Mission Cry, una organización cristiana internacional, envió a Hong Kong un contenedor la Palabra de Dios.
Las donaciones fueron realizadas en conjunto con Marr Community Bible Church y Christian Celebration Center, ambas iglesias norteamericanas, y se incluyeron obras con predicas y biblias del Nuevo Testamento de la Biblia Estándar Americana, con programas de discipulado adjuntos.
El envío es considerado como un logro, ya que en el país asiático atraviesa una fuerte persecución religiosa a las congregaciones cristianas. Sobre esto mismo, Woolford declaró, al medio Christian Post, que “el gobierno de China se resiste al cristianismo porque sabe que la Palabra de Dios trae una revolución cultural, moral y espiritual”.
El contenedor fue enviado a comienzos de diciembre y actualmente se encuentra en Hong Kong, bajo la coordinación de iglesias cristianas de China para que puedan distribuirlas a las ciudades del alrededor. Desde 1956, Mission Cry llevó la Palabra a más de ciento setenta y ocho naciones.