A pesar de las restricciones por COVID-19 los manifestantes se reunieron una de las principales ciudades de Alemania.
El fin de semana pasado se unieron ochocientas personas para realizar la primera “Marcha por la Vida” en la capital de Baviera. La movilización se suele realizar en Berlín, cada mes de septiembre, y es la más importante del país. Ante el nivel de convocatoria, la prensa local se mostró sorprendida por el compromiso de los concurrentes en la lucha a favor de la vida.
Slija Fichtner, una de las organizadoras dijo a los medios de comunicación que “a pesar de las limitaciones relacionadas al coronavirus y el mal clima, nuestra movilización fue sumamente exitosa, con un nivel de convocatoria sorprendente que nos lleva a estar sumamente agradecidos”.
Todo transcurrió de manera organizada y pacífica, respetando los protocolos sanitarios como el uso adecuado de las mascarillas, la sanitización de las manos y el correcto distanciamiento social. El único inconveniente se registró cuando agrupaciones políticas de izquierda intentaron interrumpir la movilización, pero el accionar de la policía se logró disuadir a los opositores a la marcha.
El creciente número de personas que se manifiestan en contra del aborto en Alemania es realmente llamativo, ya que en el país europeo el aborto se encuentra despenalizado desde 1976.
La marcha de Múnich fue reconocida internacionalmente por otras organizaciones pro vida de países como, Australia, Croacia, España, Argentina, Estados Unidos, Bélgica, Italia y Austria.