Jesús es la imagen del Dios invisible. Lo que no se veía de Él, se hizo visible a través de su Hijo.

Cristo nos da una imagen clara del Padre. En su persona podemos distinguir con facilidad cuál es el carácter y el corazón de Dios. Es un retrato, una expresión fiel en la que podemos apreciar la naturaleza del Reino de los cielos.

Las imágenes tienen poder, influyen y condicionan nuestra manera de pensar. Nos ayudan a entender las cosas. Si las que contemplamos son las correctas, modelan en nosotros la verdad y renuevan nuestra mente a lo santo y eterno.

A lo largo de la historia, el esmero de Satanás fue desdibujar la imagen de Dios, de la Iglesia y de sus hijos. ¿Por qué? Porque si logramos distorsionar la imagen acerca de algo, impedimos que las personas puedan relacionarse con ello de una manera sana. Ejemplo: la imagen de un Dios castigador y controlador hace que nos distanciemos de la verdadera que es un Padre tierno y amoroso. Así muchas más.

Todos creamos imágenes con la manera en que nos comportamos, hablamos y tratamos a otros. En nuestro caso, quienes creemos en Jesús, representamos a Dios e ilustramos su corazón hacia la humanidad. Somos los responsables, con la ayuda del Espíritu Santo, de crear imágenes precisas y correctas acerca de quién es Él.

La religiosidad, las formas sin amor y esencia pura, crea imágenes incorrectas de Dios y eso perjudica a tal punto que no podemos relacionarnos de una manera sana con nuestro Creador.

Jesús, el gran ilustrador

Pero volvamos a Jesús, nuestro maestro y modelo: “Jesús usaba muchos de estos relatos ilustrados cuando hablaba a la gente a fin de que pudieran entender cuanto fuera posible” (Marcos 4:33, VBL).

Él sabía la importancia de las imágenes. Sabía que para que entendamos algo necesitamos verlo por lo menos en nuestra imaginación. Por eso ilustraba con parábolas y relacionaba situaciones cotidianas con principios eternos de su Reino: sembrar, construir, encontrar tesoros, etc. Su manera de enseñar se caracterizaba por la narrativa de historias pequeñas que detallan el corazón del Padre, que retratan en el corazón de los oyentes una obra del afecto más puro y hermoso.

Jesús era un excelente ilustrador. Él sanaba con sus ilustraciones.

Rompía los muros que se habían levantado, acortaba la distancias, limpiaba lo que la maldad del hombre había manchado. Así nos invita a la cercanía con Dios Padre, a la reconciliación.

Ilustración de @fromheavenart

Actualmente consumimos alrededor de ochocientas imágenes a diario. Seamos conscientes o no, ellas crean e impactan en nuestra manera de vivir. Nos acercan o alejan de Dios. La publicidad, la moda, las noticias, las redes sociales. Todo ese conjunto afecta en nuestra manera de entender las cosas y a la vez modela y ofrece un estilo de vida. Las imágenes nunca son inofensivas.

Los artistas tenemos un privilegio y una oportunidad muy grande de aportar imágenes que sanen, que conecten, que reconcilien. El Espíritu Santo es quien nos muestra lo del cielo, el que conoce a Jesús y nos recuerda su andar y enseñanzas para que las reproduzcamos de manera creativa. 

Él nos confía ideas, palabras e ilustraciones con el fin de atraer a muchos a la luz de Cristo.

Una imagen inspirada por Dios puede conmover un corazón duro y llevarlo al arrepentimiento, puede reconectarlo con la pureza que perdió y con el amor que no recibió.  

Por eso también creamos y existe From Heaven, porque creemos que con la contribución de ilustraciones podemos ayudar a acortar distancia entre Dios y las personas. Porque una imagen tiene poder para salvar una vida, para alumbrar el entendimiento y dar a conocer la belleza de un Dios invisible que se hizo visible por amor. Porque Jesús en nosotros ilustra el corazón de Dios.

Ilustración de @fromheavenart
Manu Encinas
Me gusta dibujar, leer, escribir. Creo para contar historias, a veces con palabras, otras con dibujos. considero una persona sencilla y sensible. Busco transmitir eso en mis ilustraciones. Creo en el poder de lo simple. Soy ilustrador, estudié en la Universidad nacional de Artes en Argentina. Desde 2016 trabajo en un proyecto llamado From Heaven donde compartimos ilustraciones que expresen el corazón de Dios.