Desde junio de este año, un grupo de jóvenes de la iglesia Catedral de la Fe empezaron con el proyecto de alcanzar el barrio de Constitución para Jesús, primeramente oraron por los enfermos y predicando el evangelio de Jesucristo. Pero también dando más de 120 almuerzos cada sábado en la plaza Garay. «Encontramos gente alcoholizada, drogada, y en algunos casos personas que venían pensando en suicidarse, quienes se acercaban para compartir un almuerzo y un mensaje de salvación» nos contó Thomas Gonzalez, líder del grupo evangelizador.
Para la gloria de Dios, muchos de ellos, luego de recibir a Jesús en sus vidas, hoy vienen habiendo dejado ya sus vicios, y otros que siguen en proceso pero que reconocen además de su necesidad física, su necesidad espiritual por Jesús.
Dios se está moviendo con poder en plaza Garay, decenas de personas fueron sanadas de enfermedades y dolores físicos y también en el alma. Travestis y prostitutas vienen a escuchar la Palabra y recibir oración, pidiendo ayuda para salir de la situación en la que están. Thomas confiesa con gran entusiamos «Creemos en que un avivamiento está llegando a Constitución, y que dentro de muy poco tiempo, este barrio será transformado por el Evangelio».
Los jóvenes oran por la gente del lugar. Muchos ya no le encuentran sentido a la vida y se ven en lo más profundo de un pozo oscuro donde ya la salida no está a su alcance. Pero como sabemos lo que estamos en Cristo que ¡Más en Jesús si la hay!
Esta semana se encuentran de campaña, y ya están habiendo sanidades, liberaciones y salvaciones. Tan solo en el primer día y ya 38 personas hicieron la oración de fe y se unieron a nuestra familia.
El líder del grupo nos cuenta que «Lo más hermoso de todo es que, por consecuencia de este trabajo que se hace semana tras semana a lo largo de los últimos 6 meses, se está formando una iglesia, ya que hoy en día son más de 40 personas que luego del almuerzo se quedan para tener un culto, orando a Dios y adorando juntos. ¡Vamos por más!»
Acá te contamos algunos testimonios:
- Un hombre llegó hace unos meses atrás a una de nuestras reuniones en la plaza consumiendo drogas, recibió a Cristo y tan grande fue la convicción de su corazón, que al terminar se acerca y nos entrega la bolsa con la droga adentro. Hoy este hombre es parte de esta iglesia en formación.
- Una persona mayor, que hace más de un año que no podía caminar, recibió el toque sanador de Jesús y se levantó y empezó a caminar en ese mismo momento.
- Un hombre caminaba rengo a causa de un accidente que había tenido en su pierna. Mientras orábamos por sanidad, sintió que algo había pasado en su cuerpo y el dolor se había ido. Terminó entregándonos el bastón que usaba, ya que el Señor lo había sanado.
- Una mujer había llegado rengueando ya que su rodilla le estaba produciendo mucho dolor, pero recibió completa sanidad y todo dolor se le fue en el momento. Mientras contaba el testimonio, se dio cuenta de que su hombro, que también por mucho tiempo le dolía, había sido completamente sano.