Ante la intención de la operadora de televisión por remover de su programación a la señal satelital de contenido cristiano, los televidentes reclaman su permanencia en la empresa.
El reconocido canal cristiano fundado en 1992 se encuentra hoy ante el rechazo por parte de la compañía internacional DirecTV, que fue comprada el año pasado por un grupo argentino y actualmente la integran nuevos dueños que manejan ahora la totalidad de la operación de Latinoamérica .
La operadora tomó la decisión de dejar afuera de esta distribuidora a la señal Canal LUZ, a pesar de los esfuerzos por explicarle la masividad del segmento evangélico, la multinacional decidió que no valía la pena seguir con la programación.
Cristian Scott, Ejecutivo de medios, responsable a nivel global de la planificación y expansión de mercado para la señal televisiva Canal LUZ, compartió a nuestro medio acerca de esta situación.
“Lo que ocurrió, tiene que ver con una idea de optimizar sus ganancias y recursos. Pero lo que les manifestamos a ellos a diario es que están desconsiderando un segmento importante de la sociedad que son los cristianos evangélicos, que viven la fe con una intensidad diferente a la de la gran mayoría. Para mucha gente esto significa un golpe muy fuerte” dijo Scott.
El ejecutivo relató que ante este acontecimiento llegaron incontables llamadas a los call center de Directv, de televidentes rogando que no saquen al canal de la programación. Además, registraron personas llorando desgarradoramente pidiendo que no quiten la señal cristiana.
Pero eso no es todo, sinó que los mismos consumidores del canal realizaron una petición de firmas para entregar a la distribuidora satelital, acto que pone en evidencia el deseo de los consumidores de seguir disfrutando de una programación sana que transmite el mensaje mas importante de todos, el de Jesús.
“No lo motivamos nosotros, sino que surgió de parte de la gente. De hecho, yo particularmente no estaba enterado de esto y esto muestra que lógicamente la gente quiere defender al canal y hacen todo su esfuerzo para lograrlo”, compartió Scott “la gente se siente propietaria del canal”, agregó el ejecutivo de la señal que nació de una iglesia organizada sin fines de lucro.
“Es difícil para nosotros explicarle a la gente de DirecTV que que no tenemos nada que ver con la reacción de la gente y que es una una reacción espontánea y genuina del público que quiere tener el Canal Luz en su programación. Nosotros hemos construido durante más de 20 años una relación de cercanía con la gente y la gente asume el Canal Luz como si fuera propio”, relata Scott.
Si bien años atrás ocurrió una situación similar con una empresa de televisión de Rosario, Santa Fe, donde los televidentes reclamaron y metieron presión para que el Canal Luz sea emitido. Cristian asegura que sin lugar a dudas los dueños de Directv ven a la señal evangélica como una empresa porque están habituados a tratar con compañías y negocios, por eso es más difícil explicarles que esta señal es un ministerio que no tiene su mirada en lo económico ni en el rating.
“Canal luz es una señal casi de bien público para la gente. Me parece que hoy lo que aporta a la grilla de TV es una cuota de mesura, de tranquilidad, de un mensaje de esperanza para la gente. La personas encuentran en la pantalla del canal algo diferente, porque no hay malas palabras, no hay desnudos, no hay picardía, no hay cuestiones comerciales y no hay cuestiones políticas” Explica Cristian Scott.
“Lamentamos que en este momento directivo no lo estén considerando, no solamente para la gente que tuvo un beneficio y un punto de contacto con la fe, sino que también nos han visto crecer profesionalmente”, dijo Cristan,“Creemos que hay una muy mala decisión que se está tomando y que es contraria a la intención del evangelio y que directamente afecta la divulgación del evangelio”, agregó el ejecutivo
A pesar de esta situación, los directivos del canal cristiano ven con ojos espirituales este momento que atraviesan. “Aunque lamentamos que ahora esta señal esté en riesgo, Dios abrió esta puerta en el pasado y abrirá todas las otras puertas que tenga que abrir”, concluyó Scott.
Como medio animamos a aquellos que quieran seguir disfrutando del contenido del canal evangélico a sumarse con su firma, para visibilizar a la empresa distribuidora la necesidad que hay de oír y ver el mensaje puro y sano del evangelio, un mensaje que no tiene competencia con nada ni con nadie. Si querés formar parte de la petición ingresá aquí.