Porque nos fue dada “gracia sobre gracia”. Esto representa un continuo fluir, sin límite, de la gracia de Dios representada en Jesús, que está disponible constantemente para nuestra vida.
Cuando éramos niños las historias de personajes raros y exóticos nos llenaban de ilusión, luego salíamos al jardín o a la calle para jugar a ser uno de ellos.
La palabra “verdad” en el siglo XXI tiene una connotación que dista de su real significado y está sometida a los criterios individuales de cada persona.