Porque nos fue dada “gracia sobre gracia”. Esto representa un continuo fluir, sin límite, de la gracia de Dios representada en Jesús, que está disponible constantemente para nuestra vida.
El alma es un espacio de construcción. Todo lo que conocemos del alma humana es aquello que fue contraído en algún momento del tiempo. Es tan así que usted nunca verá a un bebé recién nacido buscando un psicólogo.