El cantante argentino Ezequiel Álamo, conocido como Zeki Álamo, desde chico predica de Cristo, junto a sus hermanos y sus padres pastores. En su adolescencia comenzó su ministerio como pastor y adorador profético y, gracias a Dios, en varias oportunidades realizó viajes a los Estados Unidos, México, Honduras, Guatemala, Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia, Chile, Uruguay, Paraguay y España, entre otros países, provocando un despertar en cada ciudad y trayendo una transformación.

Zeki, junto a Fabián Liendo, en esta entrevista hablan de cómo es el mover del Espíritu Santo en este tiempo, luego de la pandemia, qué es la adoración en Cristo y cómo se puede reflejar a Jesús en la música. Mirá la entrevista completa.

Fabián Liendo: Sabés que una manera en que la gente puede percibir a Dios es a través de sus obras, aunque en los postreros tiempos Dios nos hablaba por el hijo, la manera de dar a conocer a Cristo es que ellos lo reconozcan en nosotros y la manera en que nos expresamos en el mundo es mostrar lo que Él es y hace a través de nosotros, y en este tiempo hiciste nueva música, contanos acerca del último single Alfa y omega, porque el corazón es la manera en que nos da un lenguaje, que es comunicado en la poesía y la canción.

Zeki Álamo: Alfa y omega tiene que ver con el tiempo que estamos viviendo, sabemos que todos estamos en lo mismo, no podemos decir «el mundo se la agarró con nosotros», porque todos están saliendo de una crisis que es conocida mundialmente, y a todos les alcanzó. La canción llega en un momento en el que decimos que está todo perdido, todo mal, pero hay que tener esperanza, sobre todo la canción hace una invitación a adorar a Dios, que es como decir Dios sin decir Dios.

En Apocalipsis habla de eso, quién es Él, yo soy el alfa y el omega, el principio y el fin, el que es, el que era y el que ha de venir. Es el estar enfocados en alabar y adorar a Dios. Con este ritmo alegre y sabiendo que Dios no se rige por la crisis, sino que tiene un plan. Él sigue con su plan a pesar de lo que vivimos, pero a la vez es bueno el lenguaje de esperanza frente a todo lo que está sucediendo.

Demos el paso, hagamos como Pablo y Silas que dan ese paso diciendo «en algo tenemos que creer y aferrarnos, no está todo perdido», pero aún en ese no está todo perdido lo tenemos a Dios, que nos va a ayudar a salir de situaciones o cosas que a veces son imposibles de resolver, pero estamos confiando.

Entonces es una invitación a alabar y exaltar a Dios sobre todas las cosas, porque no estoy diciendo que estamos en una burbuja, son cosas normales, vivencias normales, crisis normales, es normal que una persona llore porque perdió un familiar en este tiempo complicado, pero a la vez decimos «hay esperanza, no hay que quedarse en ese estado, hay que seguir y continuar».

FL: ¿Cómo ves el hecho de que el evangelio no vino para mejorar la vida de la persona? Sería verdaderamente un problema, lo vemos en la vida de los apóstoles, estamos completamente seguros, ellos fueron hombres que lo hicieron por amor y fueron mártires. Precisamente la Palabra dice «el que la quiera ganar la va a perder, pero el que pierda su vida por amor a Cristo la va a hallar». No es una invitación a mejorar la vida de los seres humanos sino a resucitar juntamente con Él. El evangelio no está emparchando vidas dañadas sino, más bien, está resucitando muertos, haciendo todas las cosas nuevas. Él habla de una vida que es eterna y abundante en la persona de Cristo. Justamente Él es el alfa y el omega, el principio y el fin, es el que estuvo muerto y ahora vive para siempre. Entiendo que la canción está comunicando toda esa sustancia en Cristo.

ZA: Sí, esta es la intención, sabemos que la historia no termina en lo que nosotros estamos viviendo hoy, sino que hay un paso a una vida eterna después de todo lo que estamos viendo, sucesos que tienen que ver con el cumplimiento de la Palabra. Y sabemos que más allá de aprender a solucionar cosas, aunque nos dio la capacidad de hacerlo, es encontrar la paz en medio de la tormenta, creo que el aprendizaje mayor es ver a Jesús en medio de la tormenta.

El aprendizaje mayor para mí, en el ejemplo que vi de Pablo y Silas, es que nada corrompió su postura, la fe, la determinación y la creencia. Y creo que Pablo es el ejemplo claro de alguien determinado en cumplir la meta y los objetivos. Saulo, que tenía una meta de perseguir a la Iglesia de Jesucristo y desterrar y todo, pero esa misma determinación la usó para decir «acá me la juego toda, no importa lo que pase, lo que se levante».

Por eso, por todo el aprendizaje y que, sobre todo, su fe y determinación que no se corrompieron por nada. Hoy en día va a haber más maldad, hay promesas frente a eso también, «donde hubo pecado sobreabundó la gracia», hay una manifestación mayor a eso. Pero para mí el éxito no está enfocado en cuánto yo pueda mostrar que he ganado batallas, sino en permanecer a pesar de todo.

Es decir «mirá, éste es Jesús, es quien me sostuvo y lo puede hacer con vos, estuvo en medio de la tormenta. Y aún cuando estaba solo en la barca, Él se acercó y dijo ‘no temas, yo soy, acá estoy, no hay que preocuparse’». Creo que éste es un tiempo donde muchos fueron golpeados en su fe, y creo también que es el tiempo en que los hijos vuelven a casa para decir «tengo que permanecer ahí, ya le di a la cabeza contra la pared, ya probé».

Ahora no puedo quedarme a recordar que en casa el criado come mejor de lo que yo estoy comiendo, no, es tiempo de volver y permanecer en Él, más allá de la estructura de la iglesia, en la intimidad. Es volver a su corazón y permanecer ahí «Dios, acá estoy jugándome todo por vos».

FL: Vos volvés a comunicar la expresión de Dios, el Yo soy, la naturaleza eterna de Él en el presente continuo. Como lo describe Pedro, Dios no habita en el tiempo y espacio que gobierna sobre Él. O sea, es el permanecer en Él, quien es la solución. Ante una enfermedad la solución no es la sanidad, es si Cristo es Cristo. Podemos estar enfermos y estar completamente satisfechos. No necesitaríamos que el problema sea resuelto, sino que en Cristo me fueron dadas todas las respuestas antes de que aparezcan todas las preguntas.

Entonces cuando uno dice «el alfa y el omega, el principio y el fin», quédense tranquilos, éste es el estado original de donde nunca debimos haber salido. En Cristo estamos completos, lo que necesitamos es esto, empieza y termina todo acá, me gusta mucho la fisonomía y la expresión de este proyecto que estás comunicando y ¿cómo te ves en el worship?

ZA: Mirá, mi forma de ver es que yo soy el papá, tengo tres hijos: mi hija mayor de 20 años, mi hijo que sigue de 18 y la más chiquita, de tres. El tema es que yo no puedo ver todo lo que viene desde el punto de vista de Zeki, el artista que está metido en el worship.

Yo necesito ver como padre. Hay cosas que no terminan de resolver una puesta en escena. Porque, primero, no somos Espíritu Santo; segundo, solamente comunicamos un mensaje, y lo que es poderoso es el mensaje, es el que transforma vidas. Yo lo miro como padre, aprovechando una oportunidad o desperdiciando una oportunidad de que una generación pueda conocer a Cristo.

No puedo ser egoísta porque yo ya entré y ya conozco. Más en worship, que tenés que tener cierto conocimiento de Dios, de su corazón y de lo que Él quiere transmitir e impartir a esta generación. Pero no puedo ser egoísta y no pensar en aquel que todavía no entró ni sabe cómo entrar a Cristo.

Necesito meter a mis hijos a que puedan conocer de Dios y dentro de mis hijos hay mucha gente. Por ahí depende cómo sea la presentación de un evento, un show o una noche de celebración, un altar, para mí las plataformas son oportunidades para que alguien se pueda conectar con Dios. Si se conectó con Dios, ya está. El éxito viene en que todos puedan conocerlo a Él y que Él sea levantado, glorificado y expuesto como el Dios de amor que es.

Podría darte una respuesta artística, pero me interesa aprovechar para decir el propósito. Yo tengo admiración por todo el trabajo que hicieron ustedes (por Kyosko), en todo el trayecto llega un punto del trabajo en que interesa más el propósito que el mismo trabajo, el fin, el resultado.

Yo pienso que el worship se catalogó con un estilo musical, pero la intención es que todos puedan conocerlo. Y si una canción con este ritmo, como Alfa y omega, puede llamar la atención a alguien que no ingresó y no sabe cómo hacerlo, también es una victoria.

Yo fui un adolescente al que la música lo contuvo hasta tener un encuentro con Dios; tu música me contuvo, la música de varios artistas argentinos y de otras naciones me contuvieron hasta que llegó el momento, y fue el momento justo. La admiración pasó a estar hasta el último y pasé a enamorarme de Dios plenamente.

Pero no todos los procesos son iguales, como todos los hijos no son iguales, yo creo que vos tenés un manual de cómo criar a tu hijos, yo el mío y otro el suyo. Entonces va a ser único. Por ahí toca hacer la tarea de ingresar a aquellos que, de seguro, sabiendo cómo viene la cosa, ni les interesa Dios o están indiferentes de quién es Dios.

Por ahí nos toca hacer la tarea como lo hizo Jesús frente a la mujer samaritana. Me llama la atención que es una simple conversación, no es un trayecto de una semana, no es el estudio de un mes, ni lo que podés aprender en un año, fue una simple conversación. Jesús lo que hizo fue inspirar a la mujer, despertar la curiosidad de quién era el que le estaba hablando.

Tal vez hay una generación que está en esta postura, que no tiene ni idea de quién es Jesús, tienen información de Él pero no lo conocen, yo creo que en este tiempo nos toca hacer la tarea que hizo Jesús, de despertar el interés. Porque terminó la historia de la mujer y ella fue y le contó a todos los samaritanos que había una persona que llenó su corazón, y ellos dijeron «queremos conocer a ese Jesús». Y cuando lo conocieron dijeron «es verdad».

Resumiendo, creo que ésta sería nuestra tarea, despertar el hambre en una generación que está indiferente a Jesús. Sé que no existe la perfección, pero, de alguna forma, despertar ese interés para que puedan conocerlo. Y hay muchos testimonios de que en este tiempo se ha logrado, sabemos que siempre va a faltar cinco para el peso, pero estamos haciendo el trabajo para poder cubrir la necesidad de alguna forma.

FL: Zeki, justo nombrás a la mujer samaritana, Juan capítulo cuatro, tan importante y estudiado por todos aquellos que somos adoradores por naturaleza, pero no por naturaleza humana sino por naturaleza divina. Todos aquellos que han nacido de nuevo, hemos nacido en una naturaleza divina cuya sustancia es ser adoradores en espíritu y en verdad, y entendemos por su palabra de manera clara que adorar no es cantar.

La adoración. Todo lo que adora el padre es el Hijo. La expresión del Hijo en nosotros es una vida producida por el Espíritu, que conforma la imagen de su Hijo, que es todo lo que adora al padre. Jesús dijo, «miren, ya no van a ir ni a una montaña ni a una ciudad ni a un edificio, sino que ahora el único lugar de encuentro con el Padre soy yo y nadie viene al Padre si no es por mí».

Cuando vos entendés esto, que uno puede cantar toda la vida a Dios sin adorarlo, porque lo que adora es el Hijo. Jesús diciendo ‘mira, no es lo que hagan o digan, sino aquel que hace la voluntad de mi Padre, esos son los que yo conozco’. Entonces es la expresión de Cristo en nosotros, que es la encarnación de la voluntad del Padre. Sabiendo que la adoración no es solo un evento, es una persona ¿cómo lo vivís eso vos con la gente para que se pueda entender lo que lo que está pasando?

ZA: Nos toca reeducar. Hablar de la mujer samaritana a mí me apasiona, porque Jesús le entregó una revelación de adoración muy profunda a alguien que no tenía ni idea de quién era Jesús. Sabemos que, para nosotros poder responder de alguna forma a una expresión de adoración, necesitamos saber quién es Él.

La samaritana se quedó ahí frente a la multitud, «si Jesús tiene algo para decir, acá estoy escuchando»; además, ella rompió todos los paradigmas, no podía estar ahí sola. Y Jesús ahí trató lo cultural, pues judíos y samaritanos no se llevan entre sí. Entonces la reeducó, también marcó en ella lo generacional, ellos estaban acostumbrados a sacar agua de ese pozo, y ahora Jesús le dice de un agua mayor.

Cuando hablamos del culto principal de adoración, no es ni a la vieja escuela ni a la nueva, es algo nuevo. Tendemos a cometer el error de educar a las generaciones, a llevarla nosotros, pero no; es que tengan una conexión directa con Dios y que ellos puedan manifestar esa esencia.

Cuando me toca hablar de qué es la adoración, yo voy más atrás, a que adoramos antes de que aprendamos a cantar, a caminar. Un papá no siente el placer de tener su hijo cuando dice su primera palabra (aunque es un acontecimiento por si dice primero «papá» o «mamá»); el amor de los padres a su hijo comenzó cuando se enteraron de que estaban embarazados.

Entonces estamos mal aprendidos, pensamos que Dios se agrada de nosotros cuando recién comenzamos a cantar o servimos, y no, el amor de Dios está antes de todas las cosas. Yo decido cantarle porque estoy super agradecido, yo puedo ser demostrativo y decir te amo, pero sabemos que los años dejan en evidencia que su amor es verdadero, no por las palabras, sino por los hechos.

¿Qué más pedir? Si murió en la cruz y resucitó por amor, yo le canto no porque necesite llamar su atención, sino que le canto porque Él tiene mi atención porque ya me demostró que me ama. Por eso canto y adoro, por eso celebramos, no necesitamos cantar para que Él nos ame, ya es su esencia el amor.

Tiene que ver con esencia, y si no hay amor es que hay ausencia de Él, porque es su naturaleza. Necesitamos reeducar para que sepan que no tiene que ver con esforzarnos para demostrar algo, sino en corresponder a un amor ya demostrado.

FL: Qué tremendo que para que haya adoración tiene que haber una vida producida, ser llenos del Espíritu Santo, es Él quien nos revela y manifiesta al Hijo. Es maravilloso y tan bueno cuando vos, Zeki, y los que Dios escogió en este tiempo, pueden educar a la iglesia en esto, para que no se pierdan este tesoro de poder adorar en espíritu y verdad. No hay adoración que no sea Espíritu; es la vida de cristo manifestada, Pablo diciendo que su vida está crucificada juntamente con Cristo para que no sea él sino Cristo reflejado. Cuando entendemos, se expresa verdadera adoración. Gracias, Zeki, fue muy edificante y muy lindo hablar de Dios.

ZA: Podríamos estar horas, el corazón de Dios es apasionante, más cuando uno está apasionado por Él. Me gustaría que todos entendieran de qué lugar suceden todas las cosas, nos toca direccionar. Papá está esperando en casa, solo hay que regresar a Él, la restauración del hijo pródigo sucedió dentro de la casa, no afuera. No hablo de la iglesia, estoy hablando de volver a la intimidad con Dios porque hay mucho disfrute en su presencia.