La primera jovencita en circunnavegar en solitario, 210 días lejos de casa, ¡pero con el sueño cumplido!
Espíritu libre es una película que está basada en hechos reales y cuenta la historia de Jessica Watson, que con tan solo 16 años se atrevió a navegar por el mar abierto, durante 210, absolutamente sola.
La historia transcurre en Australia, donde vive Jess con toda su familia; desde muy pequeña, nuestra protagonista tiene como apasionado objetivo hacer una circunnavegación solitaria, y persigue el sueño de ser la más joven en lograrlo.
Junto con el apoyo de su coach Ben Bryant y toda su familia, trabajó durante años para conquistar esta ambiciosa meta.
Al principio, todo resulta fácil, pero a medida que el relato avanza, las críticas, los comentarios de los periodistas hacen que el sueño de Jess se vea truncado.
La joven, firmemente decidida a realizar esta circunnavegación, comienza a poner en forma a su compañero de navegación: su barco llamado “Pink Lady”, pero para eso necesita ayuda monetaria que, por el momento, no tiene, hasta que su entrenador Ben la sorprende con el barco en condiciones para navegar.
Su familia, no muy convencida con el objetivo y con mucho miedo e inseguridad, intenta convencer a Jess —sin éxito— de que no realice esta navegación hasta estar 100% lista: Jessica decide ir de todos modos.
Finalmente, nuestra protagonista comienza con la navegación: logra cruzar el ecuador, supera algunas tormentas muy fuertes, hasta que llega a un lugar del mar donde no hay viento, lo cual causa que la navegación se detenga.
En la soledad y el silencio interminable del mar, Jess por primera vez entra en crisis y experimenta lo que realmente es estar sola en medio de la inmensidad de las aguas. Comienza a extrañar mucho a su familia y a pensar que no va a poder lograr su sueño.
Un dato muy importante es que Jessica es disléxica, y esto hace que todo sea aun más difícil a la hora de leer las rutas de navegación; sin embargo, esto no la frena: al contrario, se llena de fuerza y valor para continuar con su objetivo.
Tras varios días de navegación y ya regresando a su casa, la joven se enfrenta a una de las tormentas más peligrosas y fuertes, y es ahí donde Jess, muy enojada, comienza a hablar con Dios y a preguntarle por qué permite que esto le pase a ella.
Con mucho miedo, Jessica decide de todas maneras seguir y no parar en ningún puerto (lo cual implicaba la descalificación automática) y, como en toda película, siempre hay un plot point que lo cambia todo… ¡pero no te vamos a spoilear nada!
A pesar de todo lo que Jess tuvo que enfrentar —vientos fuertes, tormentas, miedos, soledad, incertidumbre—, no se dio jamás por vencida, y esto le dio más fuerzas para seguir adelante con el gran sueño de su vida.
Esta película nos enseña que, obviamente, no siempre todo va a salir como queremos: los climas no van a ser perfectos, habrá tormentas muy fuertes, pero a pesar de todo eso, no estamos solos; Dios nos acompaña en todo momento, nos llena de fuerzas y nos hace saber ¡que con Él lo podemos todo!
Súper recomendada para ver esta película en familia y con amigos; la podés encontrar en la plataforma Netflix.