Desde la dirección de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la Republica Argentina se expidieron ante el comunicado que hizo la ministra de Salud.
Luego de que, el martes pasado, Carla Vizzoti anunciara que ya no sería obligatorio el uso de barbijo, junto con otro paquete de medidas en las que se incluye un aforo del cien por ciento en reuniones dentro de las iglesias, en exclusiva con La Corriente dialogamos con Jorge Gómez, director ejecutivo de la entidad, sobre la situación actual y cómo sería prudente actuar ante las nuevas desconcertantes normativas que comunicaron desde el Gobierno Nacional.
La Corriente: Desde ACIERA ¿qué recomendaciones dan a las iglesias con las nuevas normativas implementadas por el gobierno?
Jorge Gómez: Es importante hacer la distinción de que fueron anuncios oficiales a través del nuevo jefe de Gabinete nacional y la ministra de Salud, difundidos el pasado martes 21 de septiembre, pero todavía falta que se convierta en una normativa que debe promulgarse a través de una decisión administrativa o un nuevo DNU. Por lo tanto, la recomendación que damos a las iglesias es que sigan los decretos y protocolos vigentes en sus provincias y municipios. Un anuncio, aunque sea oficial o una publicación al respecto en un medio de comunicación, no debe interpretarse como una reglamentación a seguir hasta que la misma no sea promulgada a través de los canales legales correspondientes.
La Corriente: ¿Qué opina de estas medidas que emitieron de manera repentina, ¿Cuáles son los aspectos positivos y negativos?
Jorge Gómez: Las mismas se refieren a un aforo del 100% en lugares cerrados, reuniones sociales sin límite, regreso a los estadios de fútbol y otras actividades, el no uso de barbijo al aire libre sin aglomeraciones. Frente a esta flexibilización de la pandemia, es necesario entender que la disminución de la mortalidad o contagios por Covid-19, que muestran una curva descendente, no eliminó aún su riesgo.
El virus continúa circulando, aunque con un riesgo menor, pero riesgo al fin, por lo tanto, no debemos relajarnos, por el contrario, es pertinente seguir las mismas medidas de prevención sobre el distanciamiento social, uso de barbijo, sanitización, correcta limpieza y desinfección de los ambientes, lavado de manos, vacunación, ventilación, etc. Esa es la manera de controlar el riesgo, el cual depende de tres variables al momento de evaluar éste como un riesgo alto o bajo, la existencia de un agresor como lo es el virus, la frecuencia con la cual se convive con el mismo y las consecuencias en el caso de ser infectados.
Y lo peor que puede ocurrir ante un contagio por COVID es la muerte misma. Dios nos enseña en su palabra en Proverbios 22:3 “El avisado ve el mal y se esconde; mas los simples pasan y reciben el daño”. Seamos precavidos administrando sabiamente la vida que el Señor nos regaló y ayudemos a cuidar la vida de los demás.
La Corriente: ¿Es conveniente que las congregaciones vuelvan a tener el 100% del aforo?
Jorge Gómez: El tema de los aforos que se contemplan en los protocolos de higiene y seguridad debe ser entendido en ese marco. Es decir, independientemente del porcentaje de aforo que las autoridades determinen, hay que cumplir ciertas medidas de higiene, seguridad y salubridad, como por ejemplo el mantener los ambientes cerrados bien ventilados, desinfectados y sanitizados para cada servicio cúltico, el debido distanciamiento entre los miembros de la congregación, uso de barbijos, disponer de alcohol en gel en los lugares de circulación, evitar el contacto físico y las aglomeraciones, la protección para quienes forman parte del grupo de alabanza, los niños, etc.
Más allá de los porcentajes de aforo y tal como lo remarcamos anteriormente, el riesgo COVID existe, no desapareció con los anuncios dados por el gobierno nacional. Además, nuestro sistema de gobierno es también federal y eso quiere decir que cada provincia determina el nivel de adhesión a las medidas nacionales, porque la circulación del virus puede variar en cada región según sus condiciones actuales en lo que respecta a circulación del virus, sistema sanitario, porcentaje de vacunación, etc.
La Corriente: ¿Qué expectativas hay desde lo pastoral con cada apertura establecida por el gobierno?
Jorge Gómez: Si bien hemos descubierto que la virtualidad llegó para quedarse porque es una gran herramienta de comunicación, no podemos dejar de mencionar que es necesaria la comunión presencial en los templos. Ya lo dijo Dios “No es bueno que el hombre esté solo”, la socialización es una necesidad básica para el ser humano. Pero debemos hacerlo con responsabilidad, conciencia preventiva, porque es parte del amar al prójimo, el cuidarnos en el marco de una pandemia.
Desde ACIERA animamos a las iglesias evangélicas que representamos a no dejar de anunciar las buenas noticias del evangelio, guardar la unidad, desarrollar la cooperación hacia los más vulnerables. Pero respetando las medidas de seguridad e higiene, siendo un agente de prevención en el desarrollo de la misión que Dios nos encomendó.