Letitia Wright, conocida por su papel de Shuri en Black Panther, fue ganadora de un premio y utilizó el tiempo de su discurso para predicar el Evangelio.
Una vez más, la Palabra de Dios es expresada en el inmenso mundo del cine. La actríz británica, que adquirió un papel más protagónico en la última película de Black Panther, ya había declarado públicamente su fe, pero eso no le impidió hacerlo también en medio de la ceremonia de los premios Orange, en la que ganó en la terna de mejor estrella emergente.
Anteriormente, contamos en nuestro medio acerca de ella y de su conversión al Evangelio luego de pasar por depresión y casi abandonar por completo la actuación. En una entrevista, Letitia había compartido su experiencia con Dios, pero este evento ocurrido hace unos años fue más público, ya que se encontraba delante de una gran comunidad de actores y productores que estaban oyendo sus palabras.
“Me identifico como una hija de Dios”, fue la primera declaración de la joven en la noche de premiaciones. “No puedo subir aquí sin agradecerle a Dios —continuó diciendo Letitia—. Hace algunos años, me encontraba en una profunda depresión, y literalmente quería renunciar a ser actriz. Lo único que me sacó de eso fue Dios, mi creencia, mi fe y mi familia”.
“Puede que aquí haya gente con depresión o que esté pasando un mal momento, y solo tú lo sabes, y te obligas a sonreír, pero quiero decirte que Dios también lo sabe. Te hizo a ti y´eres importante”, compartió la joven que interpreta a Shuri.
Letitia dio a entender que había transitado por momentos oscuros personales, pero también el mundo era testigo del rechazo y repudio de muchos en las redes sociales cuando ella publicó un tuit en el 2020 con un video de un pastor que criticaba la ideología LGTB y hablaba de la mirada de Dios ante ello. Automáticamente, usuarios explotaron contra la actriz acusándola de transfobica y homofobica. También se la criticó duramente por cuestionar los efectos de las vacunas contra el COVID-19. Su cuenta de Twitter fue cerrada y ella decidió alejarse de las redes sociales por un tiempo.
Algo parecido había sucedido con otro actor cristiano del MCU, Chris Pratt, cuando se mostró en contra del aborto.
El mundo del espectáculo puede resultar hostil, pero aun así somos testigos de cómo los actores cristianos no dependen ni de las películas, ni de buenos directores o taquillas, sino únicamente de Dios.