¿Qué pasó con el Evangelio?

Al tomar en nuestras manos una obra cuyo autor es el prestigioso teólogo Robert Kendall, deberíamos saber que contaremos, sin dudas, con un excelente libro, que junto con otros reconocidísimos títulos tales como “Perdón total”, “Fuego Santo”, “40 días con el Espíritu Santo”, serán ejemplos de sus más de 50 escritos. Pero no sería ni para nosotros, ni para su escritor, suficiente la excelencia del contenido, sino que, en todos y cada uno ha tenido el cuidado de incluir, como explica Kendall, la Palabra y el Espíritu sostenidamente a lo largo de todo su ministerio.

Llegado al punto cúlmine de su carrera ministerial, el maestro Kendall ha descartado lo más insignificante y ha rescatado lo más importante en la vida de todo cristiano, llegando así a la conclusión increíble de saber que se ha ido perdiendo a lo largo del tiempo lo esencial: el significado del Evangelio.

“SI LA RAZÓN POR LA QUE DIOS ENVIÓ A SU HIJO AL MUNDO A MORIR EN UNA CRUZ PARA QUE PODAMOS CREER EN ÉL Y NO PERECER, SINO TENER VIDA ETERNA (S. Juan 3:16) NO ES LO PRIMERO, ENTONCES NO SÉ QUÉ SERÁ”.

Debería éste, al menos, ser el primer contenido del Evangelio, cita el autor, pero para muchos líderes e iglesias no parece ser lo primero, asegura. El Evangelio se ha ido esfumando de a poco llegando al punto límite de desaparecer. Frente a esta triste e inquietante realidad de los cristianos y las iglesias, el Dr. Kendall ha visto la necesidad imperiosa de desarrollar este escrito. 

¿Qué pasó con el Evangelio?, fue en principio una meditación personal, que luego de una exhaustiva evaluación se convirtió en un planteo general que le dio título a este maravilloso libro de preguntas y respuestas. ¿Se ha preguntado alguna vez qué es el Evangelio? ¿Ha pensado cuál es el contenido del Evangelio? ¿Sabe con exactitud cuál es el verdadero Evangelio? Si acaso alguna de las respuestas contiene dudas, no podrá usted dejar en ninguna estantería este libro, debe tomarlo y leerlo con detenimiento.

 “EL EVANGELIO FUE DEJADO A UN LADO Y NADIE PARECIÓ NOTARLO”.

Todo cristiano debería saber con claridad qué es el Evangelio, sin embargo, hay un gran desconocimiento que trae consigo los problemas más graves que existen hoy en día en los creyentes y en consecuencia inmediata, en las iglesias: un evangelio distorsionado y pervertido, corrido y alejado de la verdad. Esta problemática conclusión es el resultado de una larga investigación del pastor y Maestro Kendall, lo que ha dado base sólida al propósito claro de este libro: mostrar lo que el Nuevo Testamento quiere decir con Evangelio y mostrar cómo podemos estar seguros de que iremos al cielo al morir.

En este libro encontrará la definición de Evangelio, ya que es relevante que todos conozcamos esta verdad.

“EL EVANGELIO ES ASOMBROSAMENTE SIMPLE”.

El Evangelio es tan simple que la ausencia de éste es a causa de su mala presentación o su falta de comprensión, por sobre todas las cosas, cita como resultado de su investigación personal el autor, la falta de lectura de la Palabra de Dios en los cristianos, recordando la misma inquietud que tuvo el reformador Lutero cuando dijo: “¿Cómo pueden enseñar a otros a obrar cuando en realidad no conocen la Palabra?”.

“UNA DE LAS PRINCIPALES RAZONES POR LA QUE ESTO OCURRE, ES PORQUE PARECE DEMASIADO BUENO PARA SER VERDAD: SOMOS SALVOS POR LO QUE HIZO UN TERCERO”. 

Alguien pagó nuestra deuda, y esto es solo el principio, luego, cada capítulo desarrollará la verdad del Evangelio, sin dejar de descubrir detalladamente las problemáticas que tenemos en la actualidad, tales como distintos evangelios, temas que nadie debería desconocer porque todos ellos opacan el atributo distintivo del Evangelio verdadero.

“MAS SI AÚN NOSOTROS, O UN ÁNGEL DEL CIELO, OS ANUNCIARE OTRO EVANGELIO DIFERENTE DEL QUE OS HEMOS ANUNCIADO, SEA ANATEMA. Gálatas 1:8”.

Es de vital importancia para cada cristiano, tal cual considera el escritor de este libro de puro contenido bíblico, que conozca y sepa diferenciar lo verdadero de lo falso. Esencialmente del Evangelio (buenas noticias para la humanidad).

Anuncia entre sus líneas el autor que, a su edad, ochenta y dos años, no sabe cuántos días le quedan o cuántos libros más publicará, pero considera que este libro es muy oportuno y ha orado para que Dios lo use como una herramienta para despertar a los cristianos durmientes de todas las generaciones.

Este libro no solo es el producto de un tiempo de escritura, sino el resultado de un arduo y largo trabajo del maestro Kendall quien dice: “Mi comprensión del Evangelio se ha refinado durante los últimos sesenta años o más”. 

¡Considere a “¿Qué pasó con el evangelio?” un hallazgo entre la multitud de libros en cualquier estantería! ¡No querrá perdérselo!

Es un libro no solo para atesorar, sino para compartir con muchos.