Nuestra primera entrevista en este ciclo que comienza este 2023 fue con el pastor David Greco que junto a Sebastián Liendo reflexionaron sobre ¿Es importante ser discipulado? ¿Por qué muchos cristianos viven en insatisfacción? ¿Puedo representar a Dios en la tierra?
El discipulado que Cristo quiere
Sebastián Liendo: A veces observo mucha tendencia en el discipulado, que entendido fuera de esta verdad, puede rozar casi la manipulación. Y hemos caído como Iglesia mucho en ese problema de querer controlar la vida de las personas en vez de entender que las ovejas son de Dios y que tienen que ser guiadas a Él.
David Greco: Sí, esto lo escucho mucho. La gente que supuestamente están discipulando y dicen ‘este es mi hijo espiritual’, ‘esta es mi hija espiritual’, no, yo no tengo hijos espirituales. Los que están conmigo son hijos de Dios, no son mis hijos, son de Él. Entonces, el verdadero discipulador prepara a hombres y a mujeres para que sean hijos de Dios, para que lo sigan a Él, no a mí.
Entonces un hijo de Dios que tiene una identidad clara de que es un hijo de Dios, un discípulo, va a hacer lo mismo con otros y es una casa, una familia que está discipulando a hijos e hijas de Dios.
SL: Pablo dice: “Confírmense en la fe” y es un concepto súper interesante como comunidad el hecho de confirmarnos en la fe.
DG: Afirmarnos, fortalecernos.
SL: Claro, fortalecernos, afirmarnos, confirmarnos es un hecho como que toda incidencia o acción que nosotros tengamos sobre el hermano que sea confirmarlo o afirmarlo en Cristo.
Iconos de Cristo
DG: Me voy a concentrar en la palabra imagen. Nosotros estamos hechos a la imagen y semejanza de Dios, pero eso está en Génesis, eso es antes de la muerte del hombre.
Ahora nosotros recibimos a Jesús, recibimos su vida y ahora verdaderamente somos transformados a la verdadera imagen de Cristo. Me encanta la palabra imagen es la palabra icono.
Vos tenés una computadora, ¿Qué hay en tu pantalla?
SL: Iconos.
DG: ¿Tenés el ícono de Google? ¿Qué sucede cuando tocas el ícono? Sale todo. Te metes en un mundo con 4 mil millones de documentos, te sale toda la actividad del mundo etéreo. Mira lo que dice la Biblia, ‘Yo soy un icono de Cristo’. Y si alguien me toca, ¿Qué se tiene que salir? Cristo, la vida de Cristo. Eso es un proceso de transformación, porque nosotros estamos hechos a la imagen de Dios, pero ahora somos transformados porque lo contemplamos, lo seguimos.
Contemplar al Señor es, Él es mi ejemplo, mi guía, mi verdad, mi visión. Entonces si yo hago eso, soy transformado, a través de la metamorfosis, para que sea un icono de Cristo a la imagen de Cristo. Entonces, ¿Qué pasa con el mundo? El mundo me toca. Me pisan el pie, me insultan, me desprecian, me acusan falsamente, me están tocando, pero me sale Jesús. Eso es ser un discípulo.
Nadie puede hacerte feliz
DG: En un matrimonio la mayoría de personas se enamoran con un concepto de que esta persona me va a hacer feliz.
SL: Un media naranja, se podría decir.
DG: Claro «La otra mitad, la media naranja”. “Esta persona me va a completar, me va a hacer, me va a hacer feliz”. Bueno los científicos dicen que el enamoramiento dura 18 meses, pero porque eso del enamoramiento es todo un complejo químico. Es decir, te dura 18 meses. Después te das cuenta que esa persona no te va a hacer feliz, no es la persona que te hace feliz. Hay personas que sufren toda su vida y después de 40 años se divorcian.
Y uno dice “pero escúchame, vivieron 40 años ¿y se van a divorciar?. ¿Cómo? Y bueno porque vivieron toda una vida de crisis donde tenían la falsa expectativa de que la otra persona lo iba a ser feliz. Ninguna persona me va a hacer feliz, ninguna persona me puede llenar, satisfacer solamente, solamente la vida de Cristo, solamente Jesús. Pero cuidado! Otra vez estamos haciendo la diferencia entre creyente y discípulo.
Esto de “bienaventurados los que lloran, porque ellos serán satisfechos”, te voy a decir cómo empieza. Mateo 5: “y Jesús se subió al monte y empezó a enseñarles a sus discípulos”. Entonces es como que Jesús está diciendo “esto no es para cualquiera, es para un discípulo que me está siguiendo”. Entonces por ejemplo yo me casé y a mi no me enseñaron todas estas cosas, las tuvimos que aprender en el camino y uno rápidamente se da cuenta. Por ejemplo, gente que va a una iglesia y dice “no me gusta, no me llena, no hay palabra, no hay profundidad, no hay esto, no hay lo otro”.
Nadie te va a llenar, solamente la vida de Cristo, que la tengo que vivir diariamente, con una transformación diaria, seguir a Cristo a diario, todo lo que tiene que ver y está todo en el proceso de reconocer. El quebrantamiento significa “yo me quebranto y yo entiendo que no soy o que no es otra persona, o que no es un grupo de personas, es Él”.