El director de la organización habló en exclusiva con este medio y nos detalló por qué le escribieron una carta abierta al presidente argentino.
Días atrás, los directivos de la confederación redactaron una carta abierta al jefe de Estado para declarar abiertamente su respaldo al Decreto PEN N° 55/2024, publicado en el boletín oficial semanas atrás.
Este suceso tomó relevancia en el pueblo cristiano, por lo que este medio se puso en contacto con Daniel Cabañas, quién es director ejecutivo de la confederación Bautista de Argentina y pudo ampliarnos un poco más los motivos de este apoyo a lo establecido por Javier Milei.
El pastor y presbítero afirmó “entiendo que todos los gobiernos poseen instrumentos para dirigir el país y es saludable cuando estos instrumentos se ajustan a valores que conocemos, vivimos y promovemos como la vida, la libertad y la propiedad privada. Valores que han sido cimiento de los mismos orígenes e inicios de nuestro país”.
Parte de la carta reza “apreciamos los esfuerzos de su gobierno para enfrentar la Agenda 2030, que consideramos contraria a nuestros valores cristianos” por eso le preguntamos al ministro Cabañas ¿cuales son los riesgos que enfrentan los cristianos ante esta agenda globalista que propuso la ONU? “Más allá de las posiciones ideológicas, la Agenda 2030 plantea la organización del mundo bajo objetivos globales. En apariencia, estos objetivos son benéficos para todos, sin embargo ocultan valores de dominio y control sobre los países del mundo, que son contrarios a la esencia misma del Evangelio”, expresó Daniel Cabañas.
También fue contundente al explicar los peligros existentes a la hora de manifestar nuestra fe de manera pública: “en cuanto a los riesgos, en el mundo más cristianos mueren hoy por su fe en Cristo que en todos los anteriores siglos. Así es que lo esperable por profesar valores diferentes a los que se consoliden globalmente, puede ser la persecución. Hay algunos antecedentes en América Latina, pero no representan la magnitud que hay en otros países”, argumentó.
En ese sentido, la iglesia argentina tiene un desafío y es, sin dejar de amar al prójimo, presentar la batalla cultural de manera firme y coherente a nuestros valores como cristianos.
Con la sabiduría que lo caracteriza después de 30 años de ministerio ininterrumpido, el director ejecutivo de la confederación Bautista nos desafía como generación de cristianos a reflexionar que “la batalla cultural es una expresión para graficar cómo se han cambiado los fundamentos que fueron base de la construcción de las sociedades occidentales. El libro de Vishal Mangalwadi es un testimonio de que mucho, por no decir la mayoría de los derechos y las libertades de occidente, son fruto de la predicación del Evangelio”.
Daniel Cabañas concluye con esta máxima “dar la batalla cultural es la lucha por instalar aquellos valores que están en la mente y el corazón colectivo de los argentinos: ser solidario, honesto, persistente, empático, trabajador, familiero, emprendedor y tantos otros que le han dado a nuestra cultura una marca única”.
CARTA ABIERTA DE LA CONFEDERACIÓN BAUTISTA ARGENTINA AL PRESIDENTE JAVIER MILEI:
Les comparto una carta abierta que hemos dirigido al “Honorable Señor Presidente de la Nación Argentina”, Javier Gerardo Milei en relación al Decreto PEN N° 55/2024 (*).
La firmamos, en nombre de la Confederación de iglesias bautistas de Argentina, Daniel Cabañas como director ejecutivo, y un servidor como presidente.
De nuestra mayor consideración: Es un honor dirigirnos al Señor presidente de la Nación Argentina en nombre y representación de la Confederación de Iglesias Bautistas, institución evangélica presente en el país desde 1818, con más de 1200 iglesias en todo nuestro territorio, para expresarle nuestro sincero deseo y oración a Dios para que las más ricas bendiciones del Altísimo y las “Fuerzas del cielo” sean sobre su vida y su función.
Nos mueve en esta oportunidad escribirle para expresarle formalmente en nombre de nuestra institución, CONFEBA, nuestro sumo beneplácito por el dictado del Decreto PEN N° 55/2024 (*), el cual reza en su artículo primero: “Declárase el año 2024 como el ‘Año de la Defensa de la Vida, la Libertad y la Propiedad”.
Es con entusiasmo que apreciamos los esfuerzos de su gobierno para enfrentar la Agenda 2030 que consideramos contraria a nuestros valores cristianos y celebramos los pasos que se están dando para volver a colocar a nuestro país en el concierto de las naciones occidentales.
Renovamos nuestro compromiso y energía para llevar adelante el tan necesario cambio cultural y moral que le permita a la República Argentina regresar a los valores de su origen y dar pasos ciertos hacia el desarrollo integral de todos nuestros conciudadanos.
Creemos que es un tiempo de dar una “dura batalla cultural” la cual estamos dispuestos a respaldar, por lo cual nos ponemos a su entera disposición para colaborar en difundir y propiciar las políticas de la libertad en defensa de la vida, la familia, la propiedad y por supuesto la libertad de culto.
Sin otro particular le saludamos con nuestra más distinguida consideración.
Decreto:
El gobierno de Javier Milei declaró al 2024 como el año de la “defensa de la vida, la libertad y la propiedad”. Así lo estableció mediante el Decreto 55/2024 publicado en el Boletín Oficial en la madrugada del lunes.
En el DNU establece que toda la documentación oficial deberá incluir la mencionada frase que hace referencia a los ideales libertarios difundidos por el Presidente.
«Dispónese que durante el año 2024 toda la documentación oficial de la ADMINISTRACIÓN PÚBLICA NACIONAL, centralizada y descentralizada, así como de los Entes autárquicos dependientes de esta deberá llevar la leyenda ‘AÑO DE LA DEFENSA DE LA VIDA, LA LIBERTAD Y LA PROPIEDAD’”, dice el DNU firmado por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse.
Además, se destaca en el artículo tercero que se habilita al Poder Ejecutivo a realizar “las acciones pertinentes tendientes a destacar, difundir y concientizar acerca de los valores de la vida, la libertad y la propiedad”.
Por último, en el cuarto apartado se invita a los gobiernos provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adherir a la norma.