El artista que fusiona pop latino con sonidos folclóricos argentinos, pasó por los estudios de La Corriente para conversar con nosotros.
En una charla bien íntima y relajada, Gabriel nos compartió sus experiencias, sus historias y cómo Dios impulsó y encaminó su carrera de músico a temprana edad.
El ritmo del corazón de Dios
GB: Al estar cerquita de Dios escuchás el latir de su corazón y empezás a meterte en ese río de agua viva. Cuando empezás a escuchar sus latidos, yo creo que empezás a caminar a su ritmo.
Somos músicos y entendemos que el tempo es fundamental para un ensamble. El nos mantiene en orden, el nos mantiene correcto, el que nos mantiene ubicado con el otro músico.
Su corazón nos mantiene alineados al propósito eterno de Dios y nos hace vivir enfocados.
Gabriel Bazán
La mente de Cristo
SL: Es un error decir que venimos de cuna cristiana. Dice la Palabra que Él nos dio su corazón, nos dio un espíritu y nos dio una mente que es la mente de Cristo, en donde todas las cosas pasan por el filtro de la cruz.
GB: La mente de Cristo me lleva a tener la esperanza de que me voy a encontrar con Él en la eternidad. Estar en Él me lleva a pensar que todas las cosas son hechas nuevas y que por sus llagas hemos sido curados.
Pero también me lleva a entender que estoy de tránsito por acá, que estoy por un tiempito, o sea, si yo trazo mi vida y la vida eterna en una línea; mi vida empezaría desde el día que nací, pero si empiezo a trazar la vida eterna, no tiene fin. La línea continúa.
Música que transmite vida
GB: Yo canto lo que el Señor me ha dado por cantar y mi fundamento es contagiar su vida, alegría y esperanza a una sociedad que se ha perdido. Ese es mi propósito a través de la música.
Me baso en el versículo que dice que “cosa que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido al corazón del hombre, son las cosas que Dios ha preparado para los que le aman”.
Y yo le pido al Señor esas cosas que el oído no oyó. Para que yo pueda llegar al corazón de la gente y que con un simple acorde de charango o con una canción, las personas puedan tomar la decisión de que el Señor sea el que maneje el timón de sus barcas.
Cristo nos llama a relacionarnos con Él
SL: Tu canción La Barca comparte un mensaje tan poderoso. Porque dice la palabra que si no es Dios el que maneja el barca, se hunde. Y creo que ese es un deseo súper genuino como artista, como hijo, como pastor también. Es decir, que hay que tomar conciencia de quién está en nuestra barca.
GB: Tenemos un Cristo que es muy simple, es muy sencillo. La Palabra de Dios es simple, es fresca, es viva y eficaz.
Muchas veces vamos a leer la Biblia, no la vamos a entender, pero cuando viene un problema, viene una dificultad, viene una adversidad, se me refresca la Palabra y ahí está el Espíritu Santo.
Como decías recién; hay jóvenes que me dicen que sienten que el Espíritu Santo se fue. Pero nada más erróneo que esto, porque Él está a la puerta y está llamando para sentarse a cenar contigo y tú cenes con Él.