El pasado miércoles la localidad de quilmes, el programa de streaming De Repente Lo Vi reunió en Buenos Aires a más de 1300 personas para vivir un episodio único, presencial y completamente inolvidable, con un propósito que fue más que entretener: recaudar juguetes para bendecir a niños y niñas en esta Navidad.
Con esta nueva iniciativa de llevar el formato del streaming al plano presencial y recorrer distintas localidades de Buenos Aires, la comunidad de De Repente Lo Vi copó el auditorio Ríos de Vida (Quilmes) en una noche cargada de unidad y propósito. Hubo juegos, risas, reflexiones, momentos emotivos y, sobre todo, mucha música que levantó al público de sus asientos.
Seba, Davi, Mique, El Embajador y Nair hicieron vibrar al auditorio con su interacción constante. Y, por supuesto, no podían faltar los personajes más queridos de esta temporada: Don Chicho y Próspero Palmera, que desataron carcajadas y le pusieron el toque perfecto a una noche de celebración.
Las bandas Fila 9, La Feria y Factor de Cambio encendieron el escenario con shows poderosos y memorables, dejando una huella en este 2025 y marcando el comienzo de una nueva etapa para el programa.
La noche también contó con la participación de Lucas Marín, quien se sumó al panel para hablar sobre el amor desde una mirada profunda y genuina, aprovechando el momento para recordar al público el Amor más grande de todos: Jesús.
Además, estuvo presente el pastor David Greco, uno más de la casa que volvió a compartir respuestas, sabiduría y dirección espiritual. En esta oportunidad, habló sobre cómo Dios usa a las personas para pulir sus dones y talentos para Su gloria, ya sea en lo visible o en lo invisible.
Este evento fue posible gracias al apoyo de Iglesia Ríos de Vida, Totos Cerámicos, Vulcano Roller, Heladería Piamonte, Vimar y Librería Peniel, quienes hicieron de esta velada una experiencia única e irrepetible.
El resultado superó todas las expectativas: se recolectaron más de 1600 juguetes para regalar en esta Navidad. Cada asistente sembró con generosidad para llevar amor, esperanza y el abrazo del Padre a cientos de niños que lo necesitan.
Una noche épica. Un comienzo inolvidable. Y apenas el primer paso de un tour que promete transformar cada ciudad que visite.



