«Los contadores escriben la historia que otros construyen, los hombres de negocios crean su propia historia, tú ¿qué quieres hacer?». Esta fue la pregunta que cambió mi perspectiva respecto a mi futuro laboral. ¿Cómo fue el comienzo? Y, como todos, pequeño. ¡Te lo cuento!
Soy contador público nacional y en mi desarrollo como profesional asesoré empresas durante diecinueve años, como auditor y consultor impositivo. Conduje un estudio contable en el que trabajaban varios colaboradores y con el cual logré afianzarme económicamente. Me sentía feliz y realizado al desarrollar la profesión que tanto me agradaba, mientras simultáneamente servía como pastor en una iglesia cristiana.
En ese tiempo, un cuñado mío me propuso que iniciáramos un emprendimiento juntos que consistía en la venta de instrumentos musicales. La idea era que yo aportara el capital y él su tiempo y conocimiento del rubro. Comenzamos con mucho entusiasmo en un pequeño local de barrio. Éramos cuatro los trabajadores: él con su esposa, mi esposa y yo.
Pasados unos años, mi cuñado decidió independizarse y en ese momento entré en una gran crisis. Por un lado tenía mi profesión, que amaba y para lo cual me había preparado toda la vida, y por otro estaba lo nuevo, lo desconocido. Hay un dicho que afirma: «En tiempo de crisis, algunos lloran mientras otros salen a vender pañuelos». Esto significa que hay quienes se dejan abatir por sus penurias mientras que otros ven una oportunidad en medio de la dificultad.
Durante un almuerzo con un empresario en otro país, le compartí mi incertidumbre sobre las decisiones que debía tomar y me dijo algo que marcó mi futuro: «Los contadores escriben la historia que otros construyen, los hombres de negocios crean su propia historia, tú ¿qué quieres hacer?«. Este encuentro fue determinante para que transfiriera el estudio y me abocara de lleno a la actividad comercial.
El comienzo fue muy pequeño, como todos. Y al hablar sobre comienzos, la pregunta más frecuente que se plantea es: «¿Cuál es el monto mínimo para emprender un negocio?». No hay una respuesta para esta inquietud. Puedes empezar con 500 US$ o con 5000 US$ incluso con 50 000 US$.
Lo relevante es que tengas una buena idea, que hayas desarrollado un plan y que te propongas perseverar hasta alcanzar tus sueños.
Rafael Pedace, CEO & Fundador de Todo Música S.A., Integrante de comunidad PEC.
Otro comienzo pequeño
En los años cincuenta, Bette Nesmith trabajaba como secretaria en Dallas mientras criaba sola a su hijo Michael, quien luego se haría famoso con su grupo musical The Monkees. No era muy eficiente en su tarea porque no era hábil en el uso de las antiguas máquinas de escribir. En aquella época, un error de tipeo significaba volver a escribir toda la hoja. Con frecuencia, debía rehacer los escritos por causa de las equivocaciones cometidas.
Su experiencia como estudiante de arte y dibujo artístico, la llevó a idear una mezcla de pinturas que tapaba los errores de tipeo, secaba rápido y luego le permitía escribir sobre el error. Preparó un frasco y lo llevó a su oficina. Cuando cometía una equivocación, aplicaba la pintura con un pequeño pincel y volvía a escribir en el mismo lugar.
Tuvo tanto éxito que sus compañeros le pidieron que pudiera traerles ese producto también a ellos. En 1956 convirtió su oficina en un laboratorio en el que fabricaba este líquido mágico que vendía a sus compañeros. En 1967 creó su propia empresa. En 1976 vendió 25 millones de frascos. Creó dos fundaciones para ayudar a las mujeres a encontrar nuevas formas de ganarse la vida.
Bette falleció en 1980, seis meses después de vender su empresa, Liquid Paper, en 47 millones de dólares. Ella, como tantos otros, logró comenzar desde lo pequeño.
Para quienes seguimos a Dios, sabemos que «El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto» (Lucas 16:10). Dios nos confiará pequeñas herramientas al inicio para probar nuestra fidelidad y aptitud. Lo sé porque a mí me tocó vivirlo y doy fe de que Dios es fiel. Él afirma nuestros pasos uno a la vez.
El paso más importante, por pequeño que parezca, ¡es el primero!
Rafael Pedace, CEO & Fundador de Todo Música S.A., Integrante de comunidad PEC.
Cosas más grandes vendrán luego de haber superado la etapa inicial en la que demostraremos calificar como buenos administradores.
Rafael Pedace
CEO & Fundador de Todo Música S.A., Integrante de comunidad PEC.