Gotas es una Asociación Civil que contribuye a ayudar a quienes se empeñan en hacer llegar a niños y niñas carenciados los recursos para que tengan las mismas posibilidades que otros niños llegando a asistir a distintas comunidades de Argentina como los pueblos wichi y guaraní. Ellos llevan tanto alimentos, ropa, y medicamentos como también el mensaje de Dios.
Esta organización comunitaria nace del corazón de Alfredo Baldo Castiglione, un pastor que pertenece a la Unión de las Asambleas de Dios. Desde hace muchos años él y su esposa trabajan con niños, ya que acumuló experiencia como pastor de niños y adolescentes en el centro familiar cristiano y también como pastor del colegio de jardín y de primaria, donde estuvieron colaborando con los padres y conociendo las necesidades de las familias.
“A partir de ese momento, una carga de preocupación por la niñez comenzó a tocar todas las áreas de mi vida y me hizo pensar en cómo ayudarlos en lo espiritual, en lo educativo y también en lo material”, relata Castiglione.
Ellos viajaron a Italia en 1999 como misioneros, y allí Alfredo comenzó a formar parte como vicepresidente de la fundación Gocce d’Amore (Gotas de amor) donde pudieron durante esos años recolectar y juntar dinero para construir un hogar de niños en Apóstoles, provincia de Misiones, y otro hogar de niños en Castelli, Chaco, además de comenzar también un hogar de niños muy importante en Burkina Faso. Pero no fue hasta el año 2009 que él y su esposa volvieron a la Argentina y continuaron con una actividad fuerte en lo social y en lo ministerial a favor de la niñez.
Con la creación de la asociación civil Gotas, la compra de un edificio como base de la asociación, y la creación de un programa radial empezaron a presentar esta obra misionera y a juntar recursos para brindar a los niños alimentos, ropa, juguetes y medicamentos, que no ha parado de crecer hasta el día de hoy. Ellos asisten y llevan la Palabra de Dios a la comunidad wichi y guaraní, junto a la familia del pastor Daniel López, quienes llevan más de 30 años ayudando a estos pueblos.
“La familia López va y no sólo predica el Evangelio, sino que también llevan alimentos para combatir la desnutrición y la malnutrición. Educan también a través de diferentes maneras; gracias a Dios hoy los colegios están llegando en las zonas rurales, pero con los oficios, así que han desarrollado la apicultura, la agricultura, la ganadería, estaban empezando talleres de cocina, de carpintería y querían comenzar de herrería”, comenta el pastor Alfredo.
El objetivo es poder ayudarlos a tener una mejor vida logrando alcanzar servicios básicos como agua y luz y mejorando sus viviendas. Alfredo comenta que hace dos años entregaron una donación importante de inodoros y mochilas, para construir baños en una de las comunidades, con materiales tradicionales como barro y caña, «por primera vez ellos pudieron usar un baño».
El pastor Daniel López, en una reciente entrevista en la radio FM 88.3 Cristiana, expresó la necesidad de conseguir material para un nuevo taller de oficios y al poco tiempo se consiguieron dos máquinas soldadoras que ya fueron enviadas a Misiones.
Alfredo Castiglione expresó la importancia de asistir a las personas de esa comunidad “la necesidad que tienen es de todo tipo, por lo aislados que están de la civilización, lo abandonados también que están de parte de el Estado y de parte de la iglesia evangélica, sin una misión, una visión misionera ya que ellos tienen otra cultura, otro idioma, costumbres”.
“No es simplemente ir y predicarles y pretender que vengan a nuestras iglesias porque ellos mantienen sus idiomas, sus culturas, sus tradiciones”.
Comenta el pastor Castiglione
Este es un trabajo de amor en el cual no muchos se ocupan. Por ejemplo, las comunidades guaraníes son tradicionalmente nómades y por eso es casi imposible saber dónde están, si es que no se asientan por varios años.
Esta asociación cuenta con la generosidad de la gente, “la realidad es que muchas iglesias y muchos pastores o no ven la necesidad, o no se creen capaces de que pueden, pero la misma gente de sus iglesias me llama y me empieza a acercar ropa, alimentos juguetes, medicamentos, muebles, herramientas y aun dinero para estos nuevos proyectos”.
«Nosotros solicitamos siempre la ayuda, no emocional sino la ayuda responsable, porque estas familias necesitan ayuda todos los días, hasta poder superar la desnutrición y malnutrición, de llegarles a alcanzar el agua potable, la luz, un mejor techo. Todo esto sucede en nuestro país, en nuestra Argentina, son criaturas de Dios y muchos se convirtieron en Hijos de Dios», relata Alfredo.
Las comunidades con las que ellos trabajan son ambientes en donde la niñez es un tema importante a tratar ya que acumulan años de malnutrición, y eso afecta las capacidades cognitivas y su estado físico “los chicos cuando crecen, a los 10, 11 años ya no pueden seguir en el colegio porque no les da el cerebro para seguir avanzando y muchas veces no les da el cuerpo para ciertos trabajos, por su debilidad, su fragilidad”.
Es por ello que buscan brindarles a los niños una buena nutrición ya desde el vientre de la madre. También Gotas busca ofrecer educación para la formación intelectual y práctica de los niños.
“Les estamos enseñando albañilería y estamos en un proyecto de construir un local, un edificio, para hacerlo funcional y eso a ellos les sirve también para ir al pueblo, o la ciudad y ofrecer su oficio y sus capacidades, ya que antes ellos vivían de la caza, de la pesca, de lo que crecía, pero la civilización ya no les permite vivir de esa manera”, añade.
“En un país tan rico y ante la desigualdad de oportunidades las criaturas no tienen la culpa de haber nacido en comunidades con escaso acceso a las facilidades de la ciudad, es una situación en la que Dios quiere que hagamos justicia, por eso tratamos de alcanzarles alimentos, ropa y todos los recursos necesarios para que estos misioneros puedan lograr cambiar y mejorar la vida de estas personas», dijo Alfredo.
El próximo paso de Gotas es construir una base donde puedan venir familias, jóvenes misioneros, equipos de misión, y puedan quedarse desde una semana, unos meses o quizás hasta unos años y desde allí poder trabajar con diferentes comunidades.
“El Evangelio llega para no solamente salvar las almas sino también educar, formar y transformar”.
Expresa el director de Gotas.
Para ayudar y contribuir cualquier persona puede hacerlo de muchas maneras con esta asociación. Por ejemplo, con la donación de ropa en buen estado, principalmente de verano, ya que esa estación es muy larga allá, También es propicia la donación de útiles escolares, guardapolvos y material escolar.
Los que quieran pueden ayudar con dinero, ya que ellos lo necesitan para la logística, y para enviar las donaciones allá. Gotas también busca voluntarios que quieran ayudar recolectando las donaciones, embalando, para embolsar, para seleccionar y también para enviar a los expresos que están en capital y de allí que sean mandados a las zonas de las comunidades guaraníes. Para comunicarse con Gotas pueden hacerlo a través de WhatsApp al número 1168269229