Luego de la aprobación en Argentina, organizaciones de la marea verde intentan apurar el tratamiento de ley en la cámara baja de Chile.
En el día de ayer, la Comisión de Mujeres y Equidad de Género de la Cámara de Diputados y Diputadas inició sesión para discutir la aprobación del aborto legal hasta la semana 14 de gestación.
El proyecto que se debate tiene el objetivo de ampliar la despenalización de la práctica que, en la actualidad, solo es permitido en caso de que la vida de la madre se encuentre en riesgo de muerte o el embarazo sea producto de una violación o haya inviabilidad de vida extrauterina del bebé en gestación.
La diputada opositora Maite Orsini, del bloque Revolución Democrática, publicó en su cuenta de oficial de Twitter “que Chile se vista de verde”, y se mostró confiada en la sanción del proyecto, considerando que se aprobará “lo antes posible”.
Jaime Bellolio, portavoz del presidente Sebastián Piñera, respondió a las declaraciones de la diputada Maite Orsini y aseguró que “el Presidente Piñera ha sido muy claro, que este Gobierno no está a favor del aborto sin causales, esa es una discusión que el Parlamento puede dar, la va a dar ahí mismo en el Congreso”.
María José Hoffman, diputada oficialista de la Unión Democrática Independiente (UDI), aseguró que la iniciativa “es un paso hacia el aborto libre”, y aseguró que “desde la UDI vamos a rechazar este proyecto”. En una misma línea se manifestó la diputada Nora Cuevas, quien consideró que “es insólito hablar de aborto con todo lo que tenemos a la mano para evitar un embarazo”.
En una encuesta realizada recientemente, el 56% de los chilenos afirman estar en contra del aborto, excepto en circunstancias específicas como un abuso sexual. Mientras que un 27% de la población cree que debe permitirse bajo cualquier circunstancia.
El proyecto de ley prevé la modificación del Código Penal chileno, para que las penas previstas por la interrupción de los embarazos, cuando la práctica no estuviera justificada por una de las causales, tenga vigencia sólo después de las catorce semanas de gestación. Previo a ese plazo, la interrupción del embarazo no sería punible.