El arquero titular del Liverpool es un seguidor profundo del Señor; con su talento y reconocimiento mundial, el brasileño lleva la Palabra de Jesús a donde quiera que vaya, además de llevar a compañeros y amigos a los brazos del Padre.

Alisson Ramses Becker, conocido popularmente como Alisson, nació en la ciudad de Novo Hamburgo, perteneciente al estado de Río Grande del Sur, en Brasil, hace 29 años. Desde muy pequeño es arquero de fútbol, al igual que lo fueron su abuelo, su padre, su hermano y hasta su madre. Pero tuvo que pasar algunas interrupciones hasta el momento de su debut como profesional.

Becker conoce a Jesús gracias a sus padres, quienes desde muy chico lo guiaron por el camino de la fe y a día de hoy el arquero la agiganta y también anima a sus seguidores a través de las redes sociales a leer la Palabra y a congregarse.

Con solo 10 años, el jugador ingresó a las juveniles del Internacional de Porto Alegre para convertirse en un portero profesional; sin embargo, no todo fue sencillo para él ya que a los 15 años su desarrollo biológico hizo que su debut se atrasara más de lo planeado.

En 2013 pudo hacer su debut como profesional, en un partido que terminó con empate frente al Cruzeiro. Aunque para ese entonces le tocó competir por el puesto con el mítico arquero brasileño Dida. Consiguió tener continuidad y con 20 años terminó ganándose el lugar en la portería.

A base de esfuerzo y grandes actuaciones bajo los tres palos, Alisson comenzó a llamar la atención y los ojos de la Roma de Italia se posaron sobre él, los medios italianos ya daban el traspaso por cerrado y así fue, en 2016 a cambio de 8 millones de euros, Becker era el nuevo arquero del conjunto romano.

Luego de ganarse un lugar y siendo figura en muchos de los partidos que disputó, el arquero nacido en Novo Hamburgo nuevamente estaba en el radar de otro equipo europeo, esta vez, del que hoy es su actual club, el Liverpool de Inglaterra.

Llegó en el 2018 para reemplazar a Loris Karius, a cambió de 73 millones de euros, el traspaso más caro pagado por un arquero hasta ese momento. En el conjunto inglés ganó la Premier League, la Copa de la Liga, y a nivel internacional se coronó campeón de la Champions League, la Supercopa y el Mundial de Clubes. Rápidamente se ganó la confianza de su entrenador y fue titular indiscutido hasta el día de hoy, lo que lo llevó a ser convocado para defender los colores de la selección de Brasil.

Finalizando ese año y comenzando el siguiente, Alisson fue elegido por la FIFA como el mejor arquero del mundo en esa temporada, venciendo a Marc-Andre Ter Stegen del Barcelona y a su compatriota Ederson Moraes del Manchester City

En dicha ceremonia, una vez que Becker sube a recibir el premio, agradeció con las siguientes palabras: «Es un gran placer recibir este premio, que representa todo lo que trabajé en mi vida hasta que llegué aquí. Me gustaría agradecer especialmente a mi esposa, a mi hija Helena, a mi hijo recién nacido, Mateo, a mis padres y a todos los que me ayudaron a llegar aquí. Estoy sin palabras, Gracias a Dios, por bendecirme con tanto honor de estar aquí, en un lugar como este, recibiendo este premio”.

Además agregó «creo que aquí represento a todos los jóvenes brasileños que sueñan con ser jugadores de fútbol. Así que solo tengo que decir ‘no abandones tus sueños’, pelea siempre, porque yo salí de la nada, luché, valoré lo que siempre tuve, honré a Dios en lo poco y Él me honró en lo mucho».

Con el seleccionado brasileño disputó hasta el momento 42 partidos y recibiendo solamente 15 goles, ganador de la Copa América en 2019 y elegido mejor arquero de la competición, uno de los tantos reconocimientos individuales que tiene el jugador del Liverpool. 

En el año 2020 se dio la gran sorpresa y uno de los mejores momentos de la vida del arquero, según sus dichos, ya que pudo acompañar y presenciar el bautismo de su actual compañero de la selección brasileña y del Liverpool, el delantero Roberto Firmino. 

En el mismo bautismo, el arquero pudo estar con su nuevo hermano en Cristo y además participó directamente en la ceremonia, algo por lo que no pudo evitar las lágrimas de la emoción. Previamente hubo un momento de adoración, para luego culminar con la nueva vida en Cristo.

«Jesús es amor, no tiene explicación. Basta con creer en Él y sentir el Espíritu Santo», fueron las palabras de Firmino antes de fundirse en un abrazo con Alisson.

En 2021 Alisson dio una entrevista al diario brasileño Foha de Sao Pablo, donde habló de su fe:

“No soy religioso, soy seguidor de Cristo. Cuando hablamos de religiosidad, está muy ligado a tradiciones y factores que empañan un poco la historia del cristianismo. Jesús es mucho más que una religión”.

El arquero, además, tiene una hermosa costumbre de llevar en cada partido bajo su camiseta, una remera con la Cruz=Amor.

Actualmente, Becker usa sus redes sociales para compartir la Palabra y en el vestuario junto con sus compañeros también, es algo que tomó como una tarea de expandir el Evangelio, tal y como sus padres le habían enseñado cuando solo era un niño, para hacer caso a sus propias palabras, “Jesús es mucho más que una religión”.