Wycliffe Associates confirmó que, en el año pasado, se realizaron la mayor cantidad de versiones de la palabra de Dios que en cualquier otro.
La organización, que equipa a traductores de la Sagrada Escritura en su lengua materna, dio a conocer esta semana, a través de un comunicado de prensa, que en el 2020 se completaron traslaciones del Nuevo Testamento en 141 idiomas, y del Antiguo en 8 lenguajes diferentes. Dicha cantidad es la mayor que se haya visto en períodos de tiempo similares, y sorprende teniendo en cuenta las dificultades que genera el actual contexto marcado por el COVID-19.
Tim Neu, presidente interino y director ejecutivo de Mycliffe Associates, analiza “En lugar de ralentizarse debido al COVID-19, para algunos traductores bíblicos nacionales, la traducción se ha acelerado”
La organización, que desde hace más de 50 años se ha propuesto dar a las personas la Palabra de Dios en su propio idioma, lanzó en el 2020, como respuesta a la pandemia por el coronavirus, diferentes alternativas en línea que le permitieron a los traductores nativos participar de forma remota en eventos de traducción de la Biblia, además de trabajar colaborativamente en todo el proceso.
En muchos casos, además de las dificultades que se derivaban de la pandemia por el COVID-19, los nativos que cumplen este rol se vieron envueltos en un entorno violento de persecución. En este sentido Neu destaca “me he sentido honrado al ver cómo los creyentes en áreas difíciles, algunos en lugares de intensa persecución y peligro real, han sido absolutamente inquebrantables en su dedicación a la causa”
Wycliffe Associates fue fundada en 1967 y actualmente tiene 773 traducciones de la Biblia en progreso, aunque ya han recibido solicitudes de 273 grupos de idiomas que buscan ayuda para lanzar traducciones de la Biblia en el 2021. El personal y los voluntarios están acelerando actualmente las traducciones de la Biblia en 68 países.
La organización equipa a los traductores bíblicos nacionales para que proporcionen la Palabra de Dios en su propio idioma, se asocia con la iglesia local para dirigir y proteger el trabajo de traducción, aprovechando su pasión y deseo por la Palabra de Dios, e involucra a personas de todo el mundo para proporcionar recursos, tecnología, capacitación y apoyo para esta ardua tarea.