptada cuando tenía un año y su pasión en el agua comenzó a los tres cuando sus abuelos adoptivos le enseñaron a nadar sin sus dos piernas por lo que en el 2004 la inscribieron para entrenar profesionalmente. A pesar de tener una prótesis para sus piernas, ella siempre nado sin ellas, aclaró en sus redes sociales que nunca la discriminaron en el ámbito, al contrario, la impulsaron a más y eso fue lo que la motivo siempre a continuar.
Jessica Long actualmente se prepara para los Juegos Olímpicos de Tokio 2021 que se realizarán este 8 de agosto. La nadadora cristiana explicó en su Instagram que a partir de este último reconocimiento en Super Bowl espera que su historia sea de inspiración para las personas en el mundo ya que aclaró “cuando comencé este deporte sólo fue porque realmente amaba el agua. Gracias a mis padres por adoptarme y darme la mejor vida «.