Nos maltratamos de tal manera cuando creemos que no estamos a la altura de lo que esperábamos de nosotros mismos, y llegamos a decirnos palabras muy crueles, somos muy duros.
Dios nunca nos va llevar a fracasar ni a hacer el ridículo. La misericordia de Él en cada momento.Tú puedes hacer todo lo que Jesús dijo que podías hacer...