El gobierno estadounidense, del estado del sur del país, presentó un proyecto que impedirá casi por completo realizar la práctica en este territorio.
La medida establecerá que sólo se pueda permitir el aborto en ocasiones de urgencia médica en el que la madre tenga riesgo de perder su vida. El senador republicano, Jason Rapert, confesó “debemos abolir el aborto en esta nación tal como abolimos la esclavitud en el siglo XIX, todas las vidas importan”.
Arkansas se convirtió el martes en el primer estado en este año, en promulgar una legislación que no permitirá realizar la práctica casi en la totalidad. Actualmente, se establecen ya algunas restricciones al aborto en el estado, las cuales son, que los solicitantes deben recibir una advertencia en persona de sus proveedores con 72 horas de anticipación y que, después de las veinte semanas no está permitida la práctica, excepto en casos de violación, incesto o peligro de muerte u otro peligro físico grave para la mujer embarazada.
La medida presentada quiere renovar ser una normativa en contra del histórico fallo Roe v. Wade de 1973 en el que se legalizó el procedimiento a nivel nacional. El gobernador, Asa Hutchinson, expresó que este proyecto “está en contradicción con los precedentes vinculantes de la Corte Suprema de los Estados Unidos, pero la intención de la legislación es sentar las bases para que se revoque la jurisprudencia actual”.
La legislación entrará en vigor dentro de noventa días, después del final de la sesión legislativa de Arkansas, que está programada para el 3 de mayo. La ley aclara que se busca agregar a la ley que ya tiene el estado, la prohibición de realizar la práctica en casos de violación, incesto o anomalías fetales. En caso de que se transgreda la próxima normativa, se establecerán multas de hasta cien mil dólares y hasta diez años de prisión.
Meagan Burrows, abogada del personal del Proyecto de Libertad Reproductiva de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles, aclaró que hay intenciones de que desafie la ley la empresa Planned Parenthood Federation of America y Planned Parenthood Great Plains. «La Corte Suprema tiene unos 20 proyectos de ley frente a ellos que podrían aceptar si quisieran», declaró Gloria Pedro, gerente regional de políticas públicas y organización de dicha institución.
El senador Rapert enfatizó «¿cómo podríamos mirar a un bebé humano y decir que no es digno de la vida simplemente porque su nacimiento fue el resultado de un acto violento?». Durante los últimos veinte años, se estableció que los estados del sur y el centro de Estados Unidos son los que mayores restricciones incrementaron ante el aborto, por lo que se espera que esta normativa en Arkansas sea aceptada e impulse a otros mandatarios tomar la misma decisión.