«Una fe que rompe estructuras», Marcos 2:1-5.
Muchas veces el pudor, la vergüenza o el miedo de ir en contra de lo «moralmente correcto» hace que nos perdamos de muchos milagros y encuentros íntimos con el Señor. En este caso, estos compañeros fueron capaces de arriesgarse a romper estructuras para conseguir un milagro, no para ellos, sino para su amigo.
Este pasaje es un incentivo para todos los que hoy nos vemos limitados por muchos aspectos en nuestra fe; para que podamos animarnos a no solo mirar de lejos lo sobrenatural en Dios, sino acercarnos, así sea que tengamos que romper algunos techos y arriesgarnos a quedar «en ridículo».
Cada llamado es diferente, pero igual de importante. En mi caso, toda mi vida sentí un fuerte peso por lo artístico y lo pastoral a la misma vez; pero esto, lejos de ser algo fácil de sobrellevar, me representó un gran desafío. ¿Cómo puedo mezclar ambas cosas, y que funcione?
Entonces pensé, ¿por qué no empezar a hacer algo con lo que tengo, si por algo lo tengo? Y así surgió la idea de comenzar este cómic, que es un breve resumen y explicación de algunos pasajes (a veces complicados de entender), pensado para adolescentes y jóvenes (y adultos también).