No es necesario tener miles de seguidores para ser criticado públicamente en redes sociales. Con tan solo poseer una cuenta y expresar una idea, ya quedamos expuestos al juicio de las personas, incluso de aquellas con ideas opuestas. El desafío está en saber responder sabiamente, como lo haría Jesús.
A lo largo de mi recorrido por Tiktok y en otras plataformas he recibido críticas, tanto públicamente (comentarios) como de forma privada (mensajes), algunas muy hirientes y otras muy agresivas; y reconozco que a veces pueden causarnos mucha aflicción.
Al principio sentía vergüenza de encontrarme a alguno de ellos personalmente, luego enojo, me irritaba el hecho de no entender la necesidad que tienen ciertas personas de criticarlo todo, también podía aparecer el desánimo y la frustración, “¿para qué seguir?”, “no vale la pena”. Esto ocurre cuando permitimos entrar a nuestra cabeza la idea de que nuestro valor está en lo que la gente dice u opina de nosotros.
Veamos qué dice Jesús acerca de la crítica
“Dios los bendecirá a ustedes cuando la gente los odie o los insulte, o cuando sean rechazados y nadie quiera convivir con ustedes. La gente los tratará así solo porque me obedecen a mí, el Hijo del hombre. Siéntanse felices, salten de alegría, porque Dios ya les tiene preparado un premio muy grande. Hace mucho tiempo, su propia gente también trató muy mal a los profetas”. Lucas 6:22-23
Podemos notar que la crítica que recibimos por ser cristianos no era nada nuevo para Jesús; es más, él fue el primero en recibirlas. Al contrario de llevarnos al desánimo, nos motiva a alegrarnos, pues sabemos que vamos en buena dirección. Debemos entender que el sistema actual jamás apoyará nuestras convicciones porque el mundo en el que vivimos rechaza a Dios una y otra vez.
“Si buscas hacer la voluntad de Dios en tu vida, no busques la aprobación de las personas; no encontrarás ambas cosas”.
Camila Maza
Lo importante es comprender que el propósito que Dios tiene para cada uno de nosotros es todo un desafío. No será algo fácil ni cómodo, y en el proceso atravesaremos varias pruebas y obstáculos; uno de ellos, casi indispensable para todos, será la crítica.
No obstante, “no temas” dice la Biblia pues no es algo que haremos solos. Dios nos ha dado un propósito y no solo por nuestras capacidades sino por su gran poder y amor. Dios es quien te preparará y capacitará para llegar al plan que tiene para tu vida, solo necesita ver un corazón enseñable y dispuesto de tu parte. No será sencillo, será posible y tendrá una gran recompensa.
¿Cómo lidiar con la crítica?
Se trata de saber desviar nuestros sentimientos, para ponernos en el lugar de la persona que está comentando. ¿Realmente es una crítica contra mí? ¿O es una crítica contra Dios? Que antes de responder un comentario/mensaje negativo nos preguntemos ¿Qué diría Jesús? Orar antes de hacerlo (Mateo 10:19-20).
Además, no se trata solo de aprender a lidiar con la crítica sino también aprender a evitarla cuando sea posible. Estamos llamados a ser agentes de paz. Es cierto que siempre tendremos un mínimo de críticas, pero nuestra meta debe ser compartir del Evangelio con amor y paciencia, no para despertar aún más la furia de quienes no creen.
Por último, mi mayor consejo es no olvidar por qué y por quién hacemos lo que hacemos; no para entretener, no para ganar fama; sino para realmente tocar corazones y ser agentes de cambio en nuestra generación.
Oración:
Dios, te doy gracias por pensar en mí y darme un propósito único. Enséñame a caminar en él combatiendo cada obstáculo. Ayúdame a lidiar con las críticas y a responder sabiamente. Quiero conocer mi valor real.
Amén